Cultura general

Significado de cristianismo (qué es, concepto y definición)


¿Qué es el cristianismo?

El cristianismo es una religión monoteísta (cree en un solo y único dios) basada en la vida y las enseñanzas de Jesús de Nazaret. Surgió en el siglo I de nuestra era en Palestina. Con más de dos mil millones de creyentes, es la fe más extendida en la actualidad.

Las principales creencias del cristianismo están expuestas en el Nuevo Testamento, un conjunto de libros que incluyen la vida, enseñanzas y milagros de Jesús, la vida de sus apóstoles, las cartas que San Pablo envió a varias comunidades cristianas y el Apocalipsis.

Para los cristianos, Jesús es el verdadero mesías prometido por Dios al pueblo judío y mencionado en repetidas ocasiones por los profetas. La palabra mesías quiere decir el elegido de Dios, el ungido. En griego, mesías se dice cristo. Así, pues, para sus creyentes Jesús de Nazaret es el Cristo o Jesucristo.

El cristianismo se divide en tres ramas principales: el catolicismo, el evangelismo o protestantismo y la iglesia ortodoxa.

Origen del cristianismo

El cristianismo se origina con los milagros y las enseñanzas de Jesús. Él no nació en Nazaret, sino en el pueblo de Belén; pero sus padres vivían en la primera localidad y allí transcurrió la infancia y juventud de Jesús. Por eso se le conoce como “de Nazaret” o “el nazareno”.

Jesucristo murió crucificado por orden de Poncio Pilatos, gobernador romano de la provincia de Judea. De acuerdo con los evangelios, tres días después apareció ante sus apóstoles y otros seguidores para dar prueba de su inmortalidad y luego ascendió al cielo.

Los evangelios

Las enseñanzas, milagros y crucifixión de Jesús se narran en los evangelios, que son los cuatro primeros libros del Nuevo Testamento. Se identifican de acuerdo al nombre de su autor, así tenemos el evangelio de Mateo, el de Lucas, el de Marcos y el de Juan.

El evangelio de Mateo destaca por sus numerosas citas directas de Jesús; el de Lucas por los detalles de la anunciación a María y el nacimiento de Cristo; el de Marcos hace énfasis en los actos de Jesús, mientras que el de Juan es considerado el más hermoso.

Los evangelios fueron escritos con base en los recuerdos y la tradición oral muchos años después de la crucifixión de Jesús.

Historia del cristianismo

Después de la resurrección de Cristo, sus apóstoles y otros creyentes se dispersaron por el territorio del Imperio romano para divulgar sus enseñanzas y ganar creyentes.

Alcanzaron el centro mismo del imperio, la ciudad de Roma, donde el apóstol Pedro fue crucificado boca abajo; pero también sus extremos, como España o Etiopía, donde Felipe el diácono fundó una iglesia cristiana que aún existe.

San Pablo

En el proceso de expansión y consolidación de la fe cristiana nadie tiene tanta importancia como Pablo. Nacido judío en el año 4 de nuestra era, y al principio feroz perseguidor de los cristianos, tuvo más tarde una experiencia mística que lo llevó a convertirse a la fe de Cristo.

Viajó por Grecia y Asia Menor donde fundó numerosas iglesias locales. A los miembros de las mismas les dirigió cartas en las que aclara los dogmas de fe, resuelve disputas y les aconseja sobre diversos asuntos. Murió en el año 65.

Después de los evangelios, las cartas paulinas son la fuente de autoridad teológica más importante para las iglesias cristianas en todas sus ramas.

La cruz de Constantino

Los emperadores romanos desde Nerón a Diocleciano persiguieron implacablemente a los cristianos, quienes se negaban a rendirle culto a los emperadores como seres divinos.

Pero la situación cambiaría radicalmente con la llegada de Constantino I. Nacido en 280, tomó el poder del Imperio romano de Oriente en 307 y se propuso poner orden en el caos de intrigas en que estaban envueltos ambos imperios, el de oriente y el occidente.

