Qué es Ladrón que roba a ladrón tiene cien años de perdón:

"Ladrón que roba a ladrón tiene cien años de perdón" es un dicho popular que se usa para justificar una acción incorrecta cuando esta es cometida contra una persona deshonesta.

Quien usa esta frase parte del principio de que una acción mala cometida contra alguien malvado es comprensible y, por tanto, justificable hasta cierto punto, como si se tratara, de hecho, de un acto de justicia o de venganza, lo que coloquialmente se llama "dar un merecido".

La imagen del refrán se relaciona de algún modo con el imaginario religioso del purgatorio, que en la mentalidad católica representa un lugar en el cual las almas de los pecadores purgan sus culpas para poder entrar al cielo. Algunas acciones en vida pueden implicar la acumulación de indulgencias para reducir el tiempo en el purgatorio. El dicho popular se ancla a esta imagen simbólicamente, pues no se trata realmente de una creencia doctrinal sino de una figuración.

Aunque haya una cierta justificación, quien usa el refrán sabe que hay un acto condenable, solo que aminora su gravedad en virtud de que no ha causado daño a un inocente.

Otras modalidades de este refrán son "Quien burla al burlador cien días gana de perdón" o "No hay mejor invención que engañar al engañador".

Ver también A lo hecho, pecho.