Potomanía: qué es, síntomas, causas, consecuencias, tratamiento
¿Qué es la potomanía?
La potomanía, o polidipsia primaria, es un trastorno relacionado con la necesidad extrema de consumir líquido. Generalmente, está asociada al agua, pero también puede producir fuertes deseos de consumir otras sustancias, como cerveza o alcohol (y se llama dipsomanía).
La sed es vital para la salud, pues nos indica si estamos deshidratados. Sin embargo, con la potomanía, la persona puede llegar a ingerir hasta 15 litros de agua diarios. Esta conducta tiene consecuencias muy graves a largo plazo, pues rompe el equilibrio de líquidos y electrolitos en el organismo.
Las causas de este trastorno son muy diversas. Pueden ser factores físicos o psicológicos, pero la mayoría de las veces existe una combinación de ambos que provocan la potomanía.
Síntomas
– Ingesta compulsiva de grandes cantidades de agua: la persona puede llegar a beber hasta 15 litros al día en los casos más graves, eso puede provocar graves problemas físicos por el desbalance de líquidos en el cuerpo.
– Sed incontrolable: las personas a menudo dicen sentirse sedientas, incluso después de haber bebido grandes cantidades de agua. Esta sed puede estar provocada por causas físicas (como algún problema renal que les obligue a orinar en exceso), psicológicas, o una mezcla de ambas.
– Ansiedad: frecuentemente sienten altos niveles de estrés o ansiedad aguda cuando no pueden acceder a las cantidades de agua que desean. Cuando la potomanía es leve, la persona puede sentirse incómoda si no está cerca de una fuente de agua potable, pero cuando es grave, es posible que sufra ataques de pánico si no puede acceder rápidamente a este líquido.
– Hiponatremia: es la alteración en el equilibrio de los niveles de sodio y potasio en el cuerpo por el consumo excesivo de agua. Puede producir dolores de cabeza, calambres musculares, espasmos y dificultades para conciliar el sueño, asociados probablemente a bajos niveles de sodio en sangre.
– Cambios en el comportamiento habitual: estas personas tienden a alterar su rutina diaria para tratar de estar siempre cerca de una fuente de agua potable. En casos graves, pueden evitar lugares donde no haya acceso inmediato al líquido, como la playa, un parque o el centro de la ciudad.
Causas de la potomanía
La potomanía es un trastorno de la alimentación ligeramente distinto a los demás, en el sentido de que habitualmente está producido por una mezcla de causas físicas y psicológicas.
Enfermedades subyacentes
Existen muchas patologías físicas que pueden provocar una respuesta de sed excesiva en una persona. En los casos en los que una enfermedad sea la causa principal, estaríamos hablando de potomanía orgánica y no psicológica. El tratamiento, entonces, debería centrarse en solucionar el problema subyacente.
Algunas de las enfermedades más comunes que pueden provocar un caso de potomanía orgánica son ciertos tipos de diabetes, y los problemas renales crónicos.
Alteraciones en el hipotálamo
El hipotálamo es la parte del cerebro que se encarga de regular la respuesta de sed, entre otras muchas funciones. Diversos estudios con neuroimagen realizados en personas con potomanía muestran que existen ciertas diferencias anatómicas entre esta parte de su cerebro y la de una persona sana.
Estas alteraciones pueden producirse por causas genéticas (y estarían presentes desde el nacimiento), o como producto de algún tipo de daño cerebral, como en el caso de un ictus o de un traumatismo craneal.
Demencia y trastornos psicóticos
Muchos casos de potomanía están provocados, al menos en parte, por la presencia de ciertas enfermedades psicológicas graves.
Los individuos que padecen trastornos, como la esquizofrenia, la bipolaridad o ciertos tipos de demencia, tienen más probabilidades de sufrir de potomanía.
La relación entre estos tipos de trastornos no está demasiado clara, pero se cree que puede tener que ver con alteraciones en ciertas regiones cerebrales, implicadas en la aparición de todos ellos.
Trastornos dismórficos corporales
Pueden aparecer como consecuencia de otros trastornos psicológicos. Concretamente, los que alteran la percepción del propio cuerpo. El más conocido es la anorexia, pero existen otros que también pueden causar una ingesta excesiva de agua.
En el caso de la anorexia, la persona puede aumentar compulsivamente su consumo de líquido en un intento de llenarse sin tener que ingerir calorías. Esta conducta acabaría volviéndose adictiva, lo que a medio o largo plazo podría provocar la aparición del resto de los síntomas de la potomanía.
