Definición de segmentación
Se conoce como segmentación al acto y consecuencia de segmentar (es decir, de dividir o formar segmentos o porciones). El concepto, según se desprende de la práctica, posee múltiples usos de acuerdo a cada contexto.
Es posible hablar de la segmentación de mercado, por ejemplo, para nombrar a la división de éste en conjuntos más pequeños cuyos integrantes comparten determinadas características y requerimientos. Estos subgrupos, dicen los expertos, se determinan tras analizar el mercado.
La segmentación exige la creación de grupos homogéneos, al menos respecto a ciertas variables. Dado que los miembros de cada segmento mantienen comportamientos o conductas similares, es posible anticipar una respuesta parecida ante las estrategias de marketing.
Entre los requisitos para segmentar el mercado de manera correcta aparecen la homogeneidad dentro del segmento, la heterogeneidad entre los segmentos y la posibilidad de identificar, medir y manejar cada segmento.
Muchas veces, una empresa que colabora con la segmentación del mercado en un punto de la historia cambia de parecer años más tarde para intentar abarcar un mayor porcentaje de consumidores. Los fabricantes de automóviles caros, por ejemplo, lucharon durante años por presentar sus productos como objetos de lujo, disponibles tan sólo para la porción de la población con un alto poder adquisitivo. Sin embargo, dados distintos factores, como la creciente lista de bondades de los coches económicos actuales y la crisis mundial, se han visto obligados a repensar su propuesta y sus estrategias de marketing.
Esto se aprecia en las numerosas publicidades, sobre todo televisivas, que intentan borrar los conceptos existentes con respecto a sus productos y a su cualidad de elitistas. Mercedes Benz es el ejemplo más sobresaliente; a través de su campaña «Hay un nuevo Mercedes«, asegura a los potenciales consumidores que existe un modelo hecho a medida para cualquier persona, independientemente de su situación económica, edad, cantidad de integrantes de su grupo familiar, gustos, etcétera.
El problema de ir en contra de la segmentación del mercado reside en que la imagen de la empresa puede perder su nitidez. Por ejemplo, cuando Nintendo comenzó a publicitar sus productos con una mirada más amplia, intentando incluir a personas de todas las edades y géneros, la industria perdió el respeto en la compañía, asumiendo que si una consola ofrecía videojuegos tanto para un niño de 6 años como para una señora de 83 o para un adolescente, entonces dichos títulos carecerían de seriedad y de un nivel de calidad aceptable.
Mientras los consumidores que no consiguen identificarse con ningún segmento del mercado sufren este fenómeno, otros se oponen a la universalización, temiendo que se diluyan aquellas características distintivas de sus productos favoritos. La solución, como se comenta en párrafos anteriores, es compleja y delicada, ya que mientras las empresas experimentan con diferentes mensajes, pierden sumas de dinero que pueden resultar imposibles de recuperar.
Para el ámbito de la biología, en cambio, la segmentación guarda relación con las divisiones segmentadas de organismos pertenecientes tanto al reino animal como al vegetal. De este modo, se produce un elevado nivel de especialización de las áreas del cuerpo.
En la informática, la segmentación es un método que busca incrementar el rendimiento de un sistema digital. La noción inglesa se conoce como pipelining (“tubería”), ya que la lógica imita el funcionamiento de un oleoducto (que se divide en diversos segmentos con bombas que impulsan el gas).
En este caso, la programación consiste en desarrollar cálculos que deben ser sincronizados con el reloj cada una determinada cantidad de tiempo para que la ruta crítica se reduzca.
El proceso embriológico que radica en las divisiones celulares (mitosis) del óvulo fecundado que se llevan a cabo antes de la gastrulación también se conoce como segmentación.