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La paradoja del barco de Teseo: ¿qué es y qué explica?


La paradoja del barco de Teseo se basa en hacerse la pregunta de si después de haber sido reemplazadas todas las piezas que conforman un objeto, este puede seguir considerándose el mismo o pasaría a ser un objeto diferente al inicial.

Es una paradoja que tiene su origen en una leyenda de la mitología griega, la cual consta de diversas variaciones y preguntas adicionales a la original. En este artículo vamos a revisar de qué se trata esta popular y mítica paradoja griega.

¿Qué es la paradoja del barco de Teseo?

La leyenda que da origen a la paradoja del barco de Teseo relata que en una oportunidad Teseo regresaba de la isla de Creta, junto con su tripulación, e iban en un barco que ya era bastante viejo. Durante el camino (el cual fue bastante largo) el navío se fue dañando cada vez más. Cada daño que sufría el barco era reparado por los tripulantes, siendo reemplazada la pieza rota por una en mejores condiciones, y en ocasiones las piezas eran recicladas y se colocaban en partes diferentes del barco.

Cuando Teseo y sus tripulantes llegaron a puerto, el barco había sido completamente modificado, no quedaba una sola pieza que fuese del navío en el que salieron de la isla de Creta, o en su defecto estas habían sido recicladas y colocadas en lugares distintos, como una nueva pieza.

Este particular evento suscitó una pregunta por parte de los filósofos de aquel tiempo: “¿el barco en el que Teseo y sus tripulantes han llegado a puerto es el mismo barco en el que han salido de la isla de Creta?”.

Explicación de la paradoja

Lo que se busca con esta paradoja griega es aclarar de alguna manera cuál es la esencia de los cuerpos y objetos, su identidad, lo que los hace algo único.

Aunque la leyenda cuenta la historia del barco de Teseo y sus tripulantes, la paradoja se puede extrapolar a casi cualquier otra cosa. Es aplicable a otras situaciones y objetos que experimenten un cambio intenso en la mayoría de sus partes iniciales.

Ejemplos de la paradoja

Algunos buenos ejemplos en nuestra época actual que pueden servirnos para ilustrar de manera adecuada la paradoja del barco de Teseo son los siguientes.

1. Repotenciar el ordenador

Cuando las personas repotencian su ordenador, el proceso pasa por reemplazar una serie de elementos a nivel físico (hardware) y de programación (software) que son bastante significativas para el funcionamiento del equipo.

Básicamente, las piezas que se reemplazan hacen que el computador opere como uno diferente al que se tenía anteriormente, pero... ¿Es realmente otro computador? ¿O es el mismo computador con nuevas piezas?

2. Reconstrucción de vehículos

En ocasiones, después de un siniestro, algunos vehículos quedan bastante dañados por el accidente y son reparados casi en todas sus piezas. La reparación de estos vehículos consta de reemplazar todas las piezas dañadas por piezas nuevas o usadas en buenas condiciones.

Las preguntas que surgen una vez finalizado el proceso de reconstrucción del vehículo son las mismas que las del ejemplo anterior.

3. Venta de locales comerciales

Cuando se realiza la venta de un inmueble comercial, por lo general se cambia casi todo del mismo; el personal, la infraestructura, y en ocasiones hasta el nombre.

Pero si el comercio sigue dedicándose a lo mismo que el anterior, surgen de igual manera las preguntas que ya conocemos.

4. El cuerpo humano

Los seres humanos son lo suficientemente longevos como para que prácticamente todas sus células sean reemplazadas varias veces por generaciones más jóvenes.

Soluciones propuestas

El célebre filósofo Aristóteles propone dar solución definitiva a las interrogantes propuestas por la paradoja del barco de Teseo diferenciando entre los diferentes tipos de causas.

1. Diseño formal

Mientras que una cosa mantenga su diseño formal, es decir, que siga viéndose de la misma manera, no deja de ser la misma cosa.

2. Causa material

Si un objeto mantenga su materia inicial, es decir, que no sea reconstruido con piezas de otro material, sin importar si estas son nueva o no, se puede seguir considerando el mismo objeto.

3. Causa final

La causa final consiste en el fin para el cual ha sido hecho dicho objeto. Mientras que un cuerpo u objeto, por más reconstruido que pueda estar, siga manteniendo su causa final (el fin para el que fue diseñado), seguirá siendo el mismo objeto inicial.

4. Causa eficiente

Esta última consideración de Aristóteles propone que mientras los métodos empleados en la reparación y el reemplazo de las piezas de un objeto se hagan siguiendo el protocolo estipulado para ello, el objeto se mantiene siendo el mismo de antes, únicamente que con modificaciones diseñadas para el mismo.

Definición de "lo mismo"

Por último, es importante comprender que la definición de “lo mismo” es algo de carácter completamente subjetivo, porque para algunas personas puede ser lo mismo tener dos bicicletas exactamente iguales guardadas en su cochera, pero para los más puritanos esta idea no valdría.

Teniendo en cuenta que no puede haber dos bicicletas ocupando exactamente el mismo espacio físico en ningún lugar a pesar de que las bicicletas sean idénticas, estas tendrían una característica que la otra no puede compartir: el espacio físico ocupado jamás será el mismo.

Referencias bibliográficas:

  • Aristóteles (2008). Metafísica. Alianza Editorial.
  • Cohen, S. M. (2004). Identity, Persistence, and the Ship of Theseus. faculty.washington.edu.