¿Qué es gestión de calidad?
La gestión de calidad son todos los procesos que se llevan a cabo en una empresa para garantizar una ejecución óptima de sus actividades.
Todos estos procesos y métodos se agrupan en una estructura única llamada sistema de gestión de calidad, que variará en función del tipo de organización, el rubro al que se dedica y sus objetivos.
Cuando la gestión de calidad cumple con ciertos estándares, puede ser reconocida con la norma ISO, que certifica que los procesos aplicados de forma sistemática por la organización se traducen en productos y servicios con los más elevados parámetros de seguridad industrial, salud y procesos de producción.
Sistema de gestión de calidad
Un sistema de gestión de calidad es una especie de guía en la que se detallan los procesos, procedimientos, estructura, recursos económicos, técnicos y humanos con los que cuenta la organización.
El sistema de gestión de calidad cumple dos funciones esenciales:
- Garantiza que los procesos se ejecuten de forma sistemática, puesto que ya están debidamente detallados.
- Permite la mejora continua, ya que según los resultados obtenidos se pueden sustituir o incorporar nuevos procesos que aseguren la calidad.
Además, la implementación de un sistema de gestión de calidad puede ofrecer múltiples ventajas a la organización, tales como:
- Diferenciación de la competencia, al ofrecer productos y servicios que
- Sistematización de procesos, lo que se traduce en mayor productividad y ahorro de recursos.
- Expansión de la organización, bien sea en términos de aumento de la producción, nuevos proveedores o clientes.
- Incorporación a un grupo de organizaciones que comparten estándares de calidad, como la norma ISO-9001
Gestión de calidad total
La gestión de calidad total es un método japonés desarrollado a mediados del siglo XX y que se basa en la mejora continua para lograr los mayores niveles de eficiencia posible.
Este método, llamado Kaizen en su idioma original y creado por el japonés Masaaki Imai, implica una interpretación de la calidad no solo como una meta de los procesos, sino como cultura que atraviese todas las áreas de la organización.
En la gestión de calidad total, los empleados pueden contribuir con el logro de los objetivos de la empresa con pequeñas acciones cotidianas, tales como:
- Evitar el despilfarro de recursos.
- Respetar los tiempos de cada proceso.
- Procurar la organización detallada.
- Producir productos o servicios solo bajo pedido, para evitar pérdidas.
Principios de la gestión de calidad
La gestión de calidad tiene ocho principios básicos:
Enfoque al cliente
Las organizaciones no solo tienen que conocer las necesidades de sus clientes, sino que deben adelantarse a sus necesidades futuras. Además, deben ofrecer diferentes opciones de productos y servicios que se ajusten a sus necesidades.
Liderazgo
Se espera que los cargos directivos y con poder de decisión ejecuten buenas prácticas de liderazgo que generen un ambiente de inclusión entre los empleados. De esta forma, se involucrarán en el logro de los objetivos de la organización.
Participación del personal
Los empleados de la organización deben orientar sus habilidades hacia el logro de los objetivos de la empresa. Esto requiere no solo de liderazgo, sino de un plan de incentivos atractivo.
Enfoque basado en procesos
Las organizaciones orientadas a la calidad deben abandonar la percepción de una estructura dividida en funciones, cargos o departamentos. En cambio, deben entender su funcionamiento como una cadena de procesos.
Enfoque de sistema
Los procesos de la organización no son aislados, forman parte de un engranaje mayor. Por lo tanto, la falla de un proceso implica un desequilibrio en el sistema.
Mejora continua
Todos los procesos deben revisarse continuamente en busca de oportunidades de optimización.
Enfoque basado en hechos
Las decisiones de las organizaciones deben estar basadas en datos medibles.
Relación ganar-ganar con los proveedores
La relación de la organización con sus proveedores de productos y servicios debe ir más allá de un intercambio comercial. Se deben establecer alianzas que beneficien la productividad y la rentabilidad de ambas partes.
Gestión de calidad y control de calidad
Aunque se suelen utilizar como sinónimos, la gestión de calidad se refiere a un conjunto de procesos, mientras el que el control de calidad se refiere a actividades de inspección que se realizan con el objetivo de verificar que el producto o servicio cumpla con los estándares necesarios.
En una empresa que tenga un departamento de control de calidad, este proceso formaría parte de su sistema de gestión.
Estándares de gestión de calidad (norma ISO).
Aunque cada organización tiene sus propios lineamientos y sistemas de gestión de calidad, hay parámetros de carácter internacional que sirven para estandarizar sistemas y procesos, independientemente del país en el que se lleven a cabo.
Esto permite aumentar la productividad y dinamizar los procesos de intercambio comercial interno e internacional, al sustentarse en elementos comunes (tipos de materias primas, maquinarias, medidas, procesos, etc.)
En este sentido, si bien existen normas para cada rubro, la norma ISO-9001 es una de las más conocidas, ya que se aplica a cualquier empresa, puesto que lo que certifica es el cumplimiento de parámetros generales de satisfacción al cliente y capacidad de producción.
Las normas ISO son pautas creadas por la International Organization for Standardization, una organización fundada en 1946 para estandarizar procesos industriales.