Psicología

Conductismo: qué es, historia, características, representantes


¿Qué es el conductismo?

El conductismo es una de las principales corrientes de la psicología en el siglo XX, junto con el Psicoanálisis, la Gestalt y el Cognitivismo, entre otras.

De acuerdo con el conductismo, la psicología debe enfocarse solo en el estudio de los fenómenos objetivamente observables y medibles en el individuo. Es decir, la conducta: la expresión a través del cuerpo y del lenguaje.

El conductismo afirma que los sentimientos, las motivaciones o la consciencia son fenómenos de los que no se puede obtener ningún conocimiento propiamente científico, puesto que no pueden ser observados ni sometidos a experimentación.

Características del conductismo

1- Aplica al comportamiento humano los métodos de las ciencias naturales.

2- Limita el campo de estudio de la psicología a las conductas observables y susceptibles de ser sometidas a experimentación.

3- No niega tajantemente la existencia de las emociones, sentimientos, motivaciones y otros fenómenos del mundo interior de los individuos; simplemente los excluye de la investigación científica.

4- Para el conductismo, el conocimiento en psicología consiste, en primer lugar, en la identificación de los factores objetivos que participan en la actividad psicológica del individuo; y en segundo, en la explicación de cómo estos factores afectan la conducta.

Historia del conductismo

A grandes rasgos, puede dividirse en tres etapas:

El nacimiento

Se considera que el conductismo nació en 1913, con la publicación del artículo La psicología como lo ve el conductista, firmado por el psicólogo estadounidense John Watson.

En ese texto Watson exponía los principios de la nueva filosofía psicológica: el rechazo radical a lo subjetivo, a la idea de la mente y los procesos mentales, y a la introspección. La meta de Watson era que la psicología fuera reconocida como una de las ciencias naturales.

Durante esta etapa el conductismo también recibió importantes aportaciones del fisiólogo ruso Iván Pavlov y del psicólogo estadounidense Edward Thorndike.

El desarrollo

Para los años 30 del siglo XX el conductismo ya había seducido a algunas de las grandes mentes científicas de la época.

Comenzó entonces el desarrollo de las grandes teorías conductistas, la más importante de las cuales fue el conductismo radical de B.F. Skinner.

Este psicólogo estadounidense se propuso llevar a sus últimas consecuencias las posturas de Watson, lo que le llevó a afirmar que la consciencia y la libertad son solo ilusiones, puesto que la conducta de los seres humanos se basa exclusivamente en respuestas a estímulos del mundo físico.

Crisis

Desde mediados de la década de los 50, el conductismo empezó a recibir serios cuestionamientos desde dos frentes: el interno y el externo.

A lo interno se pensaba que el conductismo no había seguido con suficiente rigurosidad la metodología objetiva en la que afirmaba basarse, por lo que los resultados de sus investigaciones eran defectuosos.

Desde el frente externo se percibía al conductismo cada vez más como una filosofía intransigente, aferrada a sus propios límites, incapaz de reconocer su insuficiencia para comprender plenamente la psicología humana, de la que los sentimientos y los procesos mentales constituían una realidad cierta.

Actualidad

Entre los aportes de los psicólogos conductistas, especialmente los de Skinner siguen siendo de actualidad para la psicología contemporánea.

El resto de los autores tienen mayor valor como parte de la historia de la psicología que por la vigencia de su pensamiento.

Principales representantes del conductismo

John B. Watson (1878-1958)

Considerado el fundador del conductismo. Desde su cátedra en la Universidad John Hopkins, de Baltimore, Watson estableció las bases de la filosofía conductista, a la que bautizó “objetivismo antimentalista”.

Esta consistía en limitar el campo de estudio de la psicología a los eventos cuantitativos y observables de los individuos, es decir, la conducta y los procesos fisiológicos, los cuales podían estudiarse mediante experimentos de laboratorio.

Burrhus Frederick Skinner (1904-1990)

Llevó aún más lejos la filosofía de Watson, afirmando que la conducta humana se explica solo como un conjunto de asociaciones aprendidas entre estímulos y respuestas, sin que intervenga ningún tipo de procesos mentales o afectivos.

A este punto de vista extremo se le conoce como “conductismo radical”.

Skinner también introdujo en la psicología los conceptos de refuerzo positivo y negativo, aún vigentes. Un refuerzo positivo es un premio (que puede ser material, pero también un gesto de aprobación o un elogio) a una conducta que se quiere promover en el individuo; el refuerzo negativo es la ausencia de premio cuando se manifiestan conductas indeseadas.

Iván Petrovich Pavlov (1849-1936)

Es uno de los precursores del conductismo. El fisiólogo de origen ruso fue uno de los primeros en llevar a cabo una serie sistemática de experimentos con el fin de comprender cómo aprenden los animales.

Resultado de estos fue el concepto de reflejo condicionado, por el cual es recordado. Un reflejo condicionado es una respuesta refleja a un determinado estímulo, aprendida por la coincidencia reiterada de ese estímulo con un refuerzo positivo o negativo.

Por ejemplo, un perro que al escuchar el sonido de una campana comienza a salivar, pues después de muchas repeticiones ha aprendido que al sonar la campana se le alimenta.

Edward Lee Thorndike (1874-1949)

Otro importante precursor del conductismo. A partir de sus experimentos con gatos, Thorndike formuló la ley del efecto, la cual afirma que las conductas que tienen un resultado satisfactorio tienen mayor probabilidad de ser repetidas en comparación con aquellas que no lo tienen.

También formuló la ley del ejercicio, de acuerdo a la cual los hábitos y aprendizajes que no son reforzados se debilitan y desaparecen, mientras que los que sí lo son pasan a formar parte de la conducta del individuo.

El conductismo en la educación

Cuando los principios del conductismo se aplican a la pedagogía, el proceso educativo adquiere las siguientes características:

1.- El aprendizaje está centrado en el profesor, quien se presenta como modelo de conducta para el alumno y establece los objetivos del aprendizaje.

2.- Se emplea el premio y el castigo para reforzar las conductas deseadas y desmotivar las indeseadas.

3- Se utiliza la memorización de contenidos como técnica de aprendizaje.

4- Lo más importante es que el estudiante alcance los objetivos de aprendizaje establecidos y lo demuestre por medio de evaluaciones. El conductismo toma muy poco en cuenta el proceso interno del estudiante durante el aprendizaje.

Conductismo radical

El conductismo radical, como ya vimos, fue una escuela de psicología creada por Skinner. Parte de la premisa de que la mente y sus procesos no son objetivables y, por lo tanto, no se pueden estudiar de una forma científica.

Para esta escuela, el correlato visible es la conducta que el ser humano lleva a cabo ante los estímulos que se le presentan. En tal sentido, el comportamiento adquiere un carácter mecanicista y el sujeto responderá de una determinada manera a las propiedades de los estímulos a los que sea sometido.

Esto hace al ser humano un ser reactivo y pasivo ante tales estímulos. Considera que la conducta siempre se debe a causas externas.

Referencias

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  4. Cuadra Bueno, R. (2014). El conductismo y lo mental: una historia y un marco conceptual. Tomado de revistacultura.com.pe.
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  6. Torres, A. (s/f). Conductismo: historia, conceptos y autores principales. Tomado de psicologiaymente.com.
  7. Yela, M. (1996). La evolución del conductismo. Tomado de psicothema.com.