La recaída en la adicción se puede prevenir
Una de las preguntas más comunes sobre la adicción tiene que ver con la posibilidad de recaídas. La mayoría de las personas se preguntan por qué una persona que ha estado sin consumir un tiempo, de repente se da un atracón de alcohol, drogas, juegos de azar, sexo o cae de nuevo en algún otro comportamiento adictivo.
Estas recaídas son difíciles de entender porque parecen ir en contra de todo por lo que la persona ha trabajado hasta ese momento.
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Las claves para comprender la recaída en la adicción
La adicción es un problema social y de salud mental complejo que puede manifestarse como una enfermedad cerebral crónica y recidivante.
Si bien aún se comprenden las causas de la adicción, se ha demostrado que algunos factores contribuyen más que otros al riesgo de adicción. Esto incluye genética, exposición a drogas o alcohol durante algún periodo de nuestra vida, antecedentes familiares de problemas de adicción o problemas de salud mental como depresión y ansiedad.
La prevención de recaídas es una parte importante del tratamiento de la adicción. Es el proceso de conocer las señales de advertencia que pueden desencadenar una recaída. Es por eso por lo que es importante tomar las medidas necesarias para evitarlas o afrontarlas cuando sucedan.
Un adicto puede recaer por muchas razones, pero no tiene por qué ser el final del camino. Hay muchas formas diferentes de evitarlas, incluida la búsqueda de lo que la provocó.
Hay que tener en cuenta que las recaídas son una parte desafortunada pero natural de la recuperación. Aparecen cuando se da por hecho que lo hemos logrado.
Y no, superar una adicción no es nada fácil.
No importa si se trata de un problema de adicción a sustancias o a conductas; superar esa dependencia requiere tiempo y es complicado. Además, va a requerir de ti un gran esfuerzo y que reevalúes todos los valores de tu vida.
La adicción a sustancias es muy poderosa porque se dirige al sistema de recompensa del cerebro. Puede llevar años recuperarse, por lo que es crucial que busques herramientas que te ayuden a superarlo.
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El reto de dejar atrás la dependencia
La adicción es un tema complejo y difícil. Para el individuo, significa luchar contra dos enemigos principales: su adicción y él mismo. Para amigos y familiares, significa tratar de encontrar formas de ayudarlo a luchar contra estos dos enemigos.
Es muy posible que se quiera volver a caer en la tentación de consumir. En esto influye mucho el factor psicológico, por el cual el adicto recuerda y anticipa de manera positiva su contacto con el objeto de la adicción. Esto, por otro lado, hace que entre en un estado de ansiedad durante el cual no puede hacer otra cosa que pensar en ello.
Por otro lado, las recaídas suelen deberse a alteraciones de la química cerebral. El uso de drogas y alcohol puede hacer que la dopamina se acumule en el cerebro, lo que puede conducir a un comportamiento adictivo.
El cuerpo empieza a pedir la sustancia que consumías, y es posible que la biología del cerebro pida repetir ese consumo o ese comportamiento para conseguir ese efecto placentero. En caso de que no cedas y decidas no caer, debes saber que te vas a sentir mal, y debes estar preparado/a para combatir el síndrome de abstinencia.
La adicción a las drogas o al alcohol puede ser una fuerza muy poderosa. Cuando las personas se enfrentan a la decisión de dejar de consumir o seguir consumiendo, a menudo se sienten abrumadas por las consecuencias de su adicción. Con demasiada frecuencia, la persona recaerá en su adicción para escapar de las emociones que surgen al enfrentar su adicción de frente.
Y es por esto por lo que es fundamental que hayas interiorizado esos valores que te han hecho querer dejar de consumir, y que en todo momento te sientas motivado para no hacerlo. De otra manera, volverás a caer.
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¿Entonces, recaer es normal e inevitable?
La recuperación de la adicción es un viaje largo y difícil. Algunos adictos logran la abstinencia total y nunca experimentan impulsos o lapsus, pero para muchos otros, este no es el caso. Para desprenderse de la adicción con mayor eficacia, se requiere un enfoque multifacético, interviniendo en lo social, lo orgánico, lo comportamental...
Un error común que se comete en los programas de adicción es asumir que habrá recaídas. Además, a veces se tiende a explicar al paciente desde el principio que esto puede ocurrir y que el programa no es una "cura".
La adicción es una enfermedad crónica que no desaparece. Desafortunadamente, la recaída es común. Por eso es importante trabajar en estrategias de prevención de recaídas con tu terapeuta y tomar medidas para minimizar el riesgo de craving.
Como persona con una adicción, es posible que el paciente no se dé cuenta de que su adicción tiene un efecto en el mundo que lo rodea. Además de las consecuencias emocionales de la adicción, el hábito de las drogas tiene consecuencias en las finanzas y las relaciones. Cuando el adicto recae en su adicción, se vulneran los cimientos que se han construido a lo largo de su proceso de recuperación. Los efectos emocionales pueden ser grandes, pero también existen.