Metamorfopsia
La metamorfopsia es una distorsión visual que altera la percepción de los objetos en el campo visual. Esta afección es causada por una alteración en la mácula debido a un desplazamiento relativo de los fotorreceptores maculares.
El individuo que padece metamorfopsia percibe el tamaño y la forma de los objetos de forma irregular. Habitualmente, la percepción provocada por esta alteración se caracteriza por la visualización de las líneas rectas en formas curvadas u onduladas.
Esta afección visual afecta tanto a los objetos animados como a los objetos inanimados, por lo que el sujeto con metamorfopsia percibe todas las líneas de forma irregular.
La metamorfopsia es pues un trastorno grave, que altera notablemente la percepción visual de todos los elementos. Para su tratamiento, resulta indispensable detectar la causa de la inflamación macular que provoca la alteración, la cual puede variar en cada caso.
Características
La metamorfopsia es una alteración que provoca la distorsión de la imagen. Concretamente, se trata de una afección que hace que las líneas rectas sean percibidas como onduladas; también puede originar una distorsión en la percepción de la forma y el tamaño de los objetos.
Por otro lado, es importante tener en cuenta que dicha alteración no se limita a la percepción de objetos específicos. La metamorfopsia altera la percepción de todo tipo de objetos, así como de las siluetas y la apariencia de las propias personas.
Así pues, esta afección altera por completo la percepción visual de la persona, dándose dificultades para estimar el tamaño de los objetos visuales y percibiéndose las líneas rectas como onduladas.
La metamorfopsia resulta un síntoma típico en las afecciones de coroides, así como en delirios febriles y la epilepsia. En todos estos casos, la alteración es originada por el desplazamiento relativo de los fotorreceptores maculares.
Causas
La metamorfopsia es un síntoma muy habitual de las enfermedades del centro de la retina. La alteración puede afectar tanto a un ojo como a los dos.
En el primer caso, suele ser común que la persona tarde en darse cuenta de que su visión está distorsionada, ya que el cerebro tiende a corregir la distorsión a través de la visión del ojo sano.
Cuando son los dos ojos los que se encuentran afectados, se habla de metamorfopsia bilateral y la distorsión suele aparecer primero en un ojo y después en otro. En estos casos, los individuos también pueden tardar en darse cuenta.
A pesar de que todos los casos de metamorfopsia están causados por el desplazamiento relativo de los fotorreceptores maculares, las causas y las patologías que pueden originarla son muy variadas y pueden resultar distintas en cada caso.
En este sentido, las patologías que han mostrado una mayor relación con la metamorfopsia son las siguientes.
Degeneración macular relacionada con la edad
La degeneración macular es la principal enfermedad que conlleva la aparición de un distorsión de la percepción visual. Se trata de una patología que produce una disminución de visión al afectar a la zona central de la retina.
Esta alteración resulta especialmente prevalente entre la población anciana, ya que es una enfermedad que en muchos casos aparece con el envejecimiento de las regiones oculares.
Edema macular diabético
Algunos grados de retinopatía diabética pueden causar inflamación del área central de la retina y provocar edema macular.
Este tipo de inflamaciones, aunque no provocan metamorfopsia en todos los casos, suelen originar este tipo de alteración.
Obstrucción de vasos sanguíneos de la retina
Algunos tipos de infarto de retina pueden dañar el centro de la retina, inflamar su área central y originar metamorfopsia.
Membrana epirretiniana
La membrana epirretiniana es una afección que provoca una tracción de la retina vertical y tangencialmente. Esta alteración puede provoca un edema de mácula y originar metamorfopsia.
Tracción vitreorretiniana
La tracción vitreorretiniana provoca una separación del vitreo y la retina, hecho que puede provocar una tracción vertical y causar edema de retina que conlleva a la visión con metamorfopsia.
Uveítis
La uveítis es un cuadro inflamatorio del polo posterior del ojo. Aunque no resulta habitual, en algunos casos puede provocar edema de retina y metamorfopsia.
Coriodopatia serosa central
Esta patología provoca la acumulación de líquido por debajo de la retina, es decir, la parte posterior del ojo interno que envía información de la vista al cerebro.
El líquido se filtra desde la capa de vasos sanguíneos que se encuentra por debajo de la retina y puede provocar metamorfopsia.
Tumores en el área macular
No todos los tumores localizados en el área macular provocan metamorfopsia. No obstante, dependiendo de la alteración que originen en el funcionamiento del ojo puede provocar dicha manifestación.
Distrofias maculares
Las distrofias maculares abarcan un grupo de degeneraciones progresivas de retina que afectan el área macular. Con el paso del tiempo, estas patologías pueden acabar provocando metamorfopsia.
Traumatismos
Los traumas contusos oculares en ocasiones pueden inflamar la mácula, provocando así metamorfopsia.
Post-operatorio de catarata
La metamorfopsia resulta una alteración muy poco común de las operaciones de cataratas. Sin embargo, algunas intervenciones quirúrgicas complicadas pueden cursar con edema macular quístico y provocar la distorsión perceptiva.
Alta miopía
La alta miopía puede provocar, en algunos casos, rupturas de la coroides. En estos casos, la mácula suele padecer una notable inflamación que puede acabar originando metamorfopsia.
Otras causas no oculares
Finalmente, afecciones no oculares también puede alterar de forma indirecta el funcionamiento de la mácula y provocar metamorfopsia. Las más prevalentes son la migraña y la epilepsia.
Tratamiento
La metamorfopsia es un síntoma, no una patología, por lo que su tratamiento depende de la enfermedad subyacente. En la mayoría de casos se debe aplicar tratamiento neurológico o tratamiento mediante fármacos, mientras que en algunas ocasiones es necesaria la intervención quirúrgica.
Cuando la metamorfopsia es originada por algún proceso de degeneración de la retina, esta suele resultar irreversible.
Referencias
- García Sánchez J, García Feijoo, J; Urgencias Oftalmologia; Tratado de Emergencias Médicas, 2000, Aran Ediciones S.A, 1745-1776.
- Kans, JL. Oftalmología clínica, Barcelona, ediciones Doyma SA.1995.