Antonio de Mendoza y Pacheco: biografía, virreinato, obras, logros
Antonio de Mendoza y Pacheco (1490 o 1493-1552) fue un diplomático, político, administrador colonial y militar de origen español. Recordado por ser el primer virrey de la Nueva España (1535-1550) y segundo del Perú (1550-1552).
También se le conoce por ser caballero de la orden religiosa y militar de Santiago, así como comendador militar del municipio Socuéllamos, situado en la comarca de La Mancha de su país de origen.
Desde muy joven sirvió a la corona española, tanto en el ejército como en diferentes misiones diplomáticas. Antonio de Mendoza y Pacheco era reconocido por su prudencia en el trato personal y su habilidad administrativa, destacándose su justicia, compasión y eficiencia en las políticas que estableció durante su gobierno en el territorio mexicano y luego en el peruano.
Durante su gobierno se fundaron varias instituciones educativas, se realizó el primer censo en el continente, llegó la imprenta a América y se reglamentó la recaudación de impuestos así como la imposición de penas. Además promovió expediciones descubriendo nuevas tierras, trabajó en la expansión de la agricultura y facilitó la movilidad en Nueva España creando caminos y puentes.
En 1565 el cabo Mendocino en el condado de Humboldt, California, recibió ese nombre en su honor. Luego, entre los siglos XIX y XX también fueron bautizados en su conmemoración un condado, una ciudad y un parque nacional al noroeste de California.
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Biografía
El nacimiento de Antonio de Mendoza no está del todo claro en cuanto al año y lugar, lo que ha sido muy discutido por los historiadores. Algunas versiones indican que el año de nacimiento fue en 1490 y otras en 1493.
En cuanto a su ciudad de origen muchos aseguran que fue en el municipio Mondéjar, provincia de Guadalajara, ubicada en la comunidad autónoma de Castilla-La Mancha. Mientras otros señalan que nació en Alcalá la Real, en Granada, poco antes de ser tomada por los Reyes Católicos.
Fue el segundo hijo de Íñigo López de Mendoza y Quiñones, II conde de Tendilla y I marqués de Mondéjar y de su segunda esposa, Francisca Pacheco Portocarrero. Miembro de una destacada familia de la nobleza castellana, descendiente del gran poeta Íñigo López de Mendoza, Antonio se incorporó a temprana edad a la corte de los Reyes Católicos, Fernando II e Isabel I.
Vida en el reino de Granada
El padre de Antonio de Mendoza fue nombrado por los Reyes Católicos primer capitán general del reino de Granada, pero cumplía funciones de Virrey. Esos años fueron la escuela ideal para forjar el carácter de Antonio y aprender las funciones que luego tendría que asumir en México. Al tiempo terminó sustituyendo a su progenitor como regidor de cabildo y tesorero de la Casa de la Moneda.
A la muerte de su padre no recibió nunca el título de conde de Tendilla, pues recayó en su hermano mayor, pero sí heredó las encomiendas manchegas de Socuéllamos y Torre de Veguezate.
Previamente a su posición de virrey en la Nueva España se dedicó a gran variedad de misiones diplomáticas. Entre 1516 y 1517 estuvo en Flandes e Inglaterra, donde se dice conoció a Enrique VIII.
A la muerte de Fernando el Católico participó en la Guerra de las Comunidades, entre 1519 y 1521. Posteriormente fue embajador ante la corte de Hungría. En 1527 se le encomendó llevar fondos al hermano del rey, a propósito de la derrota en la batalla de Mohács.
Entre 1527 y 1530 estuvo viajando entre Alemania, España e Italia, en donde participó en la coronación imperial de Carlos V en Bolonia. Sus servicios al emperador Carlos V continuaron cuando ocupó la presidencia de la Cámara Real. Además fue nombrado gobernador en la Provincia de León, para calmar los ánimos de los moriscos de Hornachos que tenían intenciones de sublevarse.
Durante estos años, antes de partir al Nuevo Continente, contrajo matrimonio en Valladolid con Catalina de Vargas, hija del contador mayor de los Reyes Católicos. Con ella tuvo tres hijos, Íñigo, Francisca y Francisco, quienes fallecieron a temprana edad y sin descendencia.
Virreinato en Nueva España
Aunque llegó a la Nueva España a finales de octubre de 1535, desde el 17 de abril de ese año Antonio de Mendoza y Pacheco fue nombrado primer virrey del Imperio Español. Adicionalmente fue designado como Gobernador, Capitán General de Nueva España y Presidente de la Real Audiencia de México, el más alto tribunal de la Corona Española.
