Definición de afiliación
Para poder entrar de lleno en el establecimiento del significado del término afiliación, se hace necesario que, en primer lugar, conozcamos su origen etimológico. En este caso, hay que exponer que se trata de una palabra de origen latino. En concreto es fruto de la suma de varios componentes muy bien delimitados:
-El prefijo “ad-”, que significa “hacia”.
-El sustantivo “filus”, que es sinónimo de “hijo”.
-El elemento “-are”, que se usa para darle forma a formas verbales.
-El sufijo “-cion”, que viene a indicar “acción y efecto”.
Afiliación es el acto y el resultado de afiliar. Este verbo hace referencia a la acción de adherir, apuntar, anotar o sumar a un individuo a una asociación u organización.
Por ejemplo: “Un fallo judicial prohibió a la obra social rechazar la afiliación del bebé nacido con un malformación congénita”, “Estamos muy contentos: la afiliación a nuestro partido político no deja de crecer”, “La afiliación al seguro requiere de muchos trámites debido a la burocracia”.
Quien completa su afiliación a una entidad se convierte en afiliado. Una vez que se accede a esta condición, la persona adquiere diversos beneficios y derechos, mientras que en algunos casos también asume obligaciones.
Las afiliaciones pueden realizarse en organismos que administren pensiones y jubilaciones, obras sociales, asociaciones civiles y partidos políticos, por citar algunas posibilidades. Para completar el trámite, es habitual que el sujeto deba presentar diferentes documentos y completar algún tipo de planilla. También es posible que se le requiera ciertos desembolsos económicos, como un pago de inscripción o el abono de algún tipo de cuota.
Supongamos que un joven desea tramitar su afiliación a un partido político. Para esto se acerca a un comité del mismo con su documento, completa una planilla y firma un registro. A partir de este trámite, ya queda afiliado al partido en cuestión y puede presentarse como candidato representando al mismo en procesos electorales.
De la misma manera, también se produce, en muchos casos, la afiliación de los trabajadores a los sindicatos existentes en su país. Se considera que llevar a cabo esa acción es una manera de poder disfrutar de una larga lista de ventajas, entre las que destacamos las siguientes:
-Se puede disfrutar de información sobre cualquier aspecto en todo momento.
-Se tiene la posibilidad de contar con el asesoramiento permanente y necesario ante cualquier situación que lo requiera.
La afiliación a una obra social, por otro lado, exige el pago de aportes mensuales. Mientras la persona mantenga su afiliación, podrá hacer uso de los servicios de la obra social, recibiendo atención médica, adquiriendo medicamentos con descuento, etc.
Además de todo lo expuesto, en España también está lo que se conoce como afiliación a la Seguridad Social. Bajo ese término se incluye la obligación que tienen las personas que realizan una actividad profesional, fundamentalmente, a adherirse a ese sistema. Con esa acción contribuyen al mantenimiento en parte del Estado al tiempo que pueden disfrutar de sus derechos a nivel de atención sanitaria, de retribuciones en casos de incapacidades o incluso de pensiones, entre otras cosas.