Gabriel Zaid: biografía, estilo, obras y frases
Gabriel Zaid (1934) es un escritor, poeta y ensayista mexicano, cuya obra es de las más vigentes y reconocidas en este siglo. Si bien todo su trabajo literario ha sido prolífero, donde más reconocimiento ha obtenido es en el género del ensayo, en el que ha abarcado la política, la historia, la economía y la cultura de su nación.
La obra de este autor se caracteriza por ser precisa y clara en cuanto a lenguaje, a pesar de presentar contenidos complejos en ciertas oportunidades. Algunos de los títulos más destacados son: Fábula de Narciso y Ariadna, Campo nudista, Reloj de soly La poesía en la práctica.
De la vida personal de Zaid se sabe poco, eso tal vez debido a su personalidad reservada y un tanto misteriosa. Lo que sí se conoce es que es un hombre que ha procurado mantenerse actualizado dentro de la literatura mexicana, y que su labor como escritor lo ha hecho merecedor de muchos reconocimientos y premios.
Índice del artículo
Gabriel Zaid nació el 24 de enero de 1934 en Monterrey, Nuevo León. Los datos sobre su familia son escasos, pero se sabe que proviene de inmigrantes palestinos de clase media, que le inculcaron desde pequeño el amor al saber facilitándole una educación de calidad.
Los primeros años de educación de Zaid transcurrieron en su Monterrey natal. Después de terminar el bachillerato estudió ingeniería mecánica en el Instituto Tecnológico de Monterrey (ITESM), de donde egresó en 1955 a los veintiún años de edad.
El trabajo de grado con el cual recibió su titulación llevó por nombre Organización de la manufactura en talleres de impresión para la industria del libro en México y trató sobre todo lo referente a la industria del libro en México.
A los tres años de haberse graduado, Gabriel se marchó a la capital del país para abrirse paso profesionalmente, donde por aquellos entonces ya llevaba consigo su pasión por la literatura y la escritura. Comenzó a laborar en una oficina de consultores y rápidamente publicó su primer libro de poesía: Fábula de Narciso y Ariadna (1958).
Por esa época también trabajó de manera independiente y pasó a formar parte de la industria editorial. Para finales de la década de los sesenta logró un espacio en las páginas de La Cultura en México, en las que publicó algunos de sus ensayos.
Si bien el escritor ya había obtenido reconocimiento con sus primeros trabajos literarios, no dejó de producir. En 1969 y 1973 publicó dos poemarios: Campo nudista y Práctica mortal. Por esos años también salieron a la luz los ensayos: Leer poesía y Los demasiados libros.
El trabajo inteligente y meticuloso de Gabriel Zaid le abrió las puertas de varios medios impresos de su país, dándole mayor auge a su talento como escritor. Sus escritos salieron en: Plural, Revista de Bellas Artes, Vuelta, Universidad de México, por nombrar algunos medios. Además se destacó como columnista.
Los últimos años de vida de Zaid han transcurrido dedicados a la escritura y a la actividad editorial. Los detalles sobre su vida personal y familiar se desconocen porque es una persona que poco se deja ver, no suele dar entrevistas y por alguna razón no se deja fotografiar en actos públicos.
– Juegos Florales de Tehuacán en 1954, con el trabajo poético Fábula de Narciso y Ariadna.
– Premio Xavier Villaurrutia en 1972 por Leer poesía.
– Premio Banamex de Economía, mención honorífica en 1979 por el ensayo El progreso improductivo.
– Miembro de El Colegio Nacional a partir de 1984.
– Miembro de la Academia Mexicana de la Lengua desde el 20 de marzo de 1986. Luego ocupó la silla XVI el 14 de septiembre de 1989; sin embargo, trece años después decidió renunciar.
El estilo literario de Gabriel Zaid se ha caracterizado por ser innovador y reflexivo en cuanto a temas de interés. Sus escritos gozan de un lenguaje bien elaborado, claro y preciso, donde el humor y la sátira han sido rasgos sobresalientes.
Su poesía ha ido en constante evolución con un ritmo y musicalidad equilibrados. Si bien no es fácil de comprender, le exige a los lectores concentración, conocimiento y humor. Por otro lado, sus ensayos han sido profundos y reflexivos relacionados con la actualidad mexicana.
