Capitalismo financiero: concepto, características y consecuencias
¿Qué es el capitalismo financiero?
El capitalismo financiero es la tercera fase del proceso de evolución del capitalismo mundial, que se originó a mediados del siglo XX y se ha extendido hasta la actualidad. Esta etapa fue precedida por el capitalismo industrial y comercial, y comenzó justo en los años 70.
Se le conoce también con el nombre de capitalismo monopólico, cuya consecuencia más importante ha sido el crecimiento acelerado de la economía mediante un proceso de centralización del capital. Con el crecimiento del capitalismo financiero se originaron rápidamente grandes conglomerados corporativos bancarios, industriales, comerciales, etc.
Este proceso de centralización y fusión del capital dio lugar al nacimiento de empresas transnacionales monopólicas a finales del siglo XX y comienzos del siglo XXI.
El capitalismo financiero se caracteriza además por la fuerte dominación económica y política que ejercen las instituciones financieras sobre todos los demás sectores de la economía.
En los últimos años este dominio se ha traducido en el crecimiento del capital financiero especulativo, en lugar del crecimiento de las actividades productivas.
Las crisis financieras de las últimas cuatro décadas en el mundo han sido una consecuencia directa de esta forma de capitalismo basada en el lucro y la especulación.
Características del capitalismo financiero
El capitalismo financiero se diferencia de las otras formas de capitalismo por varias razones que se señalan a continuación:
– En la actividad económica el sector financiero es determinante para el crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB).
– Hay un aumento exponencial de las transacciones financieras sin un fin productivo, sino más bien especulativo.
– Existen cadenas de intermediación financiera (bancos, empresas de inversión, etc.) que a menudo se transforman en preocupaciones para el sistema.
– Se producen centrífugas y burbujas con el uso del capital. Por un lado, la banca de depósitos intenta atraer ahorros para prestar dinero.; por el otro está la banca de inversión, que obtiene sus fondos del mercado interbancario para volverlo a prestar y reinvertirlo. Así mismo, las empresas de inversión venden acciones en el mercado bursátil.
– Genera crisis periódicas debido a que la sobrecarga de las deudas crecen más rápidamente que la producción y capacidad de la economía “real” para soportar dichas deudas.
– El capitalismo financiero busca obtener y maximizar sus ganancias de capital fundamentalmente a través de altos precios de la tierra, commodities y los activos inmobiliarios rentables, al contrario del capitalismo industrial, según el cual el logro de ganancias estaba sujeto al creciente aumento de las ventas.
– En el sector inmobiliario, la redepreciación y la sobredepreciación de inmuebles junto con el pago de intereses hipotecarios deja pocos ingresos gravables. Algo similar ocurre en el negocio de los hidrocarburos (petróleo y gas), al igual que en la minería, los seguros y la banca. De esta forma intenta eludir el pago de impuesto sobre la renta.
– En el moderno capitalismo financiero actual no se obtienen ganancias sustanciales explotando la mano de obra asalariada como lo indicaba Karl Marx, sino mediante la movilización y uso de fondos de pensiones, seguridad social y otras formas de ahorros invertidos en acciones de la bolsa, los bonos y los bienes raíces.
Consecuencias del capitalismo financiero
– Crecimiento acelerado y desordenado de la economía mediante un proceso de aumento exponencial del sistema financiero a nivel internacional, sin una coordinación de políticas efectiva, ni una correcta arquitectura financiera y menos una correcta regulación internacional de nuevos productos financieros.
– El “recalentamiento” de la economía es otra consecuencia del capitalismo financiero. Este se produce cuando hay una afluencia masiva de capital, provocando una expansión de la demanda agregada tan excesiva que genera desequilibrios macroeconómicos.
– La influencia del sistema financiero internacional no se ha limitado a la mera intermediación en la actividad de la moderna economía capitalista, sino que también ha permeado hacia el sistema político e influye en los objetivos de la política económica de un país.
– Se han producido diversas crisis financieras con consecuencias nefastas para la economía. Los dos casos más emblemáticos en los últimos años fueron el lunes negro (19 de octubre de 1987), que produjo la caída de la Bolsa de Valores de Nueva York; y la crisis financiera de 2008 en Estados Unidos y Europa.
– Estas crisis recurrentes han sido consecuencia directa de la naturaleza de las operaciones bancarias y las burbujas provocadas por el capitalismo financiero internacional. Por sus características y recurrencia, a este proceso se le ha denominado crisis sistémica del capitalismo financiero.
– Después de la debacle financiera que provocaron la burbuja inmobiliaria y los “bonos tóxicos” en Estados Unidos y Europa, fue necesario el auxilio financiero a gran escala. Durante este proceso se estatizaron numerosos bancos y otras sociedades financieras quebradas para reflotarlos.
– El llamado Big Bank financiero supuso además el desembolso de cientos de miles de millones de dólares por parte de los bancos centrales. El objetivo fue pagar a los clientes de los bancos afectados y evitar más estragos económicos. Se creó más liquidez monetaria y se redujeron las tasas de interés, entre otros mecanismos.
– El capitalismo financiero ha generado una economía basada en la especulación y los valores ficticios. Por ejemplo, en la crisis inmobiliaria de 2008 las hipotecas propiedad de los bancos estadounidenses eran revendidas a otros intermediarios financistas de fondos de inversión.
También eran vendidas a fondos de pensiones y fondos de cobertura, los cuales eran “colateralizados” (respaldados) por las mismas cuotas hipotecarias o con los bienes inmuebles comprometidos.
– La especulación y la búsqueda de la máxima ganancia ha perjudicado a los verdaderos actores económicos (empresarios, industriales, trabajadores y consumidores).
Crisis financieras más importantes de los últimos años
La crisis sistémica ha provocado en los últimos 48 años la caída del mercado de valores global y la quiebra masiva de bancos. La recuperación del sistema financiero ha conllevado la intervención de los bancos centrales de los países afectados.
– Caída de la bolsa de valores de Nueva York el 19 de octubre de 1987. Con esta cayeron también los mercados bursátiles de Europa y Japón. El índice Dow Jones se desplomó ese día 508 puntos.
– Crisis del peso mexicano (1994), la crisis de Asia (1997) y la crisis del rublo (1998).
– La gran recesión de los Estados Unidos entre 2007 y 2010.
– Crisis de la deuda europea y la burbuja inmobiliaria 2008 – 2010.
– La guerra de divisas y los desequilibrios financieros mundiales en 2010.