Qué es el Dualismo:
Dualismo es un sistema religioso y filosófico que admite la existencia de 2 principios diversos y contrarios entre sí, como el espíritu y materia, cuerpo y alma, bien o mal, y que entre uno y otro, siempre están en un eterno conflicto. En China, el dualismo se observa en la materialización del yin y yang.
Con respecto al término de dualismo, se puede hacer referencia a el en distintos ámbitos como: religioso, metafísico, filosóficos, entre otros. El dualismo son las diferentes doctrinas dualistas que intentan explicar el origen y la naturaleza del universo por la acción de 2 principios diversos y contrarios.
Vea también Alma.
Dualismo y monismo
El dualismo es una doctrina que admite cuerpo y espíritu en los seres humanos pero siempre calificándolos como principios antagónicos e independientes, aunque puedan interactuar entre ellos. En el siglo XVIII, la doctrina dualista se diferenció de la doctrina monista, debido a que el monismo acepta un único principio, material o espiritual, en el primer caso se conoce como somaticismo y, en el segundo como espiritualismo. Los filósofos materialistas ignoran la existencia del lado espiritual.
Dualismo en filosofía
Diferentes autores reconocieron esta doctrina en diferentes formas. A comienzos del siglo XVII, Descartes fue el primer filósofo en exponer la existencia de 2 especies de sustancias diferentes, espiritual o espíritu y material o cuerpo y el cerebro sirviendo como puente para su interacción. Aristóteles interpreta el bien y mal, a su vez, Platón, establece la existencia de un mundo sensible de la materia y el mundo inteligible de las ideas.
Immanuel Kant, introduce como dualismo, la razón pura y la razón práctica.
Dualismo teológico o religioso
La doctrina dualista en el área religiosa o teológica establece 2 rasgos; la existencia del bien identificado con la luz y el espíritu y, el principio del mal asociado con el diablo o demonio. En este sentido, la Iglesia Católica reaccionó contra esta doctrina alegando, que solo existe un Dios único, omnipotente, sin que pueda existir un mal que limite su potencia, así como, todo lo creado por Dios es bueno, tal como lo establece en el libro de Génesis.