Movimiento magisterial (México, 1958): causas, desarrollo, logros
¿Qué fue el Movimiento magisterial de 1958?
El Movimiento magisterial consitió en una serie de huelgas y movilizaciones sociales convocadas en México por el Movimiento Revolucionario del Magisterio, un sindicato de ideología socialista. Los integrantes de las protestas fueron sobre todo maestros de primaria, cuya principal demanda era la mejora de los salarios.
Además de la petición de mejoras salariales, en la convocatoria de las protestas influyeron otros factores, como los políticos y los ideológicos. El Movimiento magisterial tuvo lugar en un contexto de movilizaciones de otros sectores, como los ferrocarrileros, los telegrafistas o los médicos. En muchas ocasiones, estos movimientos se apoyaron unos a otros.
Otra de las causas que llevó a la aparición del Movimiento magisterial fue el descontento por parte de muchos maestros de la labor realizada por el Sindicato Nacional de Trabajadores de Educación. Este sindicato, según los miembros del Movimiento, no ejercía una verdadera labor reivindicativa y se limitaba a alinearse con el gobierno del turno.
Las manifestaciones convocadas por este grupo se desarrollaron en Ciudad de México entre los meses de abril y mayo. La respuesta del gobierno fue reprimir las protestas con violencia, aunque finalmente debió conceder algunas de las peticiones de los convocantes.
Causas del Movimiento magisterial
Los maestros habían visto su situación económica y social empeorar desde hacía ya varias décadas. Durante la presidencia de Lázaro Cárdenas (1934-1940) había existido un proyecto educativo socialista, pero a diferencia de lo ocurrido con otros sectores, nunca llegó a desarrollarse por completo.
También durante la etapa presidencial de Cárdenas se había fundado el Sindicato Nacional de Trabajadores por la Educación (SNTE). A partir de ese momento, los maestros tenían prohibido afiliarse a otro tipo de sindicatos; obligatoriamente debían formar parte del SNTE, y a su vez de la Federación de Trabajadores al Servicio del Estado.
El principal cometido del SNTE era que existieran relaciones fluidas entre la Secretaría de Educación Pública (SEP) y los maestros.
Movimiento Revolucionario del Magisterio
El sistema educativo mexicano no mejoró demasiado en las décadas siguientes, especialmente debido a la escasez del presupuesto dedicado a este tema. Ni siquiera las campañas puestas en marcha por el presidente Adolfo Ruíz Cortines (1952-1958) para tratar de reducir el analfabetismo habían dado el resultado deseado.
La situación provocó una división dentro del SNTE, ya que muchos de sus miembros consideraban que su actuación para defender las demandas magisteriales era muy débil. Como resultado, los disidentes crearon un nuevo sindicato: el Movimiento Revolucionario del Magisterio.
El principal líder de esta organización era Othón Salazar, quien tenía una fuerte ideología de izquierdas, al igual que el resto de sus dirigentes.
Ante la insuficiente oferta de subida salarial ofrecida por el SNTE, este movimiento convocó una series de manifestaciones en 1956. Estas acciones reivindicativas fueron el antecedente inmediato de lo ocurrido dos años más tarde.
Contexto político reivindicativo
La huelga y manifestaciones del Movimiento magisterial no fueron las únicas que se produjeron en esa época. Distintos sectores económicos, políticos y sociales mexicanos realizaban protestas para intentar mejorar su situación. Entre esos sectores, además de los maestros, se encontraban los médicos, los telegrafistas o los ferrocarrileros.
Las exigencias de todos esos sectores, incluido el Movimiento magisterial, no solo se limitaban a sus problemas laborales. En sus actuaciones también existían motivaciones políticas. La cercanía de las elecciones presidenciales de 1958 hacía que fuera el mejor momento para exigir la democratización del país.
Peticiones
La peticiones específicas del Movimiento magisterial quedaron recogidas en un manifiesto redactado en el mismo 1958. En este documento, los maestros comenzaban diciendo que “de acuerdo con las cifras oficiales, en julio de 1956 ganábamos el 14% menos que en 1939, en tanto que en marzo de 1958 la diferencia es más de 35%”.
Ante esa situación solicitaban al gobierno aumentar su sueldo hasta los 1 200 pesos. Además, pedían que la cantidad se revisara anualmente conforme al alza de los precios.
