Rafael Álvarez Ovalle: biografía y aportaciones principales
Rafael Álvarez Ovalle fue un compositor y músico nacido en Guatemala en 1858 cuyo principal obra fue la música del Himno Nacional de su país. Además, fue el autor de un gran número de valses, mazurcas y sones. En total, se considera que compuso unas 200 obras a lo largo de su vida.
Su padre, director de una escuela de música, fue quien introdujo a Álvarez Ovalle en el mundo de la música siendo aún muy joven. Su talento le llevó a que, además de componer, dominara un considerable número de instrumentos, como el piano, la flauta o la guitarra.
En 1887, Álvarez Ovalle ganó el primer concurso convocado por el departamento de Guatemala para componer el himno, aunque no fue reconocido oficialmente. Años después, en 1896, su música volvió a ser elegida como la más apropiada en una nueva convocatoria con el mismo motivo. El 14 de marzo de ese año, el himno nacional se presentó por primera vez en público.
El autor recibió una gran cantidad de premios y homenajes por parte del gobierno del país. Tras su fallecimiento, en diciembre de 1946, se decretó duelo nacional y las oficinas y escuelas públicas cerraron en su honor.
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Álvarez Ovalle nació el 24 de octubre de 1858 en San Juan Comalapa, Chimaltenango (Guatemala). Sus primeros estudios los realizó con el profesor Juan Alegria.
Su introducción en el mundo de la música le llegó a manos de su padre, Rosendo Álvarez, quien había sido maestro de la capilla del pueblo y después había sido nombrado director de la escuela de música de Santa Lucía Cotzumalguapa, en el departamento de Escuintla.
El joven Rafael realizó sus estudios musicales en la Antigua Escuela de Sustitutos. Antes siquiera de llegar a la adolescencia ya podía leer partituras y había adquirido un gran dominio del violín, la guitarra y el piano. En esa época ayudaba a su padre a dar clases y, en ocasiones, lo reemplazó.
El fallecimiento de su padre en 1874, cuando Rafael solo tenía 16 años, provocó que los sustituyera como director de la escuela de música de Santa Lucía.
En esta época, Álvarez Ovalle se casó con Anita Minera de García. Fruto de esta unión nacieron 8 hijos.
En 1879, Álvarez Ovalle se trasladó a Ciudad de Guatemala, la capital del país, con la intención de profundizar en sus estudios sobre música. Muy pronto ingresó en la Banda Marcial, dirigida en esos momentos por el maestro Emilio Dressner.
Dressner se dio cuenta del potencial que presentaba Álvarez Ovalle y, junto a otros jóvenes, se ofreció a darle algunas lecciones sobre armonía e instrumentación. La influencia del maestro fue fundamental para que Rafael enfocara su carrera hacia la composición.
Después de que Dressner debiera abandonar la banda Marcial y volver a su país natal, Alemania, Álvarez Ovalle continuó desarrollando su destreza militar. Además, daba clases a niños de instrumentación, composición y armonía.
Mientras, también comenzó a componer sus propias obras. Estas estaban inspiradas en la música clásica europea, especialmente en autores como Vivaldi, Chopin y Beethoven. El propio autor afirmó que su música alternaba lo clásico con los sonidos modernos y las melodías típicas de Guatemala.
En 1879, la Sociedad Literaria El Porvenir había intentado que el país se dotara de un himno, pero sin conseguirlo. Más tarde, en 1886, la jefatura del departamento de Guatemala convocó un concurso para seleccionar la música que debía acompañar a la letra del Himno Popular compuesto por el poeta Ramón P. Molina.
La partitura seleccionada fue la presentada por Rafael Álvarez Ovalle. Aunque su música acompañó durante un tiempo a la letra de Molina, el himno no fue oficializado.
Finalmente, el gobierno presidido por José María Reina Barrios convocó un nuevo concurso en 1896 para elegir la letra y la música para el himno de Guatemala.
El presidente del país declaró en esos momentos que:
“considerando que se carece en Guatemala de un Himno Nacional, pues el que hasta hoy se conoce con ese nombre, no sólo adolece de notables defectos, sino que no ha sido declarado oficialmente como tal; y que es conveniente dotar al país de un himno que por su letra y música responda a los elevados fines en que todo pueblo culto presta esta clase de composiciones”.
De nuevo, la composición elegida fue la presentada por Álvarez Ovalle. Este triunfo provocó descontento entre el resto de los participantes en el concurso, que llegaron a presentar una queja ante el presidente. Sin embargo, tras volver a escuchar todas las composiciones que competían, se confirmó por unanimidad la elección de la música compuesta por Álvarez Ovalle.
La declaración de la música de Ovalle como vencedora tuvo lugar el 19 de febrero de 1897. La letra elegida, por su parte, correspondía a un autor que se había presentado anónimamente. Solo en 1911 se supo que había sido escrita por José Joaquín Palma, un poeta cubano.
Los alumnos del Conservatorio Nacional, dirigidos por Álvarez Ovalle, cantaron por primera vez el himno nacional de Guatemala el 14 de marzo de 1897.
El compositor del himno también tuvo una actividad destacada en la organización de varios conjuntos musicales, como las primeras estudiantinas del país: La Broma y La Tuna.
Por otra parte, ejerció como maestro en el Conservatorio Nacional de Música, así como en otras escuelas públicas y privadas. Fue también el fundador de la Concertina Guatemalteca y de la orquesta femenina del Instituto Normal Central para Señoritas Belén.
Su labor fue reconocida por el gobierno del presidente Manuel Estrada Cabrera con un homenaje celebrado en el Teatro Colón el 15 de septiembre de 1911. Durante ese homenaje, el compositor fue condecorado.
Las autoridades de San Juan Comalapa le ofrecieron un homenaje masivo cuando cumplió 83 años, el 24 de octubre de 1941.
Rafael Álvarez Ovalle falleció el 26 de diciembre de 1946 en la Ciudad de Guatemala. El gobierno del país decretó duelo nacional y pagó los funerales. La bandera ondeó a media asta y los colegios y oficinas públicas cerraron en honor al fallecido.
El entierro tuvo lugar en el Cementerio General de la ciudad, pero en 1988 los restos de Álvarez Ovalle fueron trasladados a su localidad natal.
El compositor es reconocido por su difusión de la música típica de Guatemala. Igualmente, también destacó por la composición de valses y sones de gran importancia.
Álvarez Ovalle fue el fundador de varias orquestas en las que dio oportunidades a los músicos jóvenes del país. Su labor fue fundamental para difundir la formación musical en Guatemala.
– Himno Nacional de Guatemala.
– La tuna (pasodoble).
– O salutaris.
– Mis tataranietos.
– Marcha Fúnebre “El Nazareno”
- Kwei, Ivon. Biografía de Rafael Álvarez Ovalle. Obtenido de aprende.guatemala.com
- Biografías y Vidas. Rafael Álvarez Ovalle. Obtenido de biografiasyvidas.com
- Pueblo e Historia. Rafael Álvarez Ovalle. Obtenido de pueblo-historia.blogspot.com
- Wikipedia. National anthem of Guatemala. Obtenido de en.wikipedia.org
- Biografía de. Biografía de Rafael Álvarez Ovalle. Obtenido de biografiadee.com