– Fábula de Narciso y Ariadna (1958).
– Seguimiento (1964).
– Campo nudista (1969).
– Práctica mortal (1973).
– Sonetos y canciones (1992).
– Reloj de sol (1995).
– Canciones de Vidyapati (2008).
– Organización de la manufactura en talleres de impresión para la industria del libro en México (1959).
– La poesía, fundamento de la ciudad (1963).
– La máquina de cantar (1967).
– Los demasiados libros (1972).
– Leer poesía (1972).
– El progreso improductivo (1979).
– La feria del progreso (1982).
– La poesía en la práctica (1985).
– La economía presidencial (1987).
– De los libros al poder (1988).
– Legítima defensa de la exención autoral que hacen numerosos autores mexicanos con buenas razones y ejemplos desde los tiempos prehispánicos (1993).
– La nueva economía presidencial (1994).
– Hacen falta empresarios creadores de empresarios (1995).
– Adiós al PRI (1995).
– Tres poetas católicos (1997).
– El secreto de la fama (2009).
– Empresarios oprimidos (2009).
– Dinero para la cultura (2013).
– Cronología del progreso (2016).
– Mil palabras (2018).
– Cuestionario: poemas 1952-1976 (1976).
– Antología general (2004).
– Leer (2012).
– Gabriel Zaid: apartado M 8534, antología (2014).
– El costo de leer y otros ensayos (2014).
– Ómnibus de poesía mexicana (1971).
– Asamblea de poetas jóvenes de México (1980).
– Antología poética (1980).
– Daniel Cosío Villegas. Imprenta y vida pública (1985).
– Antología mínima (2001). Autor: Carlos Pellicer.
El progreso improductivo (1979)
Es uno de los trabajos ensayísticos más importantes de Zaid, en el cual recogió uno de los análisis más completos sobre la moral, la antropología, la cultura y la economía política mexicana. Fue una obra sobre la modernización y de cómo esta afectó la productividad con el pasar del tiempo.
Una de las reflexiones más resaltantes del escritor fue sobre el progreso y la igualdad, él consideró que a la sociedad más pobre se le proporcionaban servicios que no necesitaba. Además se refirió a los factores limitantes de la población: físicos, económicos y de atención personal.
Estructura
El autor estructuró a la obra en tres partes, cada una estuvo constituida por diez capítulos. La primera fase se refirió a temas filosóficos para abrir su inteligente y minucioso análisis. Seguidamente habló de lo económico, y por último desarrolló el tema de la política.
Fragmentos
“La corrupción original de la cual se derivan todas las demás, está en negar el ser por cuenta propia; en imponer la investidura, la representación, el teatro, el ser oficial”.
“La primera razón de ser del empleo es que se ocupe en lo que hace falta”.
La poesía en la práctica (1985)
Esta publicación del escritor mexicano perteneció al género ensayo libre. En ella evaluó, interpretó y analizó temas como la literatura, el ingenio, la creatividad y la inteligencia computarizada o artificial. La obra fue bien recibida por la crítica y el público en general.
Estructura
Zaid se encargó de dividir el libro en dos partes principales y, estas a su vez, estuvieron conformadas por ensayos que representaron los capítulos. A las dos fases primordiales las tituló: “La ciudad y los poetas” y “La máquina de cantar”, en cada una realizó consideraciones especiales sobre la poesía.
“La ciudad y los poetas”
En este apartado el intelectual se refirió a la labor de ser poeta como un acto de creatividad y no para lucrarse o ganar dinero. Basó su afirmación en el poco o nulo agrado que la sociedad tenía hacia los poetas y el desconocimiento de la literatura.
Zaid se refirió también al reconocimiento que llega a alcanzar un autor, y como este repercute directamente en bonanza económica. Así que mencionó el auge de la obra de Octavio Paz, por ser un escritor de fama internacional, y por escribir textos de calidad e interés.
“La máquina de cantar”
En esta segunda parte el escritor hizo referencia al poeta español Antonio Machado. Habla de un “aparato” con la capacidad de crear poesía, sin necesidad de emplear el ingenio, es decir, una máquina de cantar. El tema de lo computarizado fue comparativo con lo práctico de la lectura y escritura.
