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Efecto generación: qué es y cómo se puede usar para aprender mejor


Durante décadas varios psicólogos se han dedicado a estudiar un fenómeno psíquico tan complejo como interesante que es la memoria del ser humano y los diferentes tipos entre los que esta puede subdividirse (p. ej., memoria a corto plazo, a largo plazo, declarativa, procedimental, etc.), así como los procesos que se ponen en marcha para que podamos retener información, entre los que se encuentra el efecto generación.

El efecto generación es un fenómeno que ha sido descubierto al encontrar algunos investigadores que las personas son capaces de recordar una cantidad sustancialmente mayor de información cuando ésta es generada por ellas misma en comparación con aquella información que únicamente ha sido escuchada o leída. Esto demostraría que para estudiar de forma eficiente, conviene utilizar un método más activo que requiere mayor esfuerzo, en lugar de leer el texto solamente.

En el presente artículo explicaremos más detenidamente en qué consiste ese fenómeno relacionado con la memoria del ser humano que ha sido denominado como “efecto generación”. También veremos algunas investigaciones al respecto y su relación con el desarrollo de falsas memorias.

¿En qué consiste el efecto generación?

Desde hace varias décadas, varios psicólogos investigadores en el área de la memoria han estado estudiando un fenómeno psicológico que ha sido denominado como “efecto generación” (EG), que fue descubierto en los años 70 del siglo XX por un equipo de psicólogos cognitivos cuando pudieron observar, al realizar unos experimentos acerca del vocabulario de algunos sujetos investigados, que eran capaces de recordar con mayor facilidad las palabras cuando las generan; en otras palabras, recordaban mejor las palabras cuando traían activamente a la mente en lugar de leerlas en una página.

El efecto generación, por lo tanto, consiste en el hecho de que las personas somos capaces de recordar una mayor cantidad de información y traerla de nuevo a nuestra mente con mayor rapidez cuando ha sido generado con nosotros mismos, en comparación con la capacidad que tenemos para recordar esa información que solamente habíamos leído o escuchado. Esto demostraría que para estudiar de forma eficiente de cara a un examen, conviene utilizar un método más activo que requiere mayor esfuerzo, en lugar de leer el texto de forma pasiva sin hacer mayores esfuerzos para aprender.

Formas de aprovechar el efecto generación a la hora de estudiar

Existen diversas ventajas al aprovechar los beneficios que nos podría brindar el efecto generación a la hora de memorizar la información contenida en un temario que entra en el examen del que nos vamos a examinar.

En primer lugar, es recomendable resumir lo leído con nuestras propias palabras e intentar memorizar lo que hemos comprendido nosotros con esas palabras que hemos empleado para resumirlo, en lugar de leerlo una y otra vez tal cual aparece en el texto intentando memorizarlo de carrerilla.

Otro ejercicio muy aconsejable sería el desarrollo de mapas conceptuales donde se plasman los conceptos más importantes, de manera que cuando el estudiante echa un vistazo al mapa se encuentra una visión general del temario de forma estructurada que puede completar mentalmente al pensar en el significado de cada uno de los conceptos que aparecen plasmados en él.

De acuerdo con el efecto generación, aprenderemos con mayor facilidad y una mayor cantidad de información si utilizamos nuestro propio lenguaje en base a lo que hemos comprendido de lo leído y empleamos un esfuerzo para intentar unir una parte de la información con otra de manera activa, en vez de intentar memorizarlo pasivamente de manera idéntica a como está escrita.

Efecto generación para estuiar

Otras formas de aprovechar el efecto generación que podrían ayudar a los estudiantes a retener una mayor cantidad de información sería realizando ejercicios en los que falten palabras en el texto que deben rellenar, o también con ejercicios en los que aparecen listas de palabras en las que falta alguna palabra que deben adivinar en función de la categoría, por lo que en ambos casos deben hacer un esfuerzo para poder completar la información, permitiendo retener mejor la información que si aparecieras todas las palabras y el estudiante solamente tuviera que leerlas.

Es por ello que el efecto generación ha sido estudiado de forma exhaustiva durante varias décadas y ha llego a ser considerado como una ventaja para nuestra memoria y de cara a adquirir nuevos conocimientos o para realizar cualquier tarea en general de aprendizaje, y es que hay tres grandes motivos para tener en cuenta este efecto a la hora de estudiar o intentar adquirir nuevos conocimientos:

  • Nos puede ayudar a retener en nuestra memoria una mayor cantidad de información.
  • Nos facilita recuperar mejor esa información almacenada en nuestra memoria que habíamos generado.
  • Esa información generada será almacenada durante más tiempo en nuestra memoria a largo plazo.

