Psicología educativa

¿Qué son las zonas de riesgo en la escuela?


Las zonas de riesgo en la escuela son aquellas zonas de los colegios que implican peligro físico (en escaleras, cantinas, parques, entre otros espacios) y peligro emocional (por ejemplo, en los baños o en las zonas de recreo). Entender la función y dinámica escolar es básico para comprender cada riesgo en la escuela.

Pensar en esta como el lugar donde los niños y jóvenes tienen la oportunidad de desarrollarse intelectual, emocional, social y hasta físicamente, es saber que ello conlleva riesgos dado que el desarrollo implica salir de la zona conocida, en términos literales y figurativos.

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Según Uriarte Arciniega, investigador educativo, la escuela debe servir para que las personas se preparen desde niños para ser adultos, con capacidad de integrarse y participar en la sociedad activamente y con competencias suficientes como para afrontar de manera efectiva y resiliente las dificultades que puedan surgir en diferentes ámbitos.

A pesar de que haya supervisión constante por parte de los maestros y otros adultos cuidadores y/o significativos, en la dinámica de la escuela se espera que los niños empiecen desde muy pequeños a desarrollar autonomía, que ya tiene sus primeros ensayos desde que los padres los dejan hasta volver a buscarlos al terminar la jornada.

La escuela debe concebirse como el lugar donde el niño puede desenvolverse cada vez con mayor libertad, aprendiendo cómo comportarse en cada espacio y con cada persona. Así, debe ser distinta la conducta que se espera con su grupo de coetáneos, con adultos, con sus maestros, con el personal de la institución y con otros que hacen vida en esta.

Si bien la etapa escolar está caracterizada por momentos divertidos, agradables y alegres, no todas las facetas del crecimiento y desarrollo tienen solo el lado positivo. Como todo esfuerzo y ensayo de vida, hay riesgos y situaciones no tan protegidas que se dan durante la etapa escolar y que deben ser tomadas en cuenta.

Al pensar en riesgos se pueden establecer dos grandes categorías. Según el área de desarrollo que impacten, se clasifican en riesgo físico y en riesgo emocional-social.

Las 6 zonas de riesgo en la escuela más importantes

Riesgo físico en áreas de parques, escaleras y otros

Diversos estudios señalan que en la edad preescolar y los primeros años de escuela primaria los riesgos de accidentes mecánicos tienen un porcentaje de ocurrencia de 90 % aproximadamente; de estos, el 60% se genera por caídas.

Las áreas de parques, escaleras y muros de media altura, entre otros espacios, son de riesgo alto para los niños porque estas caídas pueden limitar el normal crecimiento y provocar daños físicos graves.

Los accidentes se han convertido en un problema de salud pública. Es importante tener claro que se deben tratar como se trata a las enfermedades porque tienen factores que los causan, se conocen las consecuencias, tienen tratamientos y se pueden prevenir.

Riesgo físico en el área de deportes

A medida que los niños van creciendo aumentan los riesgos de accidentes en áreas que se supone que tienen supervisión.

En este contexto, es válido considerar que es natural el margen de riesgo en el entrenamiento de deportes. Caídas y lesiones por movimientos inadecuados son lo más frecuente; el riesgo viene junto al proceso de aprendizaje de las disciplinas deportivas.

Riesgo físico en las cantinas escolares

Aunque no lo parezca, en las cantinas escolares se puede encontrar un factor de riesgo alimenticio importante debido a que muchas no cumplen con las regulaciones establecidas en la mayoría de los países con respecto a normas nutricionales.

Mantener esta situación bajo control depende de la regulación que haga la propia institución y la comunidad de padres y representantes, quienes tienen un papel fundamental en el control de estos procesos.

Es bien sabido que hoy en día los trastornos del metabolismo y de alimentación en general han aumentado considerablemente, por lo que velar porque los niños se alimenten bien va de la mano con buscar el buen desarrollo integral de los mismos. Obesidad y alergias alimentarias son lo que atañe mayormente a la población escolar actual.

Los hábitos alimentarios deben ser cuidadosamente supervisados, por lo que las regulaciones y recomendaciones nutricionales no deberían pasarse por alto.

El objetivo es promover el consumo ideal de azúcares y grasas, y el desarrollo de menús nutritivos y realmente elaborados con énfasis en que los alimentos utilizados sean específicamente escogidos, para prevenir el consumo inadecuado de estos por alguien.

Riesgo emocional-social en patios de recreo

El bullying o acoso escolar es uno de los mayores problemas y riesgos para la integridad de la persona. Es uno de los generadores más potentes de dificultades psicológicas, emocionales y sociales. Es por ello que se hacen cada vez más frecuentes las campañas para prevenirlo.

En este sentido se ha comprobado que las zonas de juego y patios de recreo son altamente frecuentes como escenario para la aparición del acoso, debido a que son los momentos naturales para que se presenten las agresiones entre pares.

Sin embargo, también esto tiene mayor frecuencia cuando coincide con el descanso de los maestros o cuando estos utilizan sus celulares en lugar de vigilar a los niños.

Riesgo emocional-social en el área de los baños

El área de los baños, a pesar de que pueda estar altamente concurrida en ciertas horas, también es la zona preferida por quienes actúan como agresores o intimidadores en la escuela debido a que son lugares en los que suele haber poca supervisión directa, por ser naturalmente un área de privacidad.

Es por ello que las instituciones deben ser cada vez más cuidadosas y enfrentar sus propios problemas, para así poder generar formas y estrategias de acompañamiento y prevención que sean efectivas.

Riesgo emocional-social en las redes sociales

Los agresores o quienes actúan como victimarios también suelen preferir aquellas zonas donde no se puede supervisar, acompañar y establecer una estrategia de ayuda a la víctima tan fácilmente.

Es por ello que la zona por excelencia más privada y en la que las regulaciones son menos efectivas corresponde a las redes sociales, que pueden considerarse una continuación de la dinámica que se establece en la escuela.

Se consideran de esta forma porque suele observarse que cuando se establece el acoso durante la jornada escolar, se extiende a las redes de manera natural y fácil. En este contexto también se hace más difícil su reducción o desaparición.

Referencias

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