Corriente continua
Te explicamos qué es la corriente continua y cómo funciona. Además, la diferencia entre corriente continua y corriente alterna.
¿Qué es la corriente continua?
Se denomina corriente continua (CC) o corriente directa (CD) a un tipo de corriente eléctrica, esto es, al flujo de una carga eléctrica a través de un material conductor, debido al desplazamiento de una cantidad determinada de electrones a lo largo de su estructura molecular. En el caso de la corriente continua, dicho flujo de electrones se caracteriza por tener siempre un mismo sentido de circulación.
Dicho en otras palabras, la corriente directa implica el tránsito continuo de una carga eléctrica entre dos puntos del conductor que tienen diferente potencial y carga eléctricos, de manera tal que nunca cambia con el tiempo.
Esto se refiere sobre todo a la polaridad de la carga, no a su intensidad: una fuente eléctrica que se agota (como una batería con poca carga) sigue siendo continua si no varía la dirección del flujo eléctrico: siempre del polo positivo al negativo (asignados por convención).
Todo circuito eléctrico tiene dichos polos (positivo y negativo) y suele distinguirlos mediante colores (rojo y negro, respectivamente), para impedir que la fuente eléctrica se introduzca al revés y haya una inversión en la polaridad, lo cual dañaría el circuito.
Por eso las baterías de un aparato deben ir en el orden polar correcto para que funcione, pues existe un transformador-rectificador que impide el flujo eléctrico invertido.
En términos físicos (teóricos), la tensión de una corriente continua se representa sobre un eje x/y (voltaje sobre tiempo), como una línea recta y sin variaciones de ningún tipo.
Ver además: Circuito en paralelo
Diferencia entre corriente continua y corriente alterna
A diferencia de la corriente continua, que presenta una misma dirección polar en su flujo de energía, la corriente alterna (CA) se caracteriza por una variación regular y cíclica de su magnitud y sentido en el tiempo.
Este es el tipo de corriente que generalmente llega a los hogares y es empleado para diversas funciones domésticas, ya que es mucho más fácil de transformar que la corriente continua, empleando transformadores que permiten elevar la tensión eléctrica de manera eficiente.
La corriente continua puede transformarse en corriente alterna empleando un inversor de corriente: que logra cambiar un tipo de electricidad por otro empleando una serie de transformadores, en varios niveles de voltaje y frecuencia.
Más en: Corriente alterna