Cultura general

Los 11 mitos de Guatemala más populares


Entre los mitos de Guatemala más conocidos se encuentran la Tatuana, el Cadejo, el sombrerón, el tesoro del lugar florido, las tablillas que cantan, el origen del quetzal de barriga roja, entre otras.

Los mitos guatemaltecos han sido interpretados hoy en día como una manera de preservar el pasado y la tradición indígena en tiempos donde predomina el desarrollo de urbes y el uso de la lengua española y sus tradiciones.

Múltiples regiones de América comparten mitos similares, puesto que fueron recopilados después de la colonización de los españoles y comparten un pasado histórico similar.

Mitos de Guatemala más populares

1 – La Tatuana

La Leyenda de la Tatuana habla de un árbol de almendras sagrado, encargado de salvaguardar las tradiciones mayas. Este árbol lleva la cuenta del paso de los años y divide su alma en los cuatro caminos que pueden ser encontrado antes de llegar al inframundo, conocido como Xibalbá.

Los cuatro caminos del alma del árbol tienen diferentes colores (verde, rojo, blanco y negro). Según la leyenda, el alma siempre se divide para recorrer los cuatro caminos, en cada uno de ellos deberá enfrentar tentaciones.

De esta manera, el camino negro simboliza para los mayas la ruta que lleva al inframundo, en el cual se debe intercambiar parte del alma con el mercader de las joyas invaluables, quien luego utilizará esta para obtener el esclavo más hermoso.

En la leyenda, el esclavo escapa y es amenazado de muerte por los inquisidores que le encuentran. Durante la noche el esclavo es encontrado por el árbol.

De esta forma, logra escapar de la prisión donde es recluido antes de ser ejecutado. Cuando los captores llegan a la mañana siguiente a la prisión, lo único que encuentran es un viejo árbol de almendras.

2- El Cadejo

Esta leyenda habla de una novicia de suprema belleza, quien posteriormente pasará a convertirse en la Madre Elvira de San Francisco. Esta mujer vivía en un convento, el cual describe desde una perspectiva emocional a lo largo de la leyenda.

La Madre Elvira de San Francisco se encuentra profundamente consternada porque su trenza incita a la excitación física y sexual de los hombres. Esta perturbación la lleva a cortársela.

Una vez es cortada, se convierte en una serpiente que se enrolla alrededor de una vela encendida, haciendo que su llama se desprenda y mande a los hombres al infierno (Sanles, 2016).

3- El sombrerón

El protagonista de esta leyenda es un monje que es tentado por una esfera que se balancea a través de la ventana hasta entrar en su celda.

El monje se encuentra cautivado por la esfera y empieza a preguntarse si ésta se encuentra relacionada con el diablo. A pesar de sus pensamientos, el monje pasa horas jugando con la esfera.

Posteriormente, encuentra a una mujer que reclama la esfera, pues ésta le pertenece a su hijo. Ante la posibilidad de entregar la esfera, el monje se siente compungido.

Los vecinos comienzan a señalar que el monje se parece al diablo y eventualmente se deshace de la esfera, devolviéndosela al niño que la reclama con la mirada nublada. La esfera se convierte entonces en un sombrero negro que cae sobre la cabeza del niño.

4- El volcán

La leyenda comienza con seis hombres, tres que surgieron del agua y tres que surgieron del viento. Sin embargo, sólo tres de estos hombres se podían ver. Cada grupo de hombres interactuaba con la tierra de forma natural, alimentándose de todo lo que ella les diese.

Un día, al caminar los hombres, encontraron a Cabrakán, una montaña capaz de escupir fuego. De esta forma, Cabrakán estalló en llamas y fue abrazada por Hurakán, una montaña de nubes que buscaba abrir la cima de Cabrakán al pelar su cráter con las uñas.

Todos los hombres, menos uno, fueron arrasados y el bosque de árboles donde vivían fue destrozado. El hombre sobreviviente recibía el nombre de Nido.

