Lengua y literatura

Novela sentimental: concepto, origen, características, autores


¿Qué es la novela sentimental?

La novela sentimental es un género literario que se popularizó en Europa a finales del siglo XVIII. Este estilo surgió, en parte, como una reacción a la austeridad y al racionalismo del período neoclásico.

En este género novelesco, el relato es hecho en primera persona, en tono quejumbroso y con estilo retórico. Relata los efectos de la pasión amorosa en una pareja de enamorados sometida a un amor cortés (platónico).

A menudo, la pareja se ve obligada a defender su honor. Ocasionalmente, durante el proceso reciben la ayuda de un tercero. Al final, la pareja de enamorados fracasa en su intento de estar juntos al no poder superar los escollos.

La novela sentimental exploró los sentimientos humanos y las relaciones humanas. De igual manera, sirvió para plantear temas sociales candentes como la injusticia o los matrimonios arreglados.

Con frecuencia, los novelistas se burlaban de las instituciones sociales y la hipocresía. En contraposición, el amor era visto como un sentimiento natural y como una fuerza social para el cambio que ordenaba el respeto universal.

Asimismo, la novela sentimental proclamó que la benevolencia era un sentimiento humano innato y que los elementos centrales de toda la moralidad son los sentimientos de simpatía y sensibilidad.

Origen histórico de la novela sentimental

Aunque la novela sentimental fue un movimiento desarrollado en el siglo XVIII,  muchas de sus características se pueden observar en la literatura del siglo XV. Algunos de sus rasgos están presentes en los libros de caballería.

De este modo, las particularidades del amor caballeresco se reproducen con algunas variaciones en el género sentimental. En el primero, la víctima del amor es un aguerrido caballero; en el segundo es un caballero cortesano.

La mujer objeto del amor, en ambos casos, es un dechado de virtudes humanas. La trama presenta situaciones de permanente amenaza a la  relación amorosa. En ocasiones, los finales son trágicos y azarosos.

En el siglo XVIII, el sentimiento y las emociones se convirtieron en el motivo central de la escritura creativa, especialmente en Gran Bretaña y, en menor medida, en Francia y Alemania.

El culto a la sensibilidad, que tuvo lugar aproximadamente entre las décadas de los años 40 y 70 del siglo XVII, fue un movimiento cultural dedicado a exhibiciones de emociones y virtudes que exigían lágrimas.

Entre otros, su auge se debe a una creciente hegemonía de los valores culturales burgueses, un declive en Inglaterra de la cultura aristocrática de la corte y la separación de las esferas pública y privada.

Además, por esta época comenzó la valorización de lo doméstico y familiar, y hubo un aumento en el tiempo de ocio debido a los avances de la Revolución Industrial.

Características de la novela sentimental

El juego de las emociones

La novela sentimental se basaba en la respuesta emocional, tanto de los lectores como de los personajes. Presentaba escenas de angustia y ternura, con una trama dispuesta para avanzar tanto en las emociones como en las acciones.

De este modo, se daba valor al sentimiento fino, mostrando a los personajes como un modelo de efecto emocional refinado y sensible.

Entretenimiento popular

La novela sentimental fue innovadora porque atrajo a una audiencia sin precedentes a la literatura. Su número de lectores no solo era numéricamente grande, sino que estaba compuesto por mujeres y hombres.

Esta audiencia estaba conformada por una clase social intermedia entre la nobleza y los trabajadores manuales. Este nivel social, bautizado como nivel medio, concibió el leer novelas como una variedad de entretenimiento.

Nuevos auditorios

Con un enfoque hacia la juventud, la novela sentimental incorporó un grupo social marginado hasta ese momento de las producciones literarias.

También, significó la entrada de las mujeres en la cultura literaria como lectoras y productoras de ficción en un momento cuando, en general, comenzaron a declinar en importancia económica.

A través de la simplicidad y naturalidad, la novela sentimental arrebató la exclusividad de la lectura a las clases altas. Asimismo, atrajo la atención de este nuevo auditorio hacia problemas sociales como los arreglos matrimoniales.  

Valores rurales

La idealización del paisaje natural y el subjetivismo son para muchos críticos las características más definidas en las obras sentimentales. Los protagonistas se identifican con su paisaje natal y logran que el lector también lo haga.

La típica novela sentimental lleva a su héroe o heroína del campo a la ciudad (lugar de vicio, corrupción y codicia), donde está angustiado y maltratado. El desenlace es un retorno a la reclusión en el campo y a los valores rurales.

Asimismo, la novela sentimental idealiza también el ambiente humano. Este es descrito como un paraíso de bondad en el que casi todos viven de amor cristiano. La convivencia humana es perfecta en todos los aspectos.

Recursos emocionales

La novela sentimental tiene como objetivo conmover el corazón de los lectores. Esto lo logra apelando a recursos literarios descriptivos o emocionales. A tal fin se usan: silbidos del viento, aullidos de perros lejanos, entre otros.

Representantes y obras

Samuel Richardson  (1689-1761)

Samuel Richardson fue un novelista inglés reconocido por ser el creador del estilo epistolar que amplió las posibilidades dramáticas de la novela. Sus principales obras fueron Pamela o la virtud recompensada (1739) y Clarissa (1747-48).

Asimismo, fue también autor de Tom Jones (1749), Una disculpa por la vida de la Sra. Shamela Andrews (1741) y La historia de Sir Charles Grandison (1753–54).

Jorge Isaacs (1837-1895)

La novela sentimental desarrolló un paisaje bucólico de gran belleza. Este es el caso de María (1867), del novelista colombiano Jorge Isaacs, donde el poderoso paisaje latinoamericano sirve de telón de fondo de esta historia.

María es el epítome de la clásica historia romántica: María muere mientras espera la llegada de su amado, Efraín, que había sido enviado a Londres para estudiar medicina.

Según los estándares actuales, su historia de amor es estereotípica: María depende de un protagonista masculino para su felicidad final. Después de la partida de Efraín, ella se enferma y entra en un declive fatal.

Laurence Sterne (1713-1768)

El irlandés Laurence Sterne es famoso, sobre todo, por sus novelas sentimentales: Viaje sentimental por Francia e Italia y Vida y opiniones del caballero Tristram Shandy. Su carrera como escritor comenzó poco después de su matrimonio con Elizabeth Lumley (1741).

Contribuyó al York Gazetteer, un texto político iniciado por su tío, y publicó El mundo desconocido en 1743. Alrededor de una década más tarde publicó A Political Romance (1759), que satirizaba a un corrupto funcionario local.

Ese mismo año Sterne publicó Tristram Shandy en dos volúmenes; la impresión inicial fue poca, pero inmediatamente obtuvo fama y atención.

En los años siguientes, Sterne emitió más volúmenes de Tristram Shandy y pasó un tiempo en París para buscar mejoras en su salud.

Jean-Jacques Rousseau (1712-1778)

La novela de Rousseau Julia, o la nueva Eloísa (1761) intentó retratar en la ficción los sufrimientos y la tragedia de la educación y las costumbres sociales restrictivas de la época.

La obra se estructuró como una novela epistolar, a la manera del autor inglés Samuel Richardson (1689-1761). Su originalidad le ganó críticas duras, pero su naturaleza sexual la hizo inmensamente popular entre el público.