Por otro lado, Gabriel Zaid mencionó la capacidad no perdurable de los sonetos en relación con la existencia del mundo. Hizo también mención a la lectura como una necesidad casi milagrosa para comprender textos, sin una lectura consciente lo escrito no tendría sentido.
Fragmento
“La cultura no es una especialidad. No es propiedad de nadie. No es algo que esté y que se pueda adquirir. Nos ‘adquirimos’ a nosotros mismos a través de la cultura….”.
“La cultura es el camino de hacer habitable el mundo y entendernos, un camino que hacemos y que nos hace, nunca hecho del todo, siempre dado en parte y en parte por hacerse, en la historia personal como en la colectiva…”.
“Las inculturas no son partes faltantes de un todo (inalcanzable): son supuestos todos (supuestamente alcanzados) que se ignoran unos a otros”.
“Despedida”
“A punto de morir,
vuelvo para decirte no sé qué
de las horas felices.
Contra la corriente.
No sé si lucho para no alejarme
de la conversación en tus orillas
o para restregarme en el placer
de ir y venir del fin del mundo.
¿En qué momento pasa de la página al limbo,
creyendo aún leer, el que dormita?
La corza en tierra salta para ser perseguida
hasta el fondo del mar por el delfín,
que nada y se anonada, que se sumerge
y vuelve para decir no sé qué”.
“Alabando su manera de hacerlo”
“¡Qué bien se hace contigo, vida mía!
Muchas mujeres lo hacen bien
pero ninguna como tú.
La Sulanita, en la gloria,
se asoma a verte hacerlo.
Y yo le digo que no,
que nos deje, que ya lo escribiré.
Pero si lo escribiese
te volverías legendaria.
Y no creo en la poesía autobiográfica
ni me conviene hacerte propaganda”.
“Nacimiento de Venus”
“Así surges del agua,
blanquísima,
y tus largos cabellos son del mar todavía,
y los vientos te empujan, las olas te conducen,
como el amanecer.
Así la dicha abriga como un manto”.
“Nocturno”
“Manantiales del agua,
ya perenne, profunda vida
abierta en tus ojos.
Convive en ti la tierra
poblada, su verdad
novedosa y sencilla.
Abre su plenitud
callada, su misterio,
la fábula del mundo.
… Estalla un mediodía
nocturno, arde en gracia
la noche, calla el cielo.
Tenue viento de pájaros
de recóndito fuego
habla en bocas y manos.
Viñas, las del silencio.
Viñas, las de las palabras
cargadas de silencio”.
– “La literatura oral no desapareció con la escritura, ni va a desaparecer. Circula despreocupadamente, sin firma ni control”.
– “La curiosidad ha sido fundamental para el desarrollo de la humanidad. ¿En qué momento comenzamos a considerarla malsana?”.
– “Un libro no leído es un proyecto no cumplido. Tener a la vista libros no leídos es como girar cheques sin fondos: un fraude a las visitas”.
– “Hay frases que llaman la atención sobre sí mismas, distraen del tema sobre el cual se hablaba y sorprenden incluso al que las dijo, como una revelación, por lo que dicen y lo bien que lo dicen”.
– “El problema del libro no está en los millones de pobres que apenas sabe leer y escribir, sino en los millones de universitarios que no quieren leer, sino escribir”.
– “No aceptamos lo dado, de ahí la fantasía”.
– “¿Cómo leer poesía? No hay receta posible. Cada lector es un mundo, cada lectura diferente”.
– “El arte del elogio es difícil, inadaptado a la velocidad y magnitud que la moderna producción de elogios requiere”.
– “No tengas vergüenza de llorar. Tampoco de no llorar”.
- Gabriel Zaid. (2019). España: Wikipedia. Recuperado de: es.wikipedia.org.
- Gabriel Zaid. (2019). México: El Colegio Nacional. Recuperado de: colnal.mx.
- Gabriel Zaid. (2017). México: Enciclopedia de la Literatura en México. Recuperado de: elem.mx.
- 12 deslumbrantes citas y fragmentos del gran Gabriel Zaid. (2018). México: MX City. Recuperado de: mxcity.mx.
- Gabriel Zaid. (S. f.). Cuba: Ecu Red. Recuperado de: ecured.cu.