Paramecios: concepto, partes, alimentación, reproducción
¿Qué son los paramecios?
Los paramecios son organismos pertenecientes al género Paramecium. Son protistas y poseen un gran número de cilios —apéndices que facilitan la locomoción del individuo. Suelen ser consideradas “especies modelo”, por ello han sido ampliamente estudiadas.
Existe un conocimiento abundante sobre su biología, ultraestructura, fisiología y genética. Las especies de este género son habitantes comunes en ambientes dulceacuícolas y charcas con materia orgánica en descomposición. Su alimentación es heterótrofa.
Partes de un paramecio
Los organismos pertenecientes al phylum Ciliophora se caracterizan por poseer cilios y dos tipos de núcleos, diferenciables entre sí. Paramecium posee un macronúcleo y dos o más micronúcleos.
Son organismos bastante complejos tanto en su estructura como en su función. Dentro del grupo existen individuos de vida libre, comensales y parásitas. Específicamente, las especies de paramecios son de vida libre.
Aunque las distintas especies de paramecios varían entre sí, su largo promedio es 150 µm y de ancho 50 µm. La variación del tamaño depende mayormente de la disponibilidad de alimento y el momento del ciclo de vida en que se encuentre.
Vacuolas
Los paramecios poseen dos vacuolas contráctiles ubicadas en la superficie aboral. Estas vacuolas están localizadas en dos extremos del cuerpo y vacían sus fluidos al exterior.
Los residuos que no son digeridos pueden ser descargados por el poro anal, el cual es ventral y subterminal. Existen estructuras especializadas para el consumo de materia (alimentación); estas aberturas se denominan citostoma.
El citoplasma contiene numerosas mitocondrias. En algunas colonias de Paramecium encontradas en la naturaleza también hay un número importante de endosimbiontes. Asimismo, hay ribosomas.
Los núcleos son una de las características más relevantes de los Paramecium. El macronúcleo es activo (50-60 µm de largo y 20-30 µm de ancho), en contraste con los micronúcleos (3 µm de diámetro), que no lo son.
Alimentación
Son organismos heterótrofos. Dentro de sus presas más frecuentes están las algas y bacterias. En algunos casos pueden consumir otros protozoarios.
Cerca de la hendidura de alimentación, los paramecios poseen un órgano con gran cantidad de cilios en este. Esta estructura ayuda a crear una corriente que favorece la entrada de partículas de alimento en la boca del organismo unicelular.
Clasificación taxonómica
Los paramecios pertenecen al phylum Ciliophora y a la clase Oligohymenophorea. Como lo indica el nombre el grupo, son organismos ciliados.
En cuanto a las relaciones interna del género, en el año 1921 el investigador Woodruff dividió el género en dos grupos basados en la forma de cada organismo. Al grupo aurelia pertenecen individuos con forma de zapatilla, y al grupo bursaria pertenecen los que recuerdan a un cigarrillo.
Posteriormente, en 1969 y 1992, Jankowski propuso una división en tres grupos llamados putrinum, woodruffi y aurelia. Según él, el rango taxonómico de dicha clasificación era de subgéneros.
Para proponer esta clasificación se usaron como características esenciales la morfología, el tamaño y forma de la célula, particularidades del núcleo, entre otros.
La validez taxonómica de los grupos descritos anteriormente ha sido dudosa y cuestionada. Un estudio reciente tuvo como objetivo aclarar estos conflictos y, mediante el uso de herramientas moleculares, buscaron resolver las relaciones filogenéticas del grupo.
La subunidad pequeña del ARNr reveló que el grupo bursaria no forma un grupo monofilético. Contrariamente, las especies asignadas a aurelia están relacionadas y la filogenia apoya la existencia de este grupo como monofilético.
Distribución
Su distribución es mundial. Para explicar el amplio rango de distribución de la especie se han propuesto varias hipótesis.
Se especula que la dispersión ocurre por el agua a los insectos, aves y otros animales con patrones de migraciones de largas distancias, incluyendo al hombre.
También es posible que las especies más viejas de paramecios estuvieran distribuidas mundialmente antes de la separación de los continentes.
Esta hipótesis no requiere una migración extensiva. Evidencias recientes apoyan la primera hipótesis, que requiere de una migración reciente y continua.
Reproducción
Fisión binaria
Pueden reproducirse asexualmente por un mecanismo llamado fisión. El paramecio crece gradualmente cuando tiene acceso a comida.
Cuando llega al tamaño máximo se divide en dos mitades, lo que da origen a dos individuos idénticos. El proceso ocurre en un intervalo de unas cinco horas a la temperatura óptima de 27 °C.
Durante este proceso los dos micronúcleos sufren un proceso de mitosis. El macronúcleo no se divide mitóticamente.
Conjugación
Este proceso es considerado como fuente de recombinación sexual de los elementos hereditarios. La conjugación involucra el apareamiento de dos células que experimentan una serie de procesos sexuales en un par de horas, unidos físicamente por sus superficies orales. El macronúcleo se fragmenta.
Autogamia
En la autogamia no se necesita un segundo individuo. En contraste, los núcleos de un mismo organismo se unen, recordando a una conjugación tradicional.
Los núcleos experimentan un proceso meiótico, del cual solo queda un núcleo; el resto son destruidos. El único núcleo resultante se divide por mitosis. Los nuevos núcleos haploides se unen y dan lugar a un nuevo núcleo diploide.
Si un individuo heterocigoto (Aa) se divide por autogamia, algunos de sus descendientes serán homocigotos dominantes (AA) y otros serán homocigotos recesivos (aa).
Citogamia
La citogamia es un proceso híbrido entre la conjugación y la autogamia. Ocurre la unión de dos organismos, como ocurre en la conjugación, pero no ocurre intercambio de material genético. La unión de núcleos ocurre entre los núcleos de un mismo individuo (como ocurre en la autogamia).
Hemixis
Es un proceso de fragmentación y división del macronúcleo sin actividad del resto de los micronúcleos. Varios autores consideran que las especies que experimentan este proceso son individuos anormales o patológicos. Generalmente se degeneran hasta que mueren.
Este proceso no puede ser considerado un paso normal del ciclo de vida del individuo. Al contrario, debe ser catalogado como estado aberrante.
Regeneración macronuclear
Los productos desintegrados de los macronúcleos viejos llevan a cabo un proceso de regeneración. En resumen, los núcleos viejos dan origen a núcleos nuevos, posiblemente por un proceso no mitótico.
Los trozos fragmentados son segregados de manera igualitaria entre los individuos hijos formados mediante fisión.