En 312 llegó a Italia para combatir contra las tropas de Majencio, emperador de Occidente. Cuenta una leyenda que, un día antes de la batalla, Constantino vio en el cielo una cruz junto a las palabras “con este signo vencerás”. Puesto que, en efecto, Constantino venció a Majencio, decidió convertirse junto con su familia al cristianismo.

Esto dio un enorme impulso a una religión que hasta pocos años antes era implacablemente perseguida.

El decreto de Teodosio

En 380 el emperador Teodosio, un sucesor de Constantino, fue todavía más lejos y declaró al cristianismo como la religión oficial del Imperio.

Ya no se trataba de una decisión personal, como en el caso de Constantino, sino de una política de Estado. Y así como los cristianos habían sido perseguidos, así mismo comenzaron ahora a ser perseguidos los practicantes de otras religiones.

El cisma de 1054

En el año 1054 la Iglesia cristiana experimenta su primer cisma o división.

Diferencias teológicas y rivalidades políticas producen una ruptura entre el papa de Roma y el patriarca de Constantinopla (hoy Estambul). La ruptura da origen a la Iglesia ortodoxa, que aún existe en la actualidad.

Algunas de las desavenencias que causaron el cisma fueron las siguientes:

  • El papa de Roma y el patriarca de Constantinopla pugnaban por convertirse en la máxima autoridad del cristianismo.
  • La iglesia ortodoxa rechaza la idea del pecado original y la concepción inmaculada de la Virgen María, convertidas en dogmas por la iglesia de Roma.

La Reforma

En el siglo XVI la iglesia cristiana sufrió un segundo cisma.

El sacerdote agustino Martín Lutero hizo públicas sus “95 tesis”, en las cuales acusaba al papado de haberse desviado de las enseñanzas bíblicas originales para satisfacer sus propios apetitos de poder, riqueza y placeres carnales.

Lutero rechazaba la autoridad del papa y afirmaba que la salvación la concede solo Dios por su gracia a través de la fe, sin la mediación de ningún sacerdote.

La iglesia católica y los seguidores de Lutero y más tarde de Juan Calvino se enfrascaron en una encarnizada lucha que llegó hasta las armas y dejó numerosos muertos.

Los partidarios de Lutero y de Calvino fundaron las iglesias protestantes o evangélicas, una de las principales ramas del cristianismo.

Vaticano II

Fue un concilio ecuménico, es decir, una reunión de todos los obispos de la Iglesia católica, que tuvo lugar entre 1962 y 1965 en el Vaticano (Roma) y que pretendía hacer algunas reformas que acercaran un poco más el cristianismo católico a los grandes cambios del mundo moderno.

Fruto del Vaticano II fueron las siguientes reformas:

  • La misa ya no se daría en latín, sino en la lengua nativa de cada país.
  • Los laicos podrán dirigir obras pastorales y ministerios, los cuales ya no serían labores exclusivas de los sacerdotes y monjas.
  • Se iniciaron diálogos conciliatorios con las iglesias protestantes y con el judaísmo.

Principales creencias

Jesús es el Mesías

Para los cristianos Jesús de Nazaret es el Cristo, el Mesías prometido por Dios al pueblo de Israel. No hay otro mesías.

Aunque el cristianismo nació en el seno del judaísmo y comparte con él un mismo dios y muchos valores, esta creencia separa drásticamente a los cristianos de los judíos. Estos últimos creen que el mesías aún no ha aparecido en la Tierra y consideran a Jesús como un profeta judío más.

Jesús resucitó

Para los creyentes la resurrección de Cristo es la prueba definitiva de que Él es el hijo de Dios, el Salvador, el Mesías y no un simple profeta. Por eso la resurrección es un artículo de fe fundamental para los cristianos.

Jesús borra el pecado

Antes de la aparición de Cristo, un abismo de pecado separaba a Dios de sus criaturas, los seres humanos.