Por otra parte, también exigían poder jubilarse cuando llevaran 30 años de profesión y mantener en su pensión el mismo sueldo que hubieran recibido el último año.
Los maestros pedían que sus familiares fueran cubiertos por el servicio médico y que no tuvieran que pagar las medicinas.
Por último, pedían democratizar las condiciones para mejorar su nivel profesional y en la elección de representantes.
Desarrollo y características del movimiento
El Movimiento magisterial convocó una manifestación para el 12 de abril de 1958, en plena campaña para las elecciones presidenciales.
La manifestación llegó a la plaza del Zócalo de la capital mexicana con la intención de obtener una respuesta positiva a sus demandas. Pedían que se reconociera al Movimiento Revolucionario del Magisterio como una organización legal dentro del SNT.
Los convocantes anunciaron que si el SEP no atendía su exigencia de mejora salarial llamarían a la huelga. Ante la falta de respuesta, la huelga comenzó el día 15. Principalmente fue seguida por los centros educativos de la capital. A estos se unieron los estudiantes de la Escuela Nacional de Maestros y los del Instituto Federal de Capacitación.
Represión
La respuesta del gobierno fue reprimir violentamente las manifestaciones. La actuación policial y militar causó la muerte de varios manifestantes, así como un gran número de heridos.
La tensión creció con esta represión y el día 19 hubo una nueva marcha hacia el Zócalo. Además de las peticiones anteriores, los convocantes exigían que se depuraran responsabilidades por la violencia desatada.
La nueva manifestación fue otra vez reprimida con dureza, lo que provocó la suspensión de las clases. Los líderes del Movimiento Revolucionario del Magisterio entregaron sus peticiones directamente a la SEP, sin pasar por el SNTE.
Sin embargo, el SNTE, que actuaba siguiendo la postura del gobierno, no aceptó las peticiones. Según sus mandatarios, las negociaciones solo podían llevarse a cabo con el SNTE, ya que consideraban ilegal al MRM.
El MRM logró un apoyo de casi el 90% de los maestros a sus demandas, por lo que la huelga que se estaba llevando a cabo era casi completa.
Ocupación de la SEP
Sin posibilidad de establecer ningún tipo de negociaciones, el MRM siguió adelante con sus movilizaciones. El 30 de abril sus miembros ocuparon la sede de la SEP. Durante un mes, los patios del edificio fueron utilizados para realizar unos mítines diarios en los que participaron más de 1 500 maestros.
La respuesta gubernamental no varió y la represión policial continuó. Esto solo logró aumentar la tensión y que otros sectores se unieran a los maestros durante las protestas. Othón Salazar y otros líderes del MRM fueron detenidos y enviados a la prisión de Lecumberri.
La actuación del gobierno tuvo un efecto negativo para sus intereses, ya que al apoyo popular a los manifestantes creció en todo el país.
Finalmente, Ruíz Cortines no tuvo más remedio que ceder. El 15 de mayo, día del maestro, anunció que iba a aprobar las peticiones sobre el salario de los maestros.
Logros
Uno de los logros más importantes de los maestros del Movimiento magisterial fue conseguir crear una nueva organización sindical al margen de la oficial.
Con la ocupación de la SEP, la tensión entre distintos sectores (no solo los maestros) y el gobierno entró en una nueva fase. Los empresarios exigieron que el edificio fuera desalojado utilizando todo tipo de medidas, aunque implicaran una gran violencia.
Por su parte, la Asociación de Banqueros pidió que los maestros considerados socialistas y comunistas fueran purgados de las escuelas.
Esta reacción de los empresarios, que llegaron a pedir el estado de sitio, muestra que el Movimiento magisterial era visto como una amenaza política para ellos.
Concesiones del gobierno
Con las elecciones cercanas, Ruiz Cortines aceptó algunas de las peticiones de los maestros, entre ellas la mejora salarial. Después de las negociaciones, el sueldo de estos profesionales creció en 150 pesos al mes.
El Movimiento magisterial desalojó el edificio de la SEP tras conseguir sus objetivos. En una marcha posterior, miles de manifestantes celebraron su victoria y denunciaron la actitud de los dirigentes del SNTE.
A pesar de eso, el MRM no logró ser reconocido como una organización legal. Durante los meses siguientes, la organización prosiguió su lucha y el gobierno volvió a reprimir cualquier