Qué es el Embarazo Precoz:

El embarazo precoz es aquel embarazo que se produce en la pubertad o en la adolescencia de una mujer. Por lo general, la pubertad se origina a partir de los 9 años en niñas y 11 años en niños finalizando entre los 14 y 15 años de edad. No obstante, la Organización Mundial de la Salud (OMS) contempló la adolescencia entre los 10 y 19 años de edad.

La mayor parte de estos embarazos no son planeados ni deseados, originando situaciones complicadas a nivel biológico, económico, psicológico y social.

En el ámbito biológico, la mujer presenta alto riesgos durante el embarazo o parto ya que su cuerpo no se encuentra totalmente desarrollado para los futuros cambios físicos, por lo tanto, se le debe de brindar atención médica por el bienestar de su salud y el del niño.

En el ámbito económico y psicológico, como bien se sabe un hijo es una gran responsabilidad y la mayoría de los adolescentes no están emocional ni económicamente preparados para asumir ese compromiso, por lo que es muy probable que dejen los estudios para trabajar o realizar ambas actividades generando un alto estrés ya que son muy pocos los momentos que estarán con sus amigos y puedan divertirse. En ocasiones, los padres adolescentes se ven forzados a contraer un matrimonio no deseado, que posee pocas probabilidades de ser estable.

En el ámbito social, la niña es vista como la culpable de la situación por lo que en muchas ocasiones puede sentir rechazo y falta de apoyo por parte de sus familiares, amigos y de todo su entorno, generando problemas a nivel psicológico como de salud, este último tanto a la madre como al niño, asimismo, sufre de una deserción escolar y dificultad en la búsqueda de empleo y nueva relación amorosa.

En referencia a todo lo dicho anteriormente, los padres adolescentes al considerar su futuro rol, causas y consecuencias pueden buscar como solución el aborto espontáneo o inducido, bien sea legal o ilegal, todo depende de las leyes de cada país, arriesgando la salud de la madre o, dar en adopción su hijo al momento de nacer.

Debido a lo anterior y para evitar la mortalidad de madres y recién nacidos, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha realizado un llamado para promover la educación sexual en centros educativos y hogares, el acceso a los métodos anticonceptivos y la asistencia de la salud pública con el fin de evitar los embarazos precoces o en adolescentes.

Vea también Embarazo.

Causas del embarazo precoz

La mayoría de los adolescentes sexualmente activos no utilizan con regularidad ningún tipo de anticonceptivos, entre las muchas razones que dan para ello se encuentra las siguientes: no creen estar en el período del mes en que hay riesgo de embarazo, no saben cuándo tendrán un encuentro sexual, creen ser demasiados jóvenes para gestar, creen que no tienen una actividad sexual tan frecuente como para que se produzca un embarazo o, la falta de información del uso de métodos anticonceptivos, entre otras razones. No obstante, en ocasiones existe la práctica de relaciones sexuales no deseadas por parte de los adolescentes producto del consumo del alcohol o drogas que contribuyen a los embarazos no deseados.

Los embarazos prematuros o en adolescentes como resultado de una violación o abuso sexual por parte de su pareja, familiar o de un tercero. Con respecto a este punto, en algunos países se considera abuso sexual de menor de edad, establecido por la ley cuando un adulto tiene relaciones sexuales con un menor de edad con el fin de proteger al menor ya que carece de madurez para tomar la decisión de tener relaciones sexuales con adulto, así el mismo apruebe el acto. Por lo tanto, un adulto debe de buscar una persona que tenga como mínimo la edad de consentimiento.

Asimismo, estudios han revelado que el abandono por parte de los padres en la infancia de la adolescente, convivir en una familia disfuncional y, la carencia económica aumenta las probabilidades de un embarazo no deseado.

Vea también Embarazo no deseado.

Consecuencias del embarazo precoz

La adolescente que sufre un embarazo a temprana edad sufre consecuencias médicas y psicológicas tanto ella como el recién nacido. Entre las médicas tenemos: riesgo de sufrir preeclampsia y eclampsia, bajo peso del recién nacido debido a una mala alimentación, ingesta de alcohol, tabaquismo, etcétera; anemia, alto riesgos de mortalidad para la madre debido a enfermedades hipertensivas, embarazos ectópicos y, el recién nacido la aparición del síndrome de la muerte súbita de lactante, espina bífida, entre otras enfermedades.

En cuanto a las consecuencias psicológicas, frustración y depresión por las nuevas limitaciones que no la permite realizar una vida acorde a su edad y entorno producto de su nuevo rol de madre, la cual la lleva a un abandono de los estudios y la búsqueda de un trabajo que ayude al sustento económico de ella y del bebe, dificultad para formar una familia, maltrato psicofísico del niño, entre otras consecuencias.