Duque de Riivas: quién fue, bografía y obras
¿Quién fue el duque de Rivas?
Ángel Saavedra y Ramírez de Baquedano, III duque de Rivas (1791-1865), fue un dramaturgo, poeta, pintor e historiador español, además de estadista, pues estuvo vinculado con los poderes legislativos y ejecutivos de España.
Su estilo literario perteneció al Romanticismo, y se caracterizó por el reconocimiento a la personalidad individual y al subjetivismo. Su obra más trascendental fue Don Álvaro o La fuerza del sino, de 1835.
Fue embajador en Nápoles y París, ministro de la Gobernación y de Marina, presidente del Consejo de Estado y director de la Real Academia Española.
Biografía del duque de Rivas
Nacimiento y familia
El duque de Rivas nació en Córdoba el 10 de marzo de 1791. Descendió de una familia de abolengo. Su padre fue Juan Martín Pérez de Saavedra y Ramírez, quien tuvo el título de Grande de España. Su madre fue Dominga Ramírez de Baquedano, marquesa de Auñón.
Rivas fue el segundo de dos hermanos, razón por la cual fue destinado a la carrera militar. Cuando tenía seis meses de haber nacido, recibió la distinción de Caballero de Justicia de la Orden de Malta.
Infancia y juventud de Rivas
Desde temprana edad su educación estuvo confiada a profesores franceses, sacerdotes exiliados tras la Revolución francesa. Aprendió artes militares, literatura, protocolo y etiqueta, así como política.
Fue nombrado capitán de Caballería del regimiento del Infante a los siete años. A los 9, fue caballero de las órdenes de Santiago y Malta y su niñez transcurrió entre monarcas y castillos.
En 1800, junto a su familia, se trasladó de Andalucía a Madrid, para evitar el contagio de la fiebre amarilla. A los dos años de establecerse en la capital española murió su padre.
Entre batallas, huidas y literatura
A su salida del seminario formó parte de la guardia que luchó en Francia junto con Napoleón Bonaparte, aunque su madre consiguió su traslado a la Guardia de Corps como alférez sin despacho. Allí hizo amistad con algunos escritores, y comenzó a relacionarse con la literatura.
Cuando surgió la conspiración política del Príncipe de Asturias, escribió A la Declaración de España contra los franceses, entre otros poemas. Cuando comenzó la Guerra de independencia, desertó de la Guardia Real y se unió a las tropas que luchaban contra los franceses.
Peleó en varias batallas. En una de ellas fue herido y dado por muerto. Mientras se recuperaba, escribió el poema Con once heridas mortales. Como España estuvo sometida por Francia, aún convaleciente, tuvo que huir de Córdoba hacia Málaga, Gibraltar y Cádiz.
Después de su recuperación le dio rienda suelta a su talento para escribir. En Cádiz concretó sus Poesías, en 1814. Ataúlfo también fue de esa época. En Sevilla estrenó con éxito, el 8 de julio de 1816, su obra Aliatar, y al año siguiente Doña Blanca.
Dentro de su carrera militar participó en el golpe de estado del político y militar Rafael del Riego Núñez. Eso le trajo como consecuencia la incautación de sus bienes, y ser condenado a muerte. Huyó a Inglaterra, y durante casi siete años se exilió entre París y Malta.
Últimos años y muerte
Con la muerte de Fernando VII pudo regresar a España gracias a la amnistía. En 1834 murió su hermano, él recibió el título de duque y heredó todo el patrimonio familiar. Siguió haciendo vida política y desarrollando sus obras literarias.
El duque de Rivas se desempeñó como ministro en España, además de embajador y senador en Nápoles y Francia. También destacó como director de las Academias de la Lengua e Historia. Murió a los 74 años el 22 de junio de 1865.
Obras de Duque de Rivas
Las obras del duque de Rivas pertenecen al Romanticismo. Se caracterizaron por el amor y la fatalidad, el poder y la autoridad, con típicos elementos históricos y de caballería. El ideal de libertad estuvo siempre presente.
