Diferencias entre trastorno de conducta y trastorno negativista desafiante
En la infancia y la adolescencia podemos encontrar dos trastornos que conllevan una desadaptación social y académica notable y estos son el trastorno de conducta y el trastorno negativista desafiante que, si no se tratan a tiempo y de manera adecuada, sobre todo el trastorno de conducta, podrían evolucionar durante la etapa adulta a conductas antisociales.
Dentro de las diferencias entre trastorno de conducta y trastorno negativista desafiante podemos encontrar las siguientes: distinta comorbilidad con otros trastornos, diferente gravedad de los comportamientos, distinta prevalencia, diferentes criterios diagnósticos o especificadores distintos.
En este artículo hablaremos acerca de las diferencias entre trastorno de conducta y trastorno negativista desafiante, pero antes conviene que veamos los criterios diagnósticos de ambos trastornos, ya que permiten conocer a grandes rasgos esas diferencias existentes, de acuerdo con los criterios del DSM-5.
- Artículo relacionado: "Conducta antisocial: qué es, factores de riesgo y trastornos asociados"
¿En qué consiste el trastorno de conducta?
El trastorno de conducta en el Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales DSM-5 antes era conocido con el nombre de “trastorno disocial” (DSM-IV-TR), y los principales criterios diagnósticos para estos trastornos son los que vamos a exponer a continuación.
El Criterio A del trastorno negativista habla de la existencia de un patrón persistente y repetitivo de conductas a través de las cuales se llegan a violar los derechos básicos de los demás y/o de las normas sociales fundamentales propias de su edad; además, esto debería encontrarse manifiesto a través de 3 o incluso más de los criterios, entre los que se encuentran algunos de los que vamos a comentar a continuación durante los 12 últimos meses o al menos 1 criterio durante los 6 últimos meses.
1. Agresión a animales y/o personas
Dentro de esta primera categoría de criterios podemos encontrar 7 de ellos relacionados con la agresión hacia los animales y también las personas, y los principales son estos:
- Amenaza o intimida a menudo a otras personas.
- Inicia peleas a menudo.
- Ha manifestado crueldad con otras personas o con animales.
- Ha robado con violencia.
- Quizás te interese: "Los 11 tipos de violencia (y las distintas clases de agresión)"
2. Destrucción de la propiedad
En esta segunda categoría podemos encontrar otros 2 criterios relacionados con la destrucción de la propiedad, siendo los siguientes:
- Ha provocado incendios de forma deliberada.
- Ha destruido las propiedades de otras personas de forma deliberada.
3. Robo y/o fraudulencia
Dentro de esta tercera categoría relacionada con el robo o la fraudulencia podemos encontrar 3 criterios que implican la apropiación indebida de objetos:
-
Ha violentado el vehículo o la casa de otras personas.
-
Miente con frecuencia para obtener ciertos beneficios.
-
Ha llegado a robar objetos valiosos sin llegar a enfrentarse con la víctima.
-
Artículo relacionado: "Cómo poner límites a los niños: 10 consejos para educarlos"
4. Violaciones de las normas graves
En esta categoría hay 3 criterios:
-
Suele hacer novillos en el colegio y/o en el instituto.
-
Ha llegado a escaparse de casa durante la noche al menos dos veces.
-
Con bastante frecuencia pasa las noches fuera de casa sin el permiso de sus padres o tutores.
-
Quizás te interese: "Las personas egoístas comparten estos 6 rasgos"
¿Qué es el trastorno negativista desafiante?
Dentro del DSM-5 también podemos encontrar clasificado el trastorno negativista desafiante, caracterizado por los criterios que vamos a comentar a continuación. El Criterio A se refiere a un patrón de irritabilidad, enfado y/o discusiones, actividad desafiante y/o vengativa que aparece durante 6 meses o incluso más tiempo, manifestándose además a través del cumplimiento de 4 o incluso más de los síntomas, clasificados dentro de 3 categorías.
1. Irritabilidad/enfado
Dentro de esta primera categoría podemos encontrar 3 criterios:
-
Pierde la calma a menudo.
-
Se irrita con facilidad.
-
Se muestra enfadado y/o resentido a menudo.
-
Artículo relacionado: "Irritabilidad: qué es, causas, y qué hacer para gestionarla"
2. Actitud desafiante/discusiones
En esta categoría se encuentran agrupados 4 criterios, que son los siguientes:
- Acusa a otras personas de sus propios errores con bastante frecuencia.
- Molesta a otras personas de forma deliberada con bastante frecuencia,
- Con frecuencia desafía de forma activa a las figuras de autoridad (padres, profesores, etc.).
- Discute con las figuras de autoridad a menudo.
3. Vengativo
En esta tercera categoría, únicamente podemos encontrar el siguiente criterio: ha llegado a ser vengativo y/o rencoroso al menos 2 veces a lo largo de los 6 últimos meses.
Principales diferencias entre trastorno de conducta y trastorno negativista desafiante
Después de haber comprobado los criterios diagnósticos de ambos trastornos ya podemos hacernos una idea de las diferencias que podrían existir entre ellos; sin embargo, conviene que comentemos con mayor detalle cuáles serían esas diferencias más destacables.
A continuación vamos a explicar las principales diferencias entre trastorno de conducta y trastorno negativista desafiantes, algo que sirve para establecer el diagnóstico diferencial entre ambos trastornos (aunque esta tarea solo puede ser llevada a cabo por profesionales de la salud mental).
1. Comorbilidad de cada uno de estos trastornos
La primera de las diferencias entre trastorno de conducta y trastorno negativista desafiante está relacionada con las diferentes comorbilidades existentes con cada uno de estos trastornos.
El trastorno negativista desafiante tiene una mayor comorbilidad con el TDAH (siendo mucho mayor la existencia del trastorno negativista desafiante en personas con TDAH que en población genera), trastornos de ansiedad, trastorno depresivo mayor y el trastorno de conducta, ya que estos trastornos pueden llegar a darse de forma comórbida.
Por otro lado, aunque una de sus mayores comorbilidades se desarrolla con el TDAH, los trastornos de ansiedad y el trastorno depresivo mayor, también tiene comorbilidad con los trastornos del aprendizaje, el trastorno bipolar y el trastorno por consumo de sustancias.
- Quizás te interese: "Las 6 etapas de la infancia (desarrollo físico y psíquico)"
2. Gravedad de los comportamientos
Otra de las principales diferencias entre trastorno de conducta y trastorno negativista desafiante que conviene destacar es la gravedad de los comportamientos que se dan en uno y en otro, siendo quizás la diferencia más destacable que existe entre ambas alteraciones.
En el trastorno de conducta son más graves los comportamiento ya que pueden perjudicar a otras personas y/o a los animales de manera agresiva, e incluso pueden llegar a llevarse cabo otros actos delictivos como fraudulencia o reno, destrucción de la propiedad y violación de las normas grave.
En cambio, en el trastorno negativista desafiante las conductas no son tan agresivas ni perjudiciales, ya que principalmente se basan en el enfado o la irritabilidad, las discusiones o la actitud desafiante y/o haber sido vengativo o rencoroso; siendo también suficientemente graves como para tenerse en cuenta pero no llegan a ser tan perjudiciales normalmente como las que se dan en un trastorno de conducta.
3. Curso y prevalencia
También existen algunas diferencias entre trastorno de conducta y trastorno negativista desafiante en cuanto al curso de cada trastorno y de su prevalencia. Empezando por el trastorno de conducta, cuya prevalencia se encuentra en torno a una media del 4% en menores, es un trastorno más frecuente en varones; además, esta prevalencia aumenta con la edad, siendo mayor durante la adolescencia, aunque es un trastorno que puede llegar a comentar durante la etapa preescolar. Por otra parte, es extraño que el trastorno de conducta comience después de los 16 años de edad.
En cambio, el trastorno negativista desafiante, tiene una prevalencia del 3,3% aproximadamente en menores de edad, siendo un trastorno que suele darse en mayor proporción en varones, aunque en la adolescencia no hay diferencias significativas con respecto al porcentaje de casos que se da en mujeres. En cuanto a los síntomas de este trastorno, cabe mencionar que suelen aparecer de forma gradual durante la etapa de preescolar y pocas veces comienzan a manifestarse después de la adolescencia.
Otra diferencia entre ambos trastornos es que los primeros síntomas del trastorno negativista desafiante podrían llegar a pasar desapercibidos durante varios años, mientras que los del trastorno de conducta suelen comenzar a llamar la atención antes.
4. Los especificadores
Entre las principales diferencias entre trastorno de conducta y trastorno negativista desafiante también conviene destacar los diferentes especificadores que podemos contar dentro del manual DSM-5 para ambos trastornos.
En el caso del trastorno negativista desafiante solamente nos encontramos un especificador relacionado con la gravedad actual del trastorno, en función de si los síntomas aparecen únicamente dentro de un entorno (p. ej., únicamente en casa) o si por el contrario se desarrollan en dos o incluso tres o más entornos.
En cambio, en el trastorno de conducta se pueden aplicar varios especificadores, además del que está relacionado con la gravedad actual del trastorno. Uno de estos especificadores se refiere al inicio del trastorno (infantil, adolescente o no especificado), mientras que el más destacable de los especificadores se refiere a 4 factores que podrían estar asociados a este trastorno, siendo estos los siguientes:
- Con un afecto deficiente o superficial.
- Se encuentra despreocupado por su rendimiento.
- Se muestra carente de empatía o insensible.
- Muestra una falta de remordimientos o culpabilidad.
- Muestra una limitadas emociones prosociales.
Como podemos ver, los especificadores de ambos trastornos pueden servir para que nos hagamos una idea de la mayor gravedad que tienen normalmente los síntomas del trastorno de conducta.