Qué es Obatalá:

Obalatá, también conocido como Oxalá u Ochalá, es el nombre de una deidad de la religión yoruba. Es descendiente directo de Olodumare (el Dios supremo) y uno de los siete orishas principales del panteón de esta religión originaria de África.

Obatalá es el creador de la Tierra, dueño de la inteligencia, los pensamientos, los sueños humanos y de todo lo blanco. Es a él a quien se atribuye el origen de la mayoría de los dioses africanos y de todo lo que hay en el planeta. Es pues, la deidad por excelencia.

Como tal, Obatalá fue enviado a la Tierra por Olofin, deidad que sería el equivalente de Jesucristo, para gobernar el mundo, hacer el bien y cuidar el orden, la paz y la armonía entre los hombres. Incluso, tiene la potestad para aplacar a Oggun y a Changó. En este sentido, se caracteriza por ser un dios misericordioso, paciente y amoroso. En la naturaleza, está representado por las montañas.

Vea también Oggun.

Es un dios sumamente respetado, puesto que ostenta la máxima autoridad en la jerarquía orisha. Es el que intercede ante otro orisha por cualquier individuo en dificultades.

Obatalá, como tal, tiene veinticuatro caminos o avatares. El castillo que habita tiene dieciséis ventanas por las que no entra el sol, el aire o el sereno. Además, es el único orisha que tiene caminos masculinos y femeninos.

Su fecha es el 24 de septiembre, su número el ocho y sus múltiplos, su color el blanco, su día de la semana el jueves y el domingo, y su saludo es "¡Jekúa Babá!" Se sincretiza con la Virgen de las Mercedes.