En su obra mezcló prosa y verso. Combinó la tragedia con la comicidad y buscó idealizar la belleza. Dejó de lado las unidades de tiempo, espacio y acción para concentrarse en el sensacionalismo de las escenas.
Los protagonistas de sus escritos tenían orígenes misteriosos y oscuros. El autor los convertía en víctimas del destino.
A continuación se describen algunas de las obras más importantes de este escritor:
Don Álvaro o La fuerza del sino (1835)
Es su obra más famosa y la que inaugura el teatro romántico español. Se estrenó en Madrid el 22 de marzo de 1835. El autor profundizó en temas como el amor, el honor, la religión, la venganza, así como el sino, es decir, la fatalidad, el destino.
El escritor ambientó la obra en Sevilla, durante la Guerra de Sucesión Española, en el siglo XVIII. El protagonista, don Álvaro, es misterioso y solitario, y está enamorado de la joven Leonor. Sin embargo, el padre de ella no aprueba la relación, porque a su parecer el joven no tiene buenas cualidades.
Con la fuga de los amantes, la historia da un giro. El marqués de Calatrava los atrapa, y de ahí en adelante comienzan los eventos trágicos. Fue escrita en prosa y verso, desarrollada en cinco actos.
Con once heridas mortales (1809)
Con este poema el duque de Rivas narró un episodio de su vida. Se inspiró en el combate contra los franceses, donde quedó gravemente herido, y por algún tiempo fue dado por muerto. Lo compuso mientras estuvo en el hospital.
Lanuza (1822)
Tragedia teatral desarrollada en cinco actos. Su argumento es una fuerte crítica al absolutismo de la época.
Lanuza, el personaje principal que representa a la justicia, fue condenado a muerte por defender los derechos de sus paisanos.
El desengaño de un sueño (1842)
Los críticos afirman que se deriva de las comedias de magia. Es decir, una historia de tristeza, decepción y amor.
Los personajes eran seres reales y fantásticos, más de 28 en total. Lisardo fue el personaje principal, y su participación era una voz invisible, como el viejo mágico Marcolán. Se ambientó en el Mediterráneo, durante el siglo XIV.
Los Hércules (1838)
Obra de teatro escrita en prosa, ambientada en Sevilla. Fue una especie de homenaje nostálgico al conocido paseo la Alameda Vieja. Describe la belleza del lugar, y menciona las estatuas de Julio César y de Hércules.
Romances históricos (1841)
En ella el escritor hizo una reseña sobre el origen, el proceso de avance y a la vez la caída de este género de la poesía dentro del lenguaje castellano. Consideraba que los romances expresaban con entusiasmo la fuerza de los pensamientos y las emociones.
El crisol de la lealtad (1842)
Drama romántico desarrollado en tres actos, y ambientado en Zaragoza, en 1163. Los personajes son 21, el principal el de la reina de Aragón. Se desencadenan distintas tragedias, hasta llegar a la muerte.
La morisca de Alajuar (1841)
Comedia ambientada en Valencia, entre 1509 y 1610. El escritor la desarrolló en tres actos o jornadas, y hay situaciones amorosas.
Otras obras
Además de las obras anteriormente descritas, destacan las siguientes:
Poesía
– Florinda (1826)
– El moro expósito (1834).
– A Dido abandonada (soneto)
– Mísero leño (soneto)
– Receta segura (soneto)
– Un buen consejo (soneto)
Teatro
– Aliatar (1816)
– El faro de Malta (1828)
– Tanto vales cuanto tienes (1840)
– La azucena milagrosa (1847)
Referencias
- Duque de Rivas. Recuperado de wikipedia.org
- García, S. (S. f.). Biografía del Duque de Rivas. Recuperado de cervantesvirtual.com
- Duque de Rivas (1791-1865). Recuperado de ensayistas.org