Empresas que cuidan el talento humano
Cada vez con mayor comprensión, las empresas comienzan a valorar la importancia de cuidar a las personas, ya que en el talento humano se encuentra la capacidad de gestioar bien los procesos internos y hacer sostenibles los negocios en los entornos competitivos y cambiantes.
A lo largo de los años, en el ejercicio de acompañar empresas en el desarrollo de modelos de bienestar sostenibles, impactando la rotación, la fidelización y por supuesto los resultados en términos financieros, cada vez se hace más necesario contar con procesos que permitan entrar en el universo de las personas desde las lógicas de la responsabilidad.
En los últimos años, he acompañado a grandes empresas en el desarrollo de modelos de selección clínica y cada vez estoy más convencida del valor que tiene ponernos el lente de la comprensión del otro, con el interés de cuidar los dos ejes: El Ser humano y entorno productivo/competitivo.
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¿Qué es el Modelo de Selección con enfoque Clínico?
Nada más bonito que elegir desde el cuidado, personas para los roles, cualquiera que sea el nivel de ejecución del rol, pero que esté alineado con la cultura Organizacional, con sus valores y con las posibilidades de desarrollarse.
El modelo de selección con enfoque clínico se desarrolla a la medida de cada organización y va a depender de quienes habitan este ecosistema; sus líderes, sus conversaciones, su propósito, su mercado, su composición y ADN de Marca y de negocio, esto atravesado por la percepción y la palabra.
¿A dónde nos lleva un Modelo de selección clínica? El modelo se construye en bases epistemológicas de la Psicología Clínica, especialmente de la Psicología Dinámica por su fuerte comprensión en los ejes que componen la Psiquis del Ser humano: yo – Ello – Súper Yo y especialmente el Universo del Inconsciente. Carl Jung es uno de los teóricos que más relevancia toma en el fundamento metodológico del modelo clínico, ya que sus investigaciones y teorías revelan verdades que facilitan la comprensión del concepto del Yo, desde lo individual y colectivo.
Jung expone la caracterización del Inconsciente en la vida de las personas, su manifiesto atemporal, inocente, sus leyes fundamentales y sobre todo el contenido que lo habita; el valor de la información contenida en éste. Por eso, llegar a navegar en estas aguas es de especial valor para las personas que lideran y son responsables de los procesos de selección de las organizaciones, y que están comprometidas con el cuidado desde la coherencia de sus procesos, atendiendo además a un reto importante que tiene que ver con la responsabilidad y el cuidado de las personas que se encuentran en calidad de candidatas.
El modelo de selección clínico permite leer componentes predictivos y postdictivos de la conducta humana, basada fundamentalmente en los antecedentes, la historia de vida, las elecciones, la motivación, los aprendizajes, competencias, actitudes y aptitudes; todo lo demás contenido en el Universo del Inconsciente. De ahí la importancia de contar con Psicólogos y especialistas de lo humano, para poder navegar estas aguas con elementos cuidadores e instrumentos facilitadores que permitan ingresar a lo más profundo del contenido inconsciente.
Sabemos, entre otras verdades, que el contenido de la conciencia es limitado, y que en él se encuentra información de poca utilidad a la hora de hacernos preguntas que van más allá de la banalidad, que van a lo profundo. Lo profundo verdaderamente se encuentra en esa porción del 90% de la psiquis humana que guarda este valioso contenido: Lo inconsciente.
¿Y cómo llegamos al contenido inconsciente? De manera responsable y empática. Las personas responsables de los procesos de selección deben tener una formación fundamentalmente humana, y deben estar capacitadas para sostener conversaciones profundas, capaces de hacer lectura de la corporalidad, de lo simbólico, formadas esencialmente en el método socrático, con alta capacidad argumentativa, crítica y creativa que le permita ir llevando al otro por el camino de la verdad, para luego interpretar esta información y ponerla de manifiesto con las lógicas de la organización, responsablemente.
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¿A dónde nos lleva?
El modelo de selección con enfoque clínico permite entender y comprender la capacidad que tiene el individuo para gestionarse a sí mismo, e interactuar con los retos y cambios del entorno. Además, permite trazar la ruta de desarrollo para que esa persona puede seguir avanzando en su evolución, teniendo en cuenta la generación de valor, sin que requiera hacer renuncias insostenibles para la persona que impacten su sistema psíquico, su salud mental y su salud física.
Como seres humanos somos más que la suma de nuestras partes; somos cuerpo (materia), mente (pensamiento), y espíritu (alma), y esta tríada maestra entra a interactuar en una robusta dinámica empresarial que desde sus lógicas de comunicación e interacción podrán o no facilitar el desarrollo del potencial de la persona o, por el contrario, sucumbir en el intento.
Un modelo de selección clínico bien ajustado a las demandas y realidades del entorno competitivo entrega resultados inmediatos, que al final de cuentas se resumen en cuidado financiero para la organización, ya que personas felices y conectadas en sus puestos de trabajo, en sincronía con su propósito de vida, son personas capaces de retarse, de ir más allá; son curiosas, entregan todo su potencial y experimentan verdaderas experiencias de flujo o Flow, como lo diría Mihaly, y que bien lo explica al detalle la Psicología Positiva y de las Fortaleza, donde el modelo clínico también se complementa desde estas posturas teóricas de bienestar.
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¿Qué debemos tener en cuenta para construir un modelo de selección clínica?
Lo primero es el valor que le dan las empresas a las personas. Embarcarse en un modelo de selección con enfoque clínico de entrada está conectado con la coherencia del bienestar y del cuidado.
Implica conversaciones profundas, implica hacernos responsables, implica tener un equipo de selección bien nutrido en las teorías de la psicología clínica o por lo menos ser sensibles a éstas, implica pasar por la incomodidad de comprender que a veces lo que esperamos no es lo que se ajusta a lo que somos, implica movimiento, implica líderes coherentes y responsables, implica miradas críticas, implica decir no, ese que a veces incomoda.
Es un modelo tan nutrido que no es estático, es completamente cambiante, por lo que lleva a profundas conversaciones y grupos de estudio donde se facilite la comprensión del individuo en torno a las nuevas realidades y formas de existir.
¿Cuál es su insumo de mayor valor?
La entrevista clínica fundamentada en el Método Socrático y en el arte de la mayéutica que nos dejó como regalo Sócrates. Un modelo de selección con mirada clínica no necesita más que este insumo. No requiere un abordaje de pruebas psicotécnicas y baterías interminables que te venden “la verdad”, una verdad muy amañada que no responde a las realidades de los entornos y de las personas en su completa comprensión y dimensión, no son más que indicadores estandarizados que lejos están de construir verdades sostenibles en el mundo de Hoy, un mundo profundo, donde hay tantas verdades como personas vivas.