Definición de tesoro
Del latín thesaurus, que a su vez deriva de un vocablo griego, un tesoro es una cantidad de dinero, objetos preciosos u otros valores que se encuentra guardada u oculta. Los tesoros suelen ser asociados a las historias de piratas, donde los bucaneros ocultaban cofres con oro en islas y otros lugares secretos, para poder ir a buscarlos en el momento apropiado.
También se utiliza este concepto para expresar que una persona es muy buena o tiene valores poco comunes, considerándola de muy valiosa y digno de estimación; del mismo modo, puede presentarse para hablar de un objeto que contiene una riqueza sentimental o intelectual mayor que el precio al que equivale. Por ejemplo: “Este libro es un verdadero tesoro, fue impreso en 1786 y su tapa está laminada en oro”.
El tesoro público es el conjunto de los recursos financieros de un Estado. Puede estar compuesto por dinero en efectivo, valores o créditos. El organismo estatal que se dedica a la elaboración del presupuesto y a su administración es conocido como Departamento del Tesoro.
El Departamento del Tesoro de Estados Unidos, creado en 1789 para recaudar apoyo económico al Gobierno, es el organismo más influyente entre los de su tipo. Las medidas tomadas por el Tesoro estadounidense suelen tener repercusiones en gran parte del mundo.
El actual secretario del Tesoro de Estados Unidos es Tim Geithner, un hombre de referencia en la economía internacional y que suele ser escuchado por los funcionarios de otros países.
Tesoros valiosos por su historia
A lo largo de la historia se han ido creando mitos acerca de los legados importantes de las diversas culturas; muchos de ellos hacen referencia a determinados bienes de valor cultural inestimable que se han perdido o han quedado sepultados bajo escombros después de determinadas catástrofes y que los investigadores continúan buscándolos desde hace siglos sin poder dar con ellos. Los siguientes son algunos de estos tesoros.
La tumba de Alejandro Magno se cree que está en Alejandría o Siwa (Egipto) dado que después de morir en Babilonia se supo que había sido trasladado a esta tierra, sin embargo los arqueólogos no han conseguido dar con ella hasta la fecha.
El saber popular asegura que en el volcán de Pasocha se encuentra oculto un tesoro de 20 lingotes de oro que recibe el nombre de Tesoro de Atahualpa, el cual todavía, pese a las incesantes búsquedas no ha sido localizado.
El por todos conocido Arca de Noe, es uno de esos tesoros perdidos que a pesar de que la humanidad está buscándolos desde hace tiempo, aún no se ha descubierto. Teóricamente debería encontrarse en el Monte Arabat y se trataría tan sólo de una estructura de madera con un valor religioso e histórico, pero no material. Su desaparición hace que muchos duden acerca de la existencia de dicho arca.
Otro tesoro perdido y que continúa siendo buscado por especialistas es el galeón español que llevaba el nombre de «Nuestra Señora del Juncal» y que se hundió en las aguas que separan la costa de México de La Habana en el siglo XVIII y jamás se ha sabido absolutamente nada de él; esta historia se encuentra irradiada de creencias y afirmaciones populares acerca de aquellos asuntos sobrenaturales que tienen lugar en el mar. Cabe mencionar que no es el único barco que ha desaparecido sin dejar rastro; otro de ellos es el galeón de Hernán Cortés, que se hundió atiborrado de riquezas en el camino de regreso de Cuba a España.
La tumba donde descansan los reyes de la Dinastía Ming es otro de los misterios que la humanidad aún no ha podido desvelar y pese a que se sabe por ejemplo que el emperador Jianwen fue enterrado en Pekín y se buscó incansablemente su cuerpo, jamás han conseguido dar con él.