En definitiva, si tenemos cuenta el efecto generación a la hora de estudiar o aprender seremos más eficientes y es más probable que podamos retener una cantidad de información mayor y además quedará almacenada durante más tiempo en nuestra memoria a largo plazo, ya que este efecto es considerado una gran ventaja para la memoria a la hora de tratar de retener información.

Investigaciones realizadas sobre el efecto generación

Existen numerosas investigaciones y experimentos que se han llevado a cabo para estudiar el efecto generación.

Entre ellas se encuentra el experimento que fue llevado a cabo por un equipo de psicólogos de la Universidad de Toronto, dirigido por Norman Slamecka, en el que los sujetos participantes debían memorizar una serie de palabras antónimas (p. ej., frío y caliente). Sin embargo, no recibieron el mismo tipo de tarjetas todos los voluntarios del experimento. Una mitad de ellos recibieron una serie de tarjetas donde aparecían escritas palabras antónimas (p. ej., caliente-frío), mientras que la otra mitad recibió cartas en las que solamente aparecía la letra inicial de la segunda palabra (p. ej., caliente-f).

Los resultados de este experimento fueron sorprendentes, al revelar que los sujetos participantes que mejor recordaron las tarjetas fueron los que habían obtenido las tarjetas donde faltaban letras porque solamente aparecía la letra inicial en la segunda palabra. Este experimento que confirma el efecto generación pone de manifiesto que a la hora de memorizar información si empleamos mucho esfuerzo en ello, utilizando un modo de aprendizaje activo en el que hayamos puesto mucha atención, nuestro cerebro nos permitirá comprender mejor esa información y, por lo tanto, la retendremos mejor.

Una revisión metaanalítica sobre el efecto generación que fue publicada en el año 2007 por Sharon Bertsh y sus colaboradores pudieron demostrar que el efecto generación es un hallazgo sólido y consistente como fenómeno psíquico relacionado con el aprendizaje y la memoria. No obstante, algunos de los experimentos llevados a cabo sobre el efecto generación que analizaron para el metaanálisis habían sido llevados a cabo con muestras de sujetos relativamente pequeñas, por lo que alentan a otros investigadores para que repliquen y/o puedan aplicar sus hallazgos.

Aún así, existe una amplia cantidad de estudios que han permitido demostrar que el efecto generación es un fenómeno que puede considerarse real y que debería ser más investigado para contar con una mayor demostración empírica.

Relación entre el efecto generación y las falsas memorias

En los últimos años ha habido un fenómeno dentro de la investigación sobre el efecto generación que ha suscitado bastante interés y no es otro que la relación que se ha encontrado que podría tener influencia en la producción de “falsas memorias”, siendo estas aquella información registrada en la memoria que no se corresponde con lo que una persona ha experimentado en realidad. Esto ha suscitado tanto interés porque resulta negativo e incluso paradójico que un fenómeno como el efecto generación, que supone una ventaja memorística, pueda también estar relacionado con las falsas memorias.

Supone un gran reto para los psicólogos que se dedican a la investigación relacionada con el área de la memoria, tratar de estudiar y comprender cómo es posible que un fenómeno como el efecto generación pueda producir unos resultados tan opuestos como el desarrollo de falsas memorias y a la vez una ayuda a la hora de retener un mayor cantidad de información.

A nivel teórico, existen investigaciones que han encontrado que el efecto generación se produce debido a que se da una multiplicación de redes de significado que han sido promovidas durante la tarea de aprendizaje; sin embargo, esas redes se pueden convertir en la causa de los falsos recuerdos.

No obstante, en algunos estudios experimentales que se han realizado con el fin de evaluar la relación entre el efecto generación y la producción de falsos recuerdos han encontrado una serie de resultados contradictorios, por lo que no han podido confirmar que esta hipótesis sea cierta. Por otro lado, estudios realizados en 2007 concluyeron que el efecto generación no tenía asociación con el desarrollo de falsas memorias, mientras que hubo algunos que sí encontraron una alta relación entre ambos fenómenos.

La conclusión que sacaron en el año 2012 un grupo de investigadores (Martínez et al.) es que no existe evidencia de que el efecto generación produzca un incremento de falsas memorias, siendo consistente con una amplia variedad de estudios, por lo que afirmaron que este fenómeno es muy beneficioso para el aprendizaje y la memorización de información, por lo que puede ser muy relevante para los estudiantes.