Pero con la enseñanza de Jesús y, sobre todo, a través de su sacrificio en la cruz, el pecado ha sido borrado y se ha abierto un camino para que los hombres vuelvan a reunirse con Dios.

Cristo es el mediador: se accede a Dios solo a través de Cristo.

Dios es una trinidad

Dios es tres personas en una: Padre, Hijo y Espíritu Santo. Incluso los más sesudos teólogos cristianos se abstienen de intentar explicar este dogma de manera minuciosa. Es un dogma de fe y solo por fe se comprende o se siente.

Solo una denominación cristiana, los Testigos de Jehová, rechaza este dogma y considera a Jehová y a Cristo como entidades separadas.

Ramas del cristianismo

La Iglesia católica

Cuenta con 1300 millones de creyentes. Su máxima autoridad es el papa, que administra los asuntos de la iglesia en todo el mundo desde su sede en el Vaticano (Roma).

Los católicos consideran al papa como un embajador de Dios en la Tierra. Por tanto, en temas teológicos, su autoridad es tan importante como la de los evangelios o las cartas de Pablo.

De hecho, la fe en la capacidad de la Virgen María para interceder ante Dios o en su concepción inmaculada son dogmas establecidos por el papado.

Las iglesias evangélicas o protestantes

Surgieron de la Reforma iniciada por Martín Lutero y continuada por Juan Calvino en el siglo XIX.

Las iglesias evangélicas rechazan la autoridad del Papa y solo reconocen a la Biblia como fuente legítima de autoridad teológica. Valoran el estudio profundo del texto bíblico y la capacidad para interpretarlo desde un punto de vista personal y libre.

Esta libertad de interpretación es la causa principal de que la Iglesia evangélica se haya dividido en tantas denominaciones diferentes. Algunas de ellas son: los bautistas, los menonitas, los presbiterianos, los pentecostales y los metodistas.

La Iglesia ortodoxa

Surgió a partir del cisma del año 1054 y es actualmente la fe mayoritaria en Europa del este, Grecia y Rusia.

Entre las diferencias que separan a católicos y ortodoxos, está la idea del purgatorio: afirmada por los primeros y rechazada por los últimos, quienes creen que al morir el alma es directamente enjuiciada por Dios.

Sin embargo, el concilio del Vaticano II declaró la reconciliación de ambas iglesias, por lo cual los católicos pueden participar de la liturgia ortodoxa.

Símbolos del cristianismo

La cruz

Aunque comúnmente lo asociamos con el cristianismo, la cruz es un símbolo muy antiguo usado por muchas culturas.

En el cristianismo, hace referencia al momento culminante y de máximo sufrimiento de la vida de Cristo, su crucifixión, con la cual liberó de pecado al mundo.

El pez

Es un símbolo empleado por los primeros cristianos en las catacumbas.

Puesto que entonces el cristianismo era perseguido, los creyentes no podían expresarse abiertamente. Así que recurrieron a este símbolo secreto.

En griego, pez se dice “ichthys”, una palabra que –siempre en griego- funciona como acrónimo de “Jesucristo, Hijo de Dios, Salvador”. Así:

IXΘΥΣ:

Iota I=Jesús

Ji X=Christos

Theta Θ=Theou (de Dios)

Ípsilon Υ=Uios (Hijo)

Sigma Σ=Soter (Salvador)

Referencias

  1. Von Hellfeldt, Matthias. (2009). El cristianismo se convierte en religión del Estado en el Imperio Romano. Tomado de dw.com.
  2. El origen del cristianismo y sus creencias más importantes. (2017). Tomado de okdiario.com.
  3. Fernández, Tomás y Tamaro, Elena. (2004). Jesús de Nazaret. El cristianismo. Tomado de biografiasyvidas.com.
  4. Las 4 principales ramas del cristianismo (con explicación). (s. f.). Tomado de psicologiaymente.com.
  5. Editorial Grudemi (2020). Cristianismo. Tomado de enciclopediadehistoria.com.