InicioAnimales

Ejemplos de
Competencia en animales

En biología, se conoce como competencia a la relación de rivalidad y antagonismo que surge entre dos individuos de la misma especie (competencia intraespecífica) o de especies distintas (competencia interespecífica) por los recursos disponibles en el ecosistema. Este tipo de relación es lo opuesto a la cooperación biológica.

La competencia se produce cuando los recursos disponibles no son lo suficientemente abundantes para suplir a todos los individuos. Estos recursos pueden ser elementos básicos como el alimento y el agua, o bien, la disponibilidad de parejas viables para el apareamiento, o el control territorial. Y, por lo tanto, puede darse entre dos o más individuos, e incluso entre grupos, poblaciones y especies enteras.

La competencia fue un elemento importante en las consideraciones sobre la evolución que tuvo Charles Darwin y que se elaboraron a partir de sus estudios sobre el origen de las especies. La lucha por la supervivencia y la reproducción son, desde este punto de vista, el motor de la evolución, a medida que las especies compiten entre sí por adaptarse mejor a los cambios del entorno y también a las propias adaptaciones de sus competidores.

Se llama competencia intraespecífica a la que se da entre miembros de una misma especie, y competencia interespecífica a aquella que se da entre animales de distintas especies.

Ejemplos de competencia entre animales

Ejemplos de competencia intraespecífica:

  1. Los leones son animales muy territoriales, que controlan la cacería en sus alrededores. Cuando algún león se sale de su territorio e invade el de otro, se da la ocasión para una pelea o al menos una intimidación, en la que el defensor debe expulsar al otro y obligarlo a buscar un terreno propio.
  2. Los machos de distintas especies de herbívoros astados, como los renos, venados y alces, compiten entre sí por el acceso a las hembras, estrellando una y otra vez sus cornamentas hasta que alguno de los dos se impone al otro mediante la fuerza bruta. El ganador entonces puede aparearse con la hembra.
  3. Los macacos suelen controlar el alimento disponible para la manada: los individuos con mayor jerarquía tienen más acceso a la comida que los que ocupan los peldaños más bajos. Así, los monos dominantes son más fuertes y grandes que los demás.
  4. Muchas especies de pájaros compiten entre sí por la atención de la hembra en las épocas de apareamiento, mediante el canto y la belleza de su plumaje, haciendo danzas y vuelos vistosos para convencer a la hembra de que los escoja como el mejor candidato para aparearse.

Ejemplos de competencia interespecífica:

  1. En las ciudades, las palomas suelen competir con otras especies de aves silvestres por el acceso a la comida. Especialmente en las plazas y lugares abiertos donde abundan las migajas y restos de comida humana, podemos presenciar la lucha por adueñarse de algún pedazo de pan que hay entre los miembros de ambas especies.
  2. Los leones y las hienas en la sabana africana suelen cazar roedores y otras especies de herbívoros de menor tamaño, de modo que existe una competencia entre ambas especies por las presas disponibles.
  3. Durante el caluroso verano africano, los grandes herbívoros suelen competir por el control de las pequeñas pozas y lagunas naturales, que intentan ocupar en su totalidad para impedir que otras especies se bañen y beban el agua. Este tipo de competencia ocurre entre los elefantes, los jabalíes, los rinocerontes, etc.
  4. La introducción de una especie invasora como fueron los conejos en el ecosistema australiano, llegados allí en el siglo XIX por mano europea, produjo una competencia feroz con las especies de roedores locales, ya que los conejos, al no tener depredadores naturales, se reprodujeron sin control y coparon las fuentes de alimento disponibles.

Sigue con:

Referencias