¿Cómo comprender a mi hijo adolescente?
Los conflictos entre padres e hijos adolescentes se dan, en parte, por la diferencia que hay entre generaciones.
Una aceleración tecnológica ha atrapado la atención de los adolescentes, que buscan sentirse conectados con el mundo a través de redes sociales, juegos...
Los adolescentes de ahora han desarrollado habilidades para el uso de estas tecnologías desde muy temprana edad, y en algunos chicos, esto ha generado hasta cierto punto un estilo de vida que conlleva mantenerse conectado la mayor parte del tiempo. En algunos casos han dejado de dar prioridad a actividades escolares por mantenerse ocupados de esta forma, y aumenta la preocupación de los padres ante cómo manejar el acceso y tiempos sin restringir totalmente el uso de esos dispositivos electrónicos.
Esto ha ocasionado conflictos en la relación entre padres y adolescentes. ¿Cómo abordarlos? Veámoslo.
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Errores habituales en la crianza de los hijos adolescentes
Cuando los chicos muestran intolerancia e irritabilidad y viene impactando a toda la familia, los padres realizan intentos a veces desesperados por mejorar la situación.
A continuación mencionaré las formas más comunes que usan los padres que acuden a sesiones de asesoría terapéutica:
- Imponer castigos, limitando el uso de aparatos en su totalidad (juegos, celulares, computadoras) por tiempos prolongados (de dos semanas a un mes).
- Regaños con expresiones con adjetivos descalificativos (necio, flojo, irresponsable, rebelde).
- Empujones, manotazos.
- Restringir permisos para fiestas o actividades de socialización con amigos.
- Asignar responsabilidades dentro de casa, como participar en alguna actividad de orden y limpieza de casa o de su cuarto.
- Limitar su acceso a escoger algún gusto personal y adquirirlo.
Muchas veces esto no les funciona, y los padres llegan a un punto en el que la paciencia se les agota y se dan cuenta de que ya no pueden "controlar" a su hijo adolescente.
Comprendiendo al hijo adolescentes desde la Psicología
Cuando los padres llegan a la consulta de Psicología, la asesoría que reciben va dirigida hacia algunos asuntos como los siguientes.
- Ayudarles a iniciar una nueva manera de realizar cambios para comunicarse con su adolescente.
- Dar herramientas para flexibilizar las restricciones impuestas.
- Establecer de forma clara y con acuerdos nuevos límites.
- Orientar a los padres sobre cómo ejercer su rol como padre y ubicar el rol de su hijo orientando responsabilidades acordes a su edad y que le permitan fortalecer su desarrollo.
- Ensañar a acompañar a su hijo adolescente en este nuevo camino de descubrimiento y autoconocimiento para convertirse en un joven y posteriormente en adulto.
Para esto se abordan los siguientes puntos:
- Comprender que su hijo inicia una nueva etapa de desarrollo que lo pone nervioso, con la necesidad de ser reconocido aun en sus emociones, frustraciones, inquietudes y el deseo de sentir cierta independencia.
- Lograr reconocer que los chicos pueden observarse a sí mismos, reflexionar sobre sus actos y lograr darse una explicación propia de su actuar.
- Reponerse fácilmente a los conflictos y continuar con sus actividades.
- Reconocer que cuando los jóvenes reaccionan para defender su posición no es por falta de respeto; intentan no ser asertivos para resolver sus conflictos existenciales, sin lograrlo.
- Intentan lograr su autonomía expresando sus estados de ánimo y la familia se ve impulsada a cambiar ritmos y tonos al comunicarse con los adolescentes.
- Entender que la forma en que el adolescente comienza a vivir dependerá de su personalidad, la forma que convivió con sus padres de pequeño, y los cambios de su entorno familiar.
- Entender cómo se siente su hijo respecto a su cuerpo, estatura, cambios hormonales, emocionales y que creencias al formar su autoconcepto y autoestima.
Posibles focos del problema
Los padres llegan a la consulta con la finalidad de encontrar ayuda para seguir apoyando el desarrollo y la formación de sus hijos. Por otro lado, a veces la consulta se vuelve preventiva para evitar futuros desajustes en la vida emocional de los chicos. Estos aspectos son importantes para iniciar un proceso de apoyo que permita fortalecer el desarrollo de los adolescentes y encaminar acciones para su salud mental y emocional.
Dentro de las dificultades que llegan alterar su salud mental en adolescentes están las siguientes.
1. Salud física
Hay enfermedades que llegan a manifestarse con síntomas de falta de energía, interpretándose como pereza o una falta de motivación o inicio de una depresión; por eso es importante mantener sus visitas desde el pediatra hasta este momento de la adolescencia.
2. La calidad de sueño
Los problemas para dormir bien pueden ser pasajeros o muy frecuentes; es importante buscar las causas. Pueden ocurrir por angustias o preocupaciones que son fáciles de solucionar y regular el sueño.
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3. Su alimentación
En cantidad y calidad, es fundamental poder mantener unos correctos hábitos alimenticios.
4. Su rendimiento escolar
En esta etapa es normal que comiencen a presentar ciertas variaciones en su rendimiento escolar. No es alarmante mientras se mantengan dentro de los promedios que se pueden dar.
Si este cambio es muy marcado e inesperado por tiempos prolongados o si manifiesta ausentismo escolar ya es motivo de poner atención y preocupación.
5. Problemas con sus amigos
La calidad de sus amigos es una variable importante para identificar si está ocurriendo alguna inestabilidad emocional en su desarrollo. Hay que observar si logra conservar sus amistades y hacer nuevos amigos, si siente rechazo por su grupo, o busca amistades que no le valoran o respetan.
6. Desajustes en el estado de ánimo
Las fluctuaciones de humor son muy frecuentes a esta edad. Si los cambios son muy radicales de un momento a otro e impiden conversar con él durante toda una semana, eso puede ser un indicio de quizás presenta una alteración psicopatológica y no puede manejarla. Aquí es donde se puede estar atento para buscar ayuda profesional.