Nido caminó siguiendo la voz de su corazón y alma hasta encontrarse con una trinidad sagrada que le indicaba la construcción de un templo. De esta manera, Nido construyó su templo y alrededor de éste, hizo 100 casas, donde viviría su pueblo. El volcán cesaría su actividad y el bosque volvería a florecer.

5- El tesoro del lugar florido

La leyenda habla de la llegada de los españoles al territorio guatemalteco, durante la celebración de los nativos por el fin de la guerra. La celebración tenía lugar en el lago, cerca de un volcán “el Abuelo del Agua”, lugar donde estaban escondidos los tesoros de la tribu.

Se cuenta cómo a la llegada de los españoles, los nativos comenzaron a huir mientras los escuadrones de hombres blancos se acercaban al tesoro del lugar florido en el volcán.

Los hombres blancos sintieron el rugido del volcán, pero hicieron caso omiso a éste, guiados por su ambición o codicia. Una vez desembarcaron, el volcán les escupió fuego como si se tratase de un sapo.

Tanto los caminos, como los tesoros y los españoles fueron arrasados por el fuego del volcán, acallando el sonido de las trompetas y los tambores. Las tribus lograron huir, pero los españoles cayeron a los pies del tesoro del lugar florido.

6- Las tablillas que cantan

La leyenda cuenta que, sin importar el recinto, los mascadores de luna les pondrían tablillas cubiertas con símbolos y signos pintados para cantar y bailar.

Estos cánticos eran himnos a los dioses y después de ser repartidos por los mascadores de Luna, estos se camuflarían entre la muchedumbre y realizarían actividades cotidianas.

Desde estos lugares, los mascadores de luna seguirían comiendo luna en cada una de sus fases. Cada tablilla compuesta por estos personajes debía ser cantada, de lo contrario era quemada.

De esta forma, los mascadores de luna deberían volver a internarse en el bosque a componer cánticos nuevos para que fuesen catados en las celebraciones.

Cuando uno de estos individuos no lograba que su tablilla fuera cantada por séptima vez, era sacrificado en un ritual grotesco y el corazón le era extraído.

La leyenda dice que Utuquel, un mascador de luna, temía por su sacrificio, pues ya le habían rechazado seis veces y en la entrega de su séptima tablilla anunciaba que su creación era un robo, que no era original y que sus consejos eran tomados de la vida de los mismos lectores, por esto creía que toda creación es ajena.

7- La máscara de cristal

Cuenta la leyenda que un escultor habilidoso de nombre Ambiastro, puesto que en vez de manos tenía astros, huyó de su pueblo con la llegada del hombre blanco y se internó en una caverna en las montañas, desde la cual esculpiría sus maravillosas obras en roca.

Un día, Ambiastro, hastiado de esculpir en roca y reluctante a esculpir en madera (por su poca durabilidad) sale en busca de nuevos materiales. Al acercarse a un arroyo es cegado por el brillo del cristal de roca y decide tallarlo.

Ambiastro pasó días y noches en vela esculpiendo el cristal, su cara era cortada por el cuarzo y barría el suelo solo para espantar la penumbra. Finalmente, terminó de esculpir la máscara de la diosa Nana Lluvia y volvió a su cueva.

Al volver, las figuras que ya había esculpido le golpearon con el objetivo de matarle. De esta manera, Ambiastro se puso la máscara de Nana Lluvia para escapar, pero cuando logró salir de la cueva, ya era tarde, ya estaba muerto.

8- La campana difunta

Cuenta la leyenda que tres fundidores asturianos llegaron a Guatemala a finales del siglo XVII. Estos fundidores se encargaban de fabricar campanas para iglesias y de esta forma iban recorriendo América y se marchaban de regreso a España.

Llegados al convento de las monjas clarisas, los asturianos iniciaron el proceso de fundición para la campana de su iglesia, de esta forma recolectaron oro de todas las monjas.

Cada monja entregaría su joya más preciada a los fundidores y vería como ardería esta joya. Sor Clarineta de Indias era una monja de ojos amarillos como el oro, que no tenía ningún tipo de joya para entregar a la fundición.

