Lengua y literatura

Solecismo: concepto, tipos y ejemplos


¿Qué es un solecismo?

Un solecismo es un error en la manera de comunicarse que se manifiesta al escribir o pronunciar una frase de manera desordenada. Es decir, quien emite el mensaje lo hace de forma incoherente, lo que dificulta que pueda ser entendido.

El solecismo también se conoce como “anacoluto”. Para definirlo de la manera más corta, se puede decir que es un error de sintaxis. Todo aquel que escribe de forma ilógica una frase cae en un solecismo.

A este error se le considera un vicio lingüístico. Los hay muy evidentes, como los de número. Por ejemplo: “Yo estábamos en el parque”, muy común en niños pequeños. No obstante, también los hay muy disimulados en el hablar cotidiano. Tal es el caso de: “Te amaré por siempre”, cuando lo correcto es “Te amaré para siempre”.

A continuación, se presentan los tipos de solecismos y una serie de ejemplos.

Tipos de solecismo y ejemplos

Existen exactamente tres tipos de solecismos. Estos son:

Solecismo de concordancia

Estos solecismos están relacionados con los errores de género, persona, tiempo y número. La falta suele darse porque las palabras que deben relacionarse no están una al lado de la otra, sino que tienen un vocablo de por medio.

  • Discordancia de número

En este caso se entrecruza un plural con un singular al momento de hablar o escribir. Suelen darse regularmente en el habla coloquial de los pueblos. Incluso, algunos ya forman parte de ciertos dialectos. Unos casos muy comunes son:

– “Hacen muchos días que pasó”. Cuando lo correcto es: “Hace muchos días que pasó”.

– “Hubieron muchos niños”. Cuando lo correcto es: “Hubo muchos niños”.

– “Las gentes comían”. Cuando lo correcto es: “La gente comía”.

– “Amo tus zapato”. Cuando lo correcto es: “Amo tus zapatos”.

  • Discordancia de género

En el caso del error de género, se da cuando se asigna el masculino o el femenino de manera equivocada en una frase. Es muy común en niños pequeños o en personas que están aprendiendo a hablar el español.

Ejemplos:

– “Esa casa está bonito”. Forma correcta: “Esa casa está bonita”.

– “Le duele el espalda”. Forma correcta: “Le duele la espalda”.

“Jirafas y perros viejas”. Forma correcta: “Jirafas y perros viejos”.

  • De tiempo

Este tipo de solecismo se da cuando no hay concordancia lógica de tiempo en lo que la persona expresa. Y sí, también es común en niños de 3 a 4 años.

Ejemplos

– “Mañana fui a la escuela”. Forma correcta: “Mañana iré a la escuela”.

– “Ayer iré al parque”. Forma correcta: “Ayer fui al parque” u “Hoy iré al parque”.

De persona

No son comunes, pero suelen darse. Este tipo de solecismos se caracterizan porque se les asigna a las personas gramaticales una conjugación errada del verbo.

Ejemplos

– “Ella quiero chocolate”. Forma correcta: “Yo quiero…” o “Ella quiere”.

– “Nosotros iba al partido”. Forma correcta: “Nosotros íbamos al partido”.

Solecismo preposicional

Tal y como su nombre lo indica, este tipo de solecismos hace referencia a los errores en la colocación de preposiciones en una frase. Se puede decir que están entre los errores más comunes durante la comunicación.

Ejemplos

– “Quería agradecerte de venir”. Forma correcta: “Quería agradecerte por venir”.

– “En base a esto”. Forma correcta: “Con base en esto”.

Solecismo de construcción

Se trata del tipo de solecismo en el que se cambia el orden lógico de las oraciones al pronunciarlas o escribirlas. Se pueden encontrar de las siguientes maneras:

  • De la preposición

Se cambia el lugar correcto que debe ocupar la preposición. El error más común es que la preposición se coloque entre el verbo y el complemento directo (C. D.), cuando estos deberían ir juntos.

Ejemplo

– Beberé del café que me compraste. (Incorrecta). En este caso, la preposición “del” separa al verbo (beberé) del complemento directo (café).

Lo correcto debería ser:

– Beberé café del que me compraste.

  • Del pronombre

Tal y como se piensa, se trata del cambio de ubicación del pronombre en una oración. Este se da en personas con muy bajo grado de formación, o en niños muy pequeños.

Ejemplo

– Te se escapó el perro.

Lo correcto sería:

– Se te escapó el perro.

  • Separación de una forma verbal compuesta

Como lo indica su nombre, se da cuando el orden lógico de una conjugación verbal compuesta se rompe.

Ejemplo

– He estado desde hace dos días caminando a Colombia.

En este caso, la conjugación verbal compuesta es “He estado caminando”. Por lo tanto, lo correcto sería decir o escribir:

– He estado caminado desde hace dos días a Colombia.

  • Separación de un complemento directo (C. D.)

Se da cuando un C. D. se corta por acción de otro elemento de la oración. Este error es más común de lo que se cree.

Ejemplo

– Estoy preparando la sopa a mis hijos de caracol.

En este caso, el C. D. es “la sopa de caracol”. Lo correcto sería:

– Estoy preparando la sopade caracol a mis hijos.

  • Hacer una pregunta negativa

Se da cuando se agrega la negación a una pregunta generando con ello confusión. Es más común de lo que se piensa.

Ejemplo

– “¿No cantarás?”. Si se responde positivamente (“sí”), se da a entender que no se cantará. Entonces se presentaría algo así como “Sí, no cantaré”.

Lo correcto es escribir o decir:

– “¿Cantarás?”.

  • Hacer una pregunta positiva

Es lo mismo que el punto anterior, solo que se añade una afirmación a la pregunta. En español, las preguntas se deben realizar en el siguiente orden: verbo + sujeto + C. D. Sin embargo, hay quienes la elaboran así: sujeto + verbo+ C. D., y he allí la confusión.

Ejemplo

– ¿Ustedes trajeron su comida? (S+V+C. D.). Incorrecto, pues en una entonación errada se puede asumir que es una afirmación, no una pregunta.

Lo correcto sería:

– ¿Trajeron ustedes su comida?

Con esto no hay cabida a equivocaciones.

  • Comenzar una oración con un infinitivo  

Tal y como el enunciado lo indica, sucede cuando se abusa del uso de infinitivos al inicio de una oración.

Ejemplo

– Finalmente, indicar que la cena estuvo buena.

Lo correcto es agregar un sujeto para completar de forma ideal la oración. Debería ser de la siguiente manera:

– Debo, finalmente, indicar que la cena estuvo buena.

  • Unir dos artículos

Se puede decir que este error es uno de los más recurrentes hoy por hoy en los medios de comunicación. Y sí, se da al unir de manera innecesaria dos artículos.

Ejemplo

– Las y los diputados pueden salir de la sala.

Lo correcto debería ser:

– Las diputadas y los diputados pueden salir de la sala.

Referencias

  1. (2020). España: Wikipedia. Recuperado de: es.wikipedia.org.
  2. Goti, A. (S. f.). Solecismo: Existen tres tipos. (N/A): Academia. Recuperado de: academia.edu.
  3. (2019). México: Vicios del lenguaje. Recuperado de: viciosdelenguaje-eld201d.blogspot.com.
  4. García Ordoñez, E. (S/f.). Uso correcto de los elementos de la Oración. Vicios del Lenguaje. México: Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo. Recuperado de: uaeh.edu.mx.
  5. Negrete Orozco, M. (2018). Solecismo. México: Cápsulas ortográficas-11. Recuperado de: iingen.unam.mx.