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Hipótesis de la abuela: qué es y qué propone acerca de la evolución humana


El proceso de la menopausia muchas veces es tomado como algo negativo y, además, desde un punto de vista evolutivo y de supervivencia para la especie podría parecer contraproducente.

Sin embargo, se han desarrollado investigaciones al respecto que han encontrado un serie de ventajas para la supervivencia de la especie, dado el papel tan importante que juegan las abuelas en el cuidado de los nietos.

La hipótesis de la abuela es una teoría que fue desarrollada hace 60 años con el fin de explicar una serie de beneficios que puede tener la menopausia desde una perspectiva evolutiva para el ser humano y también para otras especies en las que se da este proceso, a pesar de que, por lo que se sabe hasta ahora, hay muy pocas especies en las que exista la menopausia.

A continuación explicaremos en qué consiste la hipótesis de la abuela y cómo se ha desarrollado, así como también cuales son las otras especies que, además del ser humano, pasan por el proceso de la menopausia.

¿Qué es la hipótesis de la abuela?

La hipótesis de la abuela es un supuesto hipotético que fue desarrollado con el fin de explicar el papel que desempeña la menopausia en el ser humano, desde un punto de vista evolutivo y de supervivencia de la especie, ya que las hembras de la especie humana se encuentran entre las pocas especies que pasan por dicho proceso, junto a algunas especies de los cetáceos (p. ej., la orca, la beluga, entre otras). Tras la menopausia, proceso por el cual dejan de ovular y, por tanto, de poder tener más descendencia, las hembras de estas especies pueden vivir décadas.

Es por ello que la menopausia se trata de un proceso poco habitual en la biología, dado que ni siquiera los mamíferos que comparten mayor parentesco con la especie humana pasan por este proceso. Las hembras de especies en las que no se da el proceso de la menopausia suelen tener poca esperanza de vida desde el momento en ya no pueden reproducirse, debido a que su ciclo reproductivo suele ser tan longevo como su esperanza de vida.

Primer planteamiento de la hipótesis de la abuela

En 1957, George C. Williams, un biólogo estadounidense, desarrolló una teoría sobre la menopausia, postulando que este proceso biológico por el cual pasan las mujeres entre los 45 y los 55 años aproximadamente supone para ellas una adaptación, debido a que, al vivir varios años más, podrían apoyar a sus hijas e hijos y ayudar en el cuidado de sus nietos. Esto, teniendo en cuenta que cuando el ser humano envejece aumentan las probabilidades de desarrollar enfermedades y los años de vida restantes disminuyen, y desde un punto de vista evolutivo no sería lo más adecuado tener descendencia a una edad avanzada.

Por lo tanto, Williams postuló que las mujeres de edad avanzada pueden contribuir en la transmisión de sus genes de la mejor manera posible ayudando a sus hijos y nietos a salir adelante, en lugar de continuar teniendo hijos a una avanzada edad con los riesgos que ello implicaría.

La hipótesis de la abuela de Williams se hizo como propuesta para explicar la supervivencia del ser humano a lo largo de la historia, algo que se debe tener en cuenta a la hora de entender esta teoría, dado que en la actualidad esta teoría quizás se quede un tanto obsoleta. Sin embargo, en la época de los grupos cazadores-recolectores, así como también en la época preindustrial, las abuelas podían colaborar en el cuidado de los nietos mientras sus padres se encontraban cazando-recolectando o, en épocas posteriores, trabajando.

Cabe destacar que esta hipótesis ha sido desarrollada desde una perspectiva biológica y evolutiva, dado que hoy en día la manera de vivir de nuestra especie ha cambiado notablemente, puesto que los medios, la calidad y la esperanza de vida han aumentado, de manera que incluso el hecho de tener descendencia o no es una elección y no una necesidad para sobrevivir como especie.

Hipótesis de la abuela y crianza

Apoyo científico a la hipótesis

En la década de los 90 del siglo XX, la antropóloga norteamericana Kristen Hawkes investigó acerca de la importancia que tuvieron las abuelas en la prehistoria a favor de la evolución de la especie humana, postulando que la mejor manera de perpetuar los propios genes y, por ende, el de la especie, era apoyando a las hijas en el cuidado de los nietos, de manera que estos pueden salir adelante con mayor probabilidad de sobrevivir.

La hipótesis de la abuela fue investigada por Hawkes mediante las observaciones que realizó durante más de una década con familias del pueblo de Hada (Tanzania), que vivían de la recolección de alimentos y de la caza, una forma de vida similar a la de la prehistoria. Durante el estudio pudieron observar la relevancia que tenía en el desarrollo de los más jóvenes el hecho de que las abuelas colaborarán en la recolección de tubérculos cuando sus nietos no tenían todavía la suficiente fuerza como para hacerlo ellos.

Hay que tener en cuenta además que estas hipótesis estaban enfocadas en generaciones remotas, de manera que visto así, la abuela podía ayudar a recolectar comida para los nietos para que estos pudieran estar en casa protegidos o cuidarlos mientras su madre y su padre iban en busca de comida, por lo que esto ayudaban en la supervivencia de los nietos y facilitaba a sus hijas que pudieran darle más nietos.

En base a esta hipótesis, Hawkes afirma que el aumento de la longevidad en el ser humano fue favorecido gracias a la ayuda de las abuelas en la alimentación de los nietos que ya no necesitaban la lactancia materna, de manera la abuela se encargaba de ayudar con en su cuidado y su alimentación mientras que las madres podían tener los siguientes bebés antes.

Además, esta hipótesis se basa en la conjetura de que los nietos pueden tener una infancia más larga que permita un mejor desarrollo hacia la etapa adulta gracias a la ayuda de las abuelas en su cuidado y en la ayuda de cara a recoger alimentos o en cualquier tipo de ayuda que pudieran ofrecer a su familia. Sin embargo, no han faltado las críticas a este estudio achacando una falta de datos estadísticos.

Especies de animales en las que se cumple

Cuando Williams desarrolló sus investigaciones en relación a su hipótesis, esta solamente era aplicada al ser humano. Sin embargo, estudios posteriores realizados por científicos de Canadá y Reino Unido pudieron corroborar dicha hipótesis en otras especies, como es el caso de las orcas.

Estos estudios documentan los beneficios para la supervivencia de la especie cuando las abuelas dejan de tener la capacidad para tener más descendencia, pudiendo comprobar que en aquellas familias en las que la orca más anciana había fallecido, los nietos sobrevivían con menor frecuencia que aquellos cuyas abuelas seguían con vida. Además, también pudieron comprobar que aquellas ballenas de edad más avanzada, que continuaban teniendo la capacidad de reproducirse, no prestaban el mismo apoyo que las que habían pasado por el proceso de la menopausia que brindaban un mayor apoyo.

Otros estudios con el elefante asiático encontraron que las hembras de esta especie con una mayor edad, ayudan en la protección para la supervivencia de los nietos, a pesar de que sigan reproduciéndose.

Estos estudios postulan que el periodo que viven las abuelas después de la menopausia, que suele ser bastante extenso, pudiendo durar décadas en el caso de los seres humanos, es muy beneficioso para el aumento de la longevidad tanto de los seres humanos como de las orcas, pues las abuelas ayudan en la supervivencia de los nietos notablemente, de manera que esto compensa notablemente el hecho de no poder tener más hijos, todo ello visto siempre desde un punto de vista puramente evolutivo y de supervivencia como especie