Estado plasmático
Te explicamos qué es el estado plasmático y algunas de sus propiedades. Además, los tipos de plasma que existen y ejemplos.
¿Qué es el estado plasmático o plasma?
Se llama “plasma” a un estado de agregación de la materia que puede comprenderse como un gas ionizado, es decir, compuesto por átomos a los que les han retirado o sumado electrones y, por ende, tienen una carga eléctrica fija (aniones (-) y cationes (+)). Esto convierte al plasma en un excelente transmisor de la electricidad.
Por otra parte, las partículas plasmáticas interactúan muy fuertemente con los campos electromagnéticos. Debido a que el plasma tiene características propias (que no se corresponden con los sólidos, gases, ni líquidos), se dice que es el cuarto estado de la materia.
El plasma no es un estado frecuente en la cotidianidad. Puede obtenerse mediante un proceso de ionización de los gases (tan simple a veces como calentarlos para hacer que sus partículas vibren más velozmente). También se puede obtener por magnetización o por aplicación de electricidad, además de otros procesos artificiales.
Se puede hacer a un plasma retornar a un estado gaseoso mediante un proceso cualquiera de desionización, por ejemplo, retirar calor a la sustancia y permitir a sus partículas recuperar así sus electrones perdidos o ganados, dando estabilidad y volviendo a ser un gas desionizado.
Existen dos tipos de plasmas:
- Plasma frío. Es el plasma en el cual la temperatura de los electrones es superior a la de las partículas más pesadas, como los iones. Este tipo de plasma es el menos dañino para los seres vivos, pues no causa quemaduras.
- Plasma caliente. Es el plasma cuyos átomos ionizados se calientan enormemente debido a que están chocando continuamente, lo que genera luz y calor y, por lo tanto, podría ser peligroso para los seres vivos.
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Ejemplos de estado plasmático o plasma
Algunos ejemplos de materia en estado plasmático son:
- El Sol. El astro rey es una gran bola de gases en perpetua reacción. Sus reacciones son muy violentas y su gravedad atrae a sus partículas hacia su centro, donde se comprimen y alcanzan el estado plasmático.
- El fuego. Es un conjunto de partículas incandescentes de carácter combustible, es decir, que emiten luz y calor durante una reacción de oxidación violenta. El fuego es considerado un plasma caliente.
- Lámparas de plasma. Las llamadas “bolas de plasma” o “esferas de plasma” son artefactos decorativos o lúdicos inventados por Nikola Tesla en sus experimentos con electricidad de alta frecuencia. Se logra con una mezcla de gases a baja presión en un recipiente transparente, a la que se inyecta electricidad de alta frecuencia y alto voltaje, logrando un campo eléctrico.
- Luces de neón. Las lámparas o bombillas de neón emplean este elemento (un gas noble (Ne)) para lograr un plasma brillante y frío, que es bastante seguro, poco reactivo (ya que se trata de neón) y muy funcional.
- Los relámpagos. Veloces y muy calientes (29.000 ºC), los relámpagos son formas de plasma que surgen en la atmósfera, cuando los gases en ella están cargados eléctricamente durante el ciclo hidrológico y generan así una descompensación del campo electromagnético, que a través de una descarga violenta intenta restituir el balance.
Referencias
- «El Plasma» en Nasa.gov.