También se le dio jurisdicción espiritual, pues se encargaría de la conversión y buen trato de los nativos, reprendería los pecados públicos y otros escándalos de los colonos, castigaría a los clérigos rebeldes y debía expulsar de Nueva España a los frailes que habían abandonado los hábitos.
Antonio de Mendoza fue el único virrey cuyo nombramiento fue por tiempo ilimitado, pues a sus sucesores se les solía fijar un término de seis años para gobernar.
Sus primeros años fueron difíciles por la audacia y la popularidad que había ganado el Capitán General Hernán Cortés, al haber liderado la conquista española del Imperio azteca. Cortés solo fue nombrado Marqués del Valle de Oaxaca pues había hecho enemigos en la corte española y era demasiado independiente de la autoridad de la corona. A pesar de esta importante influencia en la Nueva España, Mendoza logró al final que este y sus simpatizantes se subordinaran a su mandato.
Entre las acciones que marcaron sus inicios como virrey se encuentran el juicio al que sometió al gobernador de Nueva Galicia y presidente de la primera audiencia mexicana, Nuño Beltrán de Guzmán.
El también conocido como el “monstruo de la crueldad” era famoso por sus actos de corrupción y el maltrato a los nativos. El resultado del proceso judicial fue el embargo de sus bienes y su detención en el Torrejón de Velasco, donde moriría.
Una de las principales prioridades del virreinato de Mendoza fue la exploración en busca de nuevas riquezas y de las famosas “Siete Ciudades de Cíbola”. Por lo que a su llegada organizó el primer viaje bajo el liderazgo de Francisco Vázquez de Coronado, quien cubrió una gran cantidad de territorio abarcando hasta lo que es hoy Wichita, Kansas.
Posteriormente envió otras expediciones a California y a Filipinas, aunque nunca consiguió las legendarias ciudades de oro de las que tanto hablaba el fray Marcos de Niza.
Grandes aportes a Nueva España
Durante el gobierno de Mendoza, la educación fue también una prioridad, pues a diferencia de otros colonos él veía gran potencial intelectual en la población indígena. Fue así como promovió la creación de dos importantes instituciones educativas como fueron el Colegio de Santa Cruz de Tlateloco y la Universidad Real y Pontificia de México.
En la primera, los estudiantes de nobles indios recibían clases de latín, retórica, filosofía y música. Mientras la segunda siguió el modelo de la Universidad española de Salamanca y formó a jóvenes criollos para el clero. Esta fue la primera universidad que se estableció en el continente americano.
Las políticas que implementó durante su periodo promovieron el desarrollo agropecuario. Además mantuvo su autoridad, logrando que se abortara una conspiración de esclavos negros y enfrentó sublevaciones de indios caxcanes y chichimecas. Destacó la desarticulación que hiciera a la “Rebelión del Mixtón”, que aconteció entre los años 1541 y 1542, campaña en la que murió el capitán Pedro de Alvarado.
A su vez emprendió una serie de acciones que permitió asentar el gobierno español en Nueva España, entre ellas el censo de la población, la reducción de los impuestos a la población indígena y la reorganización del área administrativa.
La paz civil se conservó en el Virreinato incluso cuando otras colonias como la de Perú entraron en conflicto por las llamadas Nuevas Leyes de 1542-1543, que despertaron grandes molestias y tensiones entre colonos y trabajadores nativos. Mendoza decidió no aplicarlas para prevenir revueltas, hasta que finalmente en 1545 la Corona las derogó.
El gobierno de Antonio se extendió por 15 años, el periodo más largo de cualquier virrey, y como recompensa de su exitoso servicio fue promovido al virreinato del Perú. Se dice que antes de retirarse del cargo, le brindó un consejo a quien lo sucedió como virrey de la Nueva España, Don Luis Velasco, con la siguiente frase: “Haz poco y hazlo lentamente”.
Virreinato del Perú
Luego de convertir al Virreinato de Nueva España en una administración modelo, tanto para la Corona como para los colonos, durante 15 años, en 1550 Mendoza fue trasladado al gran virreinato de América del Sur. Además del cargo de virrey le asignaron el de gobernador y capitán general del Perú, así como el de presidente de la Real Audiencia de Lima.
