Qué es Porfiriato:

El porfiriato fue un periodo de la historia política de México durante el cual gobernó el país el general Porfirio Díaz, entre 1876 y 1911.

En estos años se logró un relativo progreso económico y material, y se pacificó al país, aunque a costa de gran represión, desigualdad e injusticia social.

Porfirio Díaz era un militar de gran prestigio dentro de las fuerzas militares y buena parte de los círculos políticos mexicanos. Tuvo una participación destacada durante la guerra de Reforma y y un papel principal en la Intervención Francesa.

Díaz alcanzó la presidencia de México gracias a una rebelión militar y al triunfo del Plan de Tuxtepec. Ascendió al poder el 28 de noviembre de 1876 y gobernó, con apenas una interrupción de cuatro años entre 1880 y 1884, hasta el 25 de mayo de 1911, treinta años en total.

Características del porfiriato

El porfiriato es un periodo que se caracterizó, en lo económico, por traer progreso material y capital extranjero a México, así como por inversión en el campo de la minería y la agricultura, por impulsar la industria nacional y por comunicar al país con líneas ferroviaria y telegráficas.

En lo político, fue un periodo de relativa estabilidad, pues se logró la pacificación del país (la llamada paz porfiriana), gracias al uso de la fuerza, la persecución y la represión de cualquier forma de descontento social, asumiendo así las características de una dictadura.

Todo lo anterior, a su vez, se tradujo, en el plano social, en grandes tensiones dentro de la sociedad mexicana, especialmente entre la oligarquía porfirista (latifundistas, extranjeros, industriales), surgida a la sombra del general, y detentora del poder político y económico, y las masas trabajadoras, el campesinado y los indígenas, particularmente maltratadas y explotadas durante el régimen.

Final del porfiriato y revolución mexicana

El porfiriato llegó a su final en 1911, como consecuencia del debilitamiento de su poder político y militar y del estallido de la revolución mexicana.

En 1910, Díaz, con ochenta años, todavía aspiraba a una nueva reelección para la presidencia del país. Sin embargo, la candidatura de Francisco I. Madero bajo el lema “sufragio efectivo, no reelección”, se interpuso en su camino y Madero fue enviado a prisión por el dictador.

Entretanto, Madero logra escapar de prisión y proclama el plan de San Luis, que, entre otras cosas, desconocía a Díaz como presidente de la nación y hacía un llamado a la rebelión para el día 20 de noviembre de 1910, día que se celebra actualmente como el Día de la Revolución Mexicana.

Por su parte, Pancho Villa, en el norte, y Emiliano Zapata, desde el sur, se sumaban a Madero y le propinaban significativas derrotas militares a Díaz.

Así que Díaz, debilitado militar y políticamente, decide finalmente renunciar a la presidencia y abandona México en mayo de 1911. De este modo, la conclusión del porfiriato coincide con el movimiento social que vendría a alterar radicalmente las estructuras políticas, sociales y económicas del país, conocido también como revolución mexicana.

Vea también Día de la Revolución Mexicana.