Historia

Relato histórico de los Niños Héroes


Los Niños Héroes fueron seis niños mexicanos, estudiantes en la Academia Militar, que murieron defendiendo al territorio de México en el Castillo de Chapultepec el día 13 de septiembre del año de 1847.

Estos cadetes, que tenían entre 12 y 18 años, defendieron el territorio, ya que iba a ser invadido por fuerzas estadounidenses durante la Batalla de Chapultepec. Hoy en día son reconocidos y admirados por el pueblo mexicano.

Su valentía es recordada, ya que decidieron quedarse a luchar a pesar de que les habían ordenado marcharse a sus hogares. Se cree que fueron unos 50 niños en total que se quedaron a defender el castillo, pero solo se conocen 6 nombres.

Los Niños Héroes son conmemorados en México cada 13 de septiembre.

Contexto del relato de los Niños Héroes

En el marco de la batalla de Chapultepec, durante la guerra mexicana-estadounidense, los protagonistas fueron los seis niños mexicanos que murieron durante la invasión estadounidense de 1847.

Toda la historia puede ser rastreada a la invasión del ejército estadounidense a la nación mexicana, con el pretexto de violaciones en Texas, que en aquella época pertenecía a México.

Las dos tropas se encontraron en el cerro de Chapultepec, lugar donde se ubicaban las instalaciones de la Academia Militar.

Este terreno era el último lugar de refugio hacia la ciudad de México, donde se llevó a cabo la batalla final que tendría como consecuencia la perdida del territorio de México a favor de los Estados Unidos.

El castillo de Chapultepec estaba siendo defendido por tropas mexicanas bajo el comando de Nicolás Bravo, incluyendo cadetes de la Academia Militar.

El número de cadetes presentes ha variado según los reportes históricos, desde un número tan bajo como 47 a unos cientos de personas.

Los defensores eran vastamente sobrepasados y batallaron en contra de las tropas del General Scott durante dos horas, antes de que el General Bravo ordenara el retiro.

Sin embargo, seis cadetes se rehusaron rendirse y pelearon hasta la muerte. La leyenda cuenta que el último de estos seis cadetes, llamado Juan Escutia, saltó desde el castillo de Chapultepec envuelto en una bandera mexicana para prevenir que la bandera fuera quitada por el enemigo.

Según el reporte de un oficial estadounidense no identificado y realizado más tarde, cerca de cientos de cadetes entre las edades de 12 y 18 años estaban entre las multitudes de prisioneros llevados después de la captura del Castillo.

Los cuerpos de los seis niños fueron enterrados alrededor del área del parque de Chapultepec. El 5 de marzo de 1947, unos meses antes de que se celebrara el aniversario número 100 de la batalla de Chapultepec, el presidente estadounidense Harry S. Truman colocó una corona en el monumento y se paró por unos momentos en una reverencia solemne.

En sus inicios, la derrota de Chapultepec era vista por los mexicanos como vergonzosa. Pero después del año de 1872, se empezó a crear un gran culto e importancia a todo lo relacionado con la batalla.

En el año de 1947, los restos de los cuerpos fueron encontrados e identificados; el 27 de septiembre de 1952 fueron re-enterrados en el Monumento Histórico de los cadetes en Chapultepec.

Actualmente, en el Castillo del cerro de Chapultepec se ubica el Museo Nacional de Historia; en sus alrededores se conmemoran con placas los distintos puntos donde murieron todos los niños que defendieron al territorio mexicano.

Biografías

Juan de la Barrera

Nació en el año de 1828 en la ciudad de México. Era hijo de Ignacio Mario de la Barrera, un general del ejército, y de Juana Inzárruaga. Se había enlistado a la edad de 12 años y fue admitido a la Academia el 18 de noviembre del año de 1843.

Durante el ataque a Chapultepec, era un teniente en los ingenieros militares y murió defendiendo un hornabeque en la entrada del parque.

A los 19 años, era el mayor de los seis niños y también era parte de la facultad de la escuela, ya que enseñaba en el área de ingeniería.

Juan Escutia

Nació entre 1828 y 1832 en Tepic, la capital del estado de Nayarit. Los documentos históricos muestran que fue admitido a la academia como cadete el 8 de septiembre de 1947; sin embargo, sus otros documentos fueron perdidos durante el ataque. Se cree que era el segundo teniente en la compañía de artillería.

Se dice que este cadete se envolvió asimismo en la bandera mexicana y saltó desde el techo para evitar que la bandera fuera quitada por las manos enemigas. Su cuerpo fue encontrado en la parte este de la colina, junto con Francisco Márquez.

Un mural pintado por el muralista Gabriel Flores representa su salto desde el techo con la bandera mexicana.

Francisco Márquez

Nació en 1834 en Guadalajara, Jalisco. Aplicó para la academia militar el 14 de enero de 1847 y, al tiempo de la batalla, pertenecía a la primera compañía de cadetes. Murió a la edad de 13 años, convirtiéndose en el más joven de los seis Niños Héroes.

Agustín Melgar

Nació entre 1828 y 1832 en Chihuahua, Chihuahua. Era el hijo de Esteban Melgar, un teniente coronel en el ejército, y María de la Luz Sevilla; ambos padres murieron cuando él era joven, por lo tanto estaba a cargo de su hermana mayor.

Aplicó para la academia el 4 de noviembre de 1846. Una nota en sus documentos personales explican que después de encontrarse solo, intentó detener al enemigo en el área norte del Castillo.

Fernando Montes De Oca

Nació entre 1828 y 1832 en Azcapotzalco, una ciudad al norte de la ciudad de México y uno de las jurisdicciones del Distrito Federal.

Aplicó para la academia el 24 de enero de 1847 y fue uno de los cadetes que permaneció en el castillo. Su registro personal dice lo siguiente: “murió por su país el 13 de septiembre de 1847”.

Vicente Suárez

Nació en 1833 en Puebla, Puebla. Era el hijo de Miguel Suárez, un oficial de caballería y María de la Luz Ortega. Aplicó para la admisión en la Academia el 21 de octubre de 1845 y durante su estadía era un cadete oficial.

Temas de interés

Ejemplos de relatos históricos

Referencias

  1. Niños héroes. Recuperado de wikipedia.org.
  2. The mexican war. (1849), 10 Edición. Nueva York, Estados Unidos. Barnes & Co.