Por sugerencia de una compañera y con la fijación de hacer un mayor sacrificio que las demás, Sor Clarineta decide en sueños sacarse los ojos y echarlos a la fundición. De esta manera, la campana sería la de Santa Clara de Indias y haría honor a su sacrificio.

Después de su sacrificio, Sor Clarineta pide ser absuelta por su soberbio sacrificio, petición que le es negada. Se dice que, al sonar la campana por primera vez, ésta pedía a gritos ser absuelta, como lo hizo Sor Clarineta después de entregar sus ojos.

9- Los matachines

La leyenda de los matachines cuenta que un parte de habitantes de Machitán, llamados Tamachín y Chitanam, conocidos como los matachines, prometieron que si la matachina (su amada) estaba muerta, ellos mismos se batirían en duelo hasta la muerte.

Llegados al pueblo, fueron a una casa de citas, donde una vieja llamada la Pita-Alegre les contó que la matachina estaba muerta, pero que en las noches cobraba vida, pues soñaba que estaba viva.

La Pita-Alegre seguía perfumando y bañando el cuerpo de la matachina para que los clientes degenerados y borrachos la usaran. Ante este escenario, los matachines le cortaron las manos a la Pita–Alegre.

Resueltos los matachines, decidieron batirse en duelo hasta la muerte, pero antes de esto, se encontraron con el mono Telele y el Gran Rasquinagua, protector del bosque que soñaba con los ojos abiertos.

De esta forma, Rasquinagua les promete que pueden morir y volver a la vida, y les da unos talismanes para resucitar.

Los matachines acceden a este pacto y se baten en duelo hasta la muerte, destrozando sus cuerpos con los machetes. Al volver a la vida, vuelven como montaña y árbol, reconociéndose con el paso del tiempo, decididos al volver a Machitán.

10- El origen del quetzal de barriga roja

El quetzal es el ave nacional de Guatemala y una de las aves más imponentes de América. Cuenta la leyenda guatemalteca que el quetzal voló sobre el conquistador español Don Pedro de Alvarado cuando éste estaba luchado contra el líder maya Tecun Uman, con el objetivo de protegerlo.

Sin embargo, Tecum Uman fue matado y el imperio maya fue derrotado a manos de los españoles. Se dice que la barriga del quetzal es roja porque está machanda con la sangre de Tecun Uman.

También se dice que la canción del quetzal es muy hermosa, pero que éste no la cantará hasta que el pueblo de Guatemala sea completamente libre.

11- La Sihuanaba

La Sihuanaba es un espíritu que puede cambiar de forma. Usualmente tiene el cuerpo de una mujer atractiva cuando se le ve por la espalda.

De cabello largo y usualmente desnuda, o llevando solo un vestido blanco vaporoso, atrae e los hombres mientras se baña en la noche. Ningún hombre ve realmente su rostro (de caballo o calavera), hasta que están lo suficientemente cerca como para no poder salvarse.

La Sinhunaba en Guatemala aparece para castigar a los hombres infieles. De esta manera, ella los lleva a un lugar solitario donde después de paralizarlos del miedo, les roba el alma. Esta leyenda fue traída a América por los colonizadores españoles, con el fin de controlar la población loca.

Otras leyendas de Guatemala

Dentro del folclore guatemalteco se pueden encontrar leyendas típicas de toda América, como la llorona, el cuco, la luz del dinero, el chupacabras, el cipitío, la ciguapa y los duendes.

Estas leyendas usualmente fueron usadas como estrategias para controlar a la población al infundirles miedo de estar solos en las noches haciendo cosas indebidas.

La mayoría de leyendas guatemaltecas fueron creadas a partir de la mezcla cultural entre los españoles y los indios nativos americanos.

Referencias

  1. Asturias, M. A. (1930). Leyendas de Guatemala.
  2. About Travel. Obtenido de Central America Folklore and Legends: gocentralamerica.about.com.
  3. What to do in Guatemala. Obtenido de El Sombreron: quepasa.gt.