Habilidades sociales

Personas proactivas: qué son, características y conductas


¿Qué son las personas proactivas?

Las personas proactivas son aquellas que prevén consecuencias, riesgos y oportunidades. Además, actúan para adelantarse y cambiar el curso previsto de los acontecimientos, y saben que la decisión última de cualquier cosa recae en sus manos.  

Es decir, no se conforman con esperar a que se produzcan los acontecimientos para actuar, sino que se responsabilizan de que las cosas sucedan.

Ejemplos de personas proactivas son las que contactan a posibles empleadores en lugar de esperar a que les llamen para trabajar, la que crea su negocio para generar sus propios ingresos o la que propone nuevas actividades a realizar en el instituto o universidad.

Generalmente, es preferible ser proactivo a reactivo, ya que no se espera a que algo malo ocurra para reaccionar. Se toman acciones para que sucedan cosas esperadas y se previene que ocurran efectos no deseados.

Características de las personas con personalidad proactiva

1. Buscan diferentes alternativas de actuación

Una de las características más brillantes de las personas proactivas es la capacidad que tienen de dar respuesta a situaciones complicadas o estresantes.

No pierden el tiempo pensando que no se puede hacer nada para solucionar ese problema, ni tampoco apoyan la idea de que solo tenga una posible solución.

2. Aceptan las críticas de forma constructiva

Las personas proactivas siempre están dispuestas a construir su conjunto de habilidades y a aprender de sus errores, por ello, se toman las críticas de una forma constructiva con el fin de mejorar tanto en su ámbito profesional como personal.

3. Utilizan un lenguaje positivo

Suelen utilizar un lenguaje que busca posibilidades, procura reenfoques, aporta posibilidades de acción, asume las propias preferencias y puntos de vista y se compromete con la construcción de la realidad.

Por ejemplo, hablan de “preferir” en lugar de “deber”, “elegir” en vez de “no se puede”.

4. Actitud de autocontrol

Son capaces de controlar sus emociones en situaciones estresantes, lo que les permite pensar de forma rápida una posible solución al problema que se les ha presentado.

Esto hace que, una vez más, las personas proactivas sean demandadas por las empresas en la actualidad por su alto nivel de resolución de problemas.

5. Son personas dinámicas

Las personas proactivas potencian ensayar conductas, experimentar situaciones novedosas y orientarse a la innovación.

Por ello, suelen afrontar problemas de forma exitosa e incluso anticipar las consecuencias negativas y los riegos que se pueden producir al experimentar situaciones nuevas.

6. Confían en sí mismos

Todas las características que hemos nombrado anteriormente hace que gocen de una buena autoestima y por ende, que tengan una confianza en sí mismos muy elevada.

Esto les permitirá ser dinámicos y participar de forma activa en todas las actividades que realicen, expresando sus ideas en todo momento.

7. Tienen grandes habilidades para solucionar problemas

Las personas proactivas no solo solucionan problemas, sino que exploran posibilidades. Desarrollan un optimismo consciente y realista que les facilita disfrutar con lo que hacen, buscar el éxito y proteger su autoestima.

8. Piensan a largo plazo

Están atentos a los detalles del mundo que les rodea. Si extrapolamos esto al trabajo que realizan, tendrán la habilidad de apreciar aquellos detalles que a otra persona le costaría mucho.

También tienen la capacidad de planificar con antelación el tiempo del que disponen para, si seguimos con el ejemplo del proyecto, elaborarlo y entregarlo. Esta suele ser una cualidad muy importante para un líder, ya que de esta forma, podrá darse cuenta del camino que su empresa va siguiendo y las metas a las que quiere llegar.

9. Son perseverantes

Suelen caracterizarse, además, por ser muy perseverantes. Tienen claro lo que quieren, por lo que se proponen aquellos objetivos que pretenden conseguir tanto a largo como a corto plazo.

No solo a nivel individual, sino también a nivel grupal, en el caso de que sea el líder de un grupo. Este rasgo va unido al que explicamos anteriormente, ya que el que piensen a largo plazo les facilita marcarse los objetivos que quieren conseguir, así como las tareas que tendrán que realizar para llegar a cumplirlos.

10. Alcanzan sus metas

El tener unos objetivos claros tanto a corto como a largo plazo, tal y como hemos señalado anteriormente, les permitirá autoajustar su tiempo y esfuerzo durante el período de tiempo que se han marcado para llegar hasta ellos.

Por ello, más tarde o más temprano, alcanzan sus metas porque no desisten en su lucha, creen en sus capacidades y gozan de buena autoestima para no decaer en el intento.

11. Son conscientes de sus fortalezas y debilidades

Por último, otro de los rasgos o características de las personas proactivas es que normalmente tienen la habilidad de ser conscientes de sus fortalezas y debilidades.

Esto en muchas ocasiones suele resultar bastante difícil a cualquier persona, ya que todos sabemos lo que hacemos bien o mal, pero nos cuesta admitir sobre todo lo segundo. Esto hará que sea capaz de saber lo que puede hacer o para lo que necesitará ayuda de las personas que tiene a su alrededor.

¿Qué conductas se derivan de la proactividad?

Las conductas que corresponden con personas conscientes y dueñas de sus actos, capaces de autogestionarse emocionalmente de forma adecuada, son las siguientes:

Disciplina

Las personas proactivas suelen ser persistentes en su trabajo, por lo que tienen disciplina y no les importa estar mucho tiempo trabajando en algún proyecto que tengan entre manos si así se requiere.

De esta conducta se pueden derivar muchas más que tienen que ver con el compromiso, las cuales normalmente las convierten en hábitos.

Asertividad

Dado que tienen una gran iniciativa, normalmente siempre serán los primeros en exponer sus ideas, así como acciones sobre algún determinado tema.

Por ello, es posible que se encuentren con personas que piensen diferente y tengan que defender su opinión, sin embargo, estos lo harán de forma asertiva y con respeto a la otra persona, no intentando imponer sus ideas.

Persuasión

Normalmente, mediante la persuasión se puede influir en las opiniones o decisiones que los demás tienen sobre un determinado tema.

Las personas proactivas, dado que son fieles a sus valores y a sus ideas, suelen ser percibidas como personas capaces de influir en los demás. Por ello, los líderes más exitosos suelen ser normalmente proactivos.

Iniciativa

La iniciativa es una conducta que también hemos resaltado anteriormente de las personas proactivas. En la mayoría de ocasiones se suele utilizar este término como sinónimo de proactividad en algunos artículos que analizan esta personalidad con respecto a las empresas.

Las personas proactivas se suelen anticipar a los acontecimientos y siempre están pensando en algo que pueden mejorar con respecto a lo que hacen o qué proyectos pueden realizar.

Conductas prosociales

Las personas proactivas suelen querer autorrealizarse y saben que es algo que si hacen solos, tal vez no lo consigan, por lo que independientemente del contexto en el que se muevan, siempre están dispuestos a ayudar a las personas que los acompañan en todo lo que necesiten.

Sensación de control

Por último, otra de las conductas que acompañan a estas personas es la sensación de control que transmiten y tienen como resultado de su gran autoestima y confianza en sí mismos.

Estas personas saben el potencial que poseen y además tienen un magnífico control interno que aumenta su confianza y les permite retroalimentarse.

¿En qué se diferencia la personalidad proactiva de la reactiva?

Una persona reactiva, a diferencia de la proactiva, se mueve por sus sensaciones y no suele controlar sus pensamientos.

Por ello, son personas muy dependientes que necesitan la aprobación de los demás, dado que carecen de criterios propios. También se caracterizan por tener miedo a no alcanzar el éxito o las metas que se proponen, todo lo contrario a lo que les pasa a las personas proactivas.

Además, se ven desbordadas por las situaciones que viven y más si no las pueden controlar o si son demasiado estresantes. Esto les hace que solo se centren en lo que no pueden hacer, siendo muy negativas consigo mismas y apreciando el exterior cambiante como una amenaza.

Por último, hay que resaltar que son personas que se quejan de todo en su día a día, ya que nunca están contentas con la vida que tienen.

Referencias

  1. Ares Parra, A. (S/F). La conducta proactiva como conducta estratégica.
  2. Moreu Jalon, P. N. (S/F). Reactive personality versus proactive personality.