Para la toma de poder tuvo que embarcarse en Acapulco hasta los puertos de Realejo, Panamá y Tumbes en Perú. Pese a estar en mal estado de salud, continuó por vía terrestre desde la costa hasta la Ciudad de los Reyes, Lima, para recibir el mando.
En esta posición estuvo poco tiempo pues a su mal estado de salud se sumaron las secuelas de una hemiplejia. Por ello delegó en su hijo Francisco de Mendoza el recorrido de las comarcas del sur, con el propósito de determinar los recursos naturales para su aprovechamiento y las condiciones de trabajo de los indios. En ese viaje se obtuvieron los primeros dibujos y planos del centro minero del Cerro Rico de Potosí.
Últimos años
Meses antes de su fallecimiento Mendoza expidió lo que sería el primer código de procedimientos judiciales de Perú. Estas ordenanzas para la Audiencia de Lima incluían atribuciones y deberes de magistrados, fiscales y miembros del foro. También en material legal estableció una serie de normativas para el uso de bienes comunales de los indios.
Desde el inicio de su mandato debió enfrentar el descontento de los encomenderos. En noviembre de 1551 hubo una revuelta no exitosa, encabezada por los hidalgos Francisco de Miranda, Alonso de Barrionuevo y Alonso Hernández Melgarejo. Sus ánimos caldeados se mantuvieron primero en el Cuzco, para pasar luego a Charcas, donde hubo una nueva rebelión. Sin embargo, ya era tarde, pues el virrey había fallecido.
Su muerte ocurrió el 21 de julio de 1552 en Lima, Perú, a la edad de 62 años. Su tumba se encuentra en la Catedral de Lima, junto con la del conquistador español Francisco Pizarro.
Obras y logros
Antonio de Mendoza y Pacheco se caracterizó por tener un virreinato modelo en el que se destacó por sus grandes obras y logros, pero también en sus pocos años en Perú logró recoger algunos frutos. Entre lo más destacado de sus gobiernos se encuentran:
– Fundó la Casa de la Moneda en la ciudad de México y acuñó monedas de plata y cobre conocidas como macuquinas. Cuando empezó con las monedas de oro, recibió gran reconocimiento y aceptación en lejanas comarcas.
– Implantó la primera imprenta de América en 1539 y, desde su funcionamiento en la casa del italiano Juan Paolo, se publicaron los primeros libros del Nuevo Mundo.
– En sus expediciones se descubrió la península de Baja California, al noroeste de México, y se llegó al archipiélago filipino en el Pacífico Sur.
– Construyó tres colegios dirigidos a indios nobles, mestizos y mujeres, respectivamente, que fueron el Colegio Imperial de Santa Cruz de Tlatelolco, el San Juan de Letrán y La Concepción.
– Luego de estudiar las doctrinas urbanísticas renacentistas aplicó los trazados en numerosas obras públicas en la Ciudad de México. También acondicionó muelles y edificios de la aduana, reparó el camino real como las fortificaciones del Puerto de Veracruz y comenzó uno a Guadalajara.
– Fue fundador de varias poblaciones en lo que actualmente son los estados de Jalisco y Michoacán, entre ellas la ciudad de Valladolid, hoy conocida como Morelia.
– Estableció el primer instituto universitario del continente americano como fue la Universidad Real y Pontificia de México. .
– Logró obtener los permisos para la fundación de la Universidad de San Marcos en el convento de Santo Domingo de Lima, la primera casa de estudios universitarios en Perú.
– Gestionó la recopilación de informaciones veraces sobre el Tahuantinsuyo o Imperio de los incas. Juan de Betanzos culminó su crónica Suma y Narración de los Incas en 1551, alentado por Mendoza.
– Se creó el Obispado de la Plata con los que llegaron los primeros sacerdotes de la orden de San Agustín.
Referencias
- Antonio de Mendoza y Pacheco. (2019, 15 de noviembre).Wikipedia, La enciclopedia. Recuperado de es.wikipedia.org
- The first and the best: Viceroy Antonio de Mendoza. (s.f.) Recuperado de mexconnect.com
- The Editors of Encyclopaedia Britannica (2019, 17 de julio). Antonio de Mendoza. En Encyclopædia Britannica. Recuperado de britannica.com
- Wikipedia contributors (2019, 6 de agosto). Antonio de Mendoza. En Wikipedia, The Free Encyclopedia. Recuperado de wikipedia.org