Carding: qué es
¿Qué pasa si pago con una tarjeta robada?. La responsabilidad recae en el banco que emitió la tarjeta del titular, y si la compra se considera posteriormente fraudulenta, el comerciante no es responsable de reembolsar al cliente.
Carding: qué es y cómo protegerse de esta amenaza cibernética
Imagina que un día, al revisar tu estado de cuenta bancario, te encuentras con cargos que no reconoces. Compras en tiendas donde nunca has estado, suscripciones a servicios que no utilizas… todo un caos financiero que te deja perplejo. Es entonces cuando te das cuenta de que has sido víctima de una de las prácticas más peligrosas en el mundo del cibercrimen: el carding, una forma de fraude que puede dejarte con las cuentas vacías y un dolor de cabeza monumental.
¿Qué es el carding?
El carding es una modalidad de fraude que consiste en utilizar tarjetas de crédito o débito robadas para realizar compras no autorizadas. Los delincuentes obtienen la información de las tarjetas a través de diversos métodos, como el phishing, el skimming o la compra de datos en el mercado negro.
Una vez que tienen en su poder los datos de la tarjeta (número, fecha de vencimiento y código de seguridad), los criminales pueden realizar compras en línea o en tiendas físicas, dejando al titular de la tarjeta con una deuda que no contrajo.
¿Cómo obtienen los delincuentes la información de las tarjetas?
Existen varios métodos que los cibercriminales utilizan para hacerse con los datos de las tarjetas de crédito o débito:
- Phishing: consiste en enviar correos electrónicos o mensajes fraudulentos que suplantan la identidad de entidades bancarias o comercios, con el fin de engañar al usuario para que proporcione su información financiera.
- Skimming: se trata de la instalación de dispositivos en cajeros automáticos o terminales de pago, capaces de copiar los datos de las tarjetas cuando son insertadas.
- Compra de datos en el mercado negro: los delincuentes también pueden adquirir información de tarjetas robadas en foros y mercados clandestinos de la dark web.
¿Cómo protegerse del carding?
Para evitar ser víctima del carding, es fundamental seguir algunas recomendaciones de seguridad:
- Mantén actualizado tu software antivirus y firewall.
- No abras correos electrónicos o enlaces sospechosos.
- Verifica siempre la URL de las páginas web donde introduces tus datos financieros.
- Utiliza contraseñas robustas y cámbialas periódicamente.
- Activa las notificaciones de tu banco para recibir alertas de movimientos sospechosos.
- No proporciones información sensible por teléfono o correo electrónico.
¿Qué hacer si has sido víctima de carding?
Si sospechas que has sido víctima de carding, es crucial actuar de inmediato:
- Contacta con tu banco o entidad emisora de la tarjeta para bloquearla y reportar los cargos no autorizados.
- Presenta una denuncia ante las autoridades competentes.
- Revisa minuciosamente tus estados de cuenta y reporta cualquier transacción sospechosa.
- Considera la posibilidad de contratar un seguro contra fraudes.
El carding es una amenaza real y creciente en el mundo digital. Mantenerse informado, aplicar medidas de seguridad y actuar con rapidez ante cualquier indicio de fraude son claves para proteger nuestras finanzas y nuestra tranquilidad. No permitas que los delincuentes se salgan con la suya; toma el control de tu seguridad online y blinda tus tarjetas contra el carding.