Otro de los trastornos dismórficos es la vigorexia (la obsesión por el ejercicio y los físicos muy musculados).
Las personas que padecen esta patología podrían desarrollar ciertas creencias irracionales sobre los beneficios del agua, que les llevarían a sufrir potomanía.
Aprendizaje por refuerzos y castigos
También es posible que la conducta de ingerir líquidos en exceso se haya aprendido mediante un proceso conductual. Beber agua es una acción reforzante y placentera, mientras que la sed es un “castigo” natural.
En los casos en los que la potomanía es principalmente conductual, la persona podría haber aprendido a evitar la sed a toda costa y a buscar el refuerzo de beber agua constantemente.
Si existía algún tipo de vulnerabilidad previa (como, por ejemplo, la presencia de una personalidad neurótica o un cuadro de ansiedad), la persona podría desarrollar episodios de potomanía al cabo de un tiempo.
Consecuencias
El principal problema de la potomanía es la alteración del equilibrio entre los niveles de sodio y potasio de su organismo.
Esto puede provocar desde molestias leves, como dolores de cabeza y calambres musculares, hasta consecuencias extremadamente graves.
Consecuencias leves
La persona puede experimentar lo siguiente:
– somnolencia y fatiga,
– dolores de cabeza,
– náuseas y calambres en los músculos.
Estas consecuencias tienden a desaparecer muy poco tiempo después de reducir la ingesta excesiva de agua.
Consecuencias medias
Las consecuencias medias pueden ser:
– disminución en algunas de sus capacidades psicológicas. Por ejemplo, al paciente le es más difícil de lo habitual concentrarse en una tarea, o mantener su atención centrada en una sola cosa.
– Puede sentir que está perdiendo parte de su agilidad mental. Esto estaría producido por niveles muy bajos de sodio en sangre. Los daños podrían llegar a ser muy difíciles de solucionar si el problema se mantiene durante mucho tiempo.
Consecuencias graves
Las consecuencias graves son:
– alteración de los niveles de sodio y potasio en sangre, que puede generar problemas muy serios, como dificultad para utilizar ciertos músculos, parálisis corporal o incluso el coma.
– En algunas ocasiones, se puede presentar un fallo multiorgánico que acabe produciendo la muerte de la persona. Por suerte, este desenlace es poco habitual.
Tratamientos
En función de cuáles sean las causas subyacentes a cada caso de potomanía, el tratamiento a aplicar será distinto.
Administración de suero
En los casos en los que haya hiponatremia, el primer paso consistirá en la administración de suero de forma intravenosa hasta que esta alteración haya sido corregida.
Este paso se lleva a cabo para evitar los peligros más graves para la salud y la vida del paciente, pero una vez que se hayan regulado los niveles de sodio y potasio, será necesario combatir las causas del problema para evitar que se vuelva a producir más adelante.
Terapia conductual
Una posible forma de combatir la potomanía es mediante el entrenamiento conductual.
Por medio de refuerzos y castigos, el paciente aprende a reducir la frecuencia con la que lleva a cabo su conducta problemática, a la vez que encuentra maneras alternativas de comportarse no dañinas.
Terapia cognitiva
Cuando la potomanía está causada principalmente por ciertas ideas irracionales relacionadas con la ingesta de líquido, una de las formas más efectivas de solucionar este trastorno es cambiar estos pensamientos por otros más adaptativos.
Generalmente, las técnicas de este estilo más utilizadas son la reestructuración cognitiva, el debate racional y la confrontación de creencias. Además, la terapia cognitiva suele utilizarse junto a técnicas de carácter más conductual.
Medicación
En algunos casos, la potomanía está producida por la alteración de ciertas áreas del cerebro, principalmente el hipotálamo.
En estos casos, la mejor solución es utilizar psicofármacos que ayuden a paliar sus efectos y a reducir los síntomas psicológicos más graves de este trastorno.
El uso de medicación también puede ser clave para tratar aquellos casos de potomanía provocados por la presencia de un trastorno médico de otro tipo, como por ejemplo, los problemas renales, la esquizofrenia o la diabetes.
En cualquier caso, aun cuando se utilice la medicación como forma principal de tratamiento, es habitual que se combine su uso con la aplicación de algún tipo de terapia psicológica.
Referencias
- Polydipsia (excessive thirst). Recuperado de healthline.com.
- Primary polydipsia. Recuperado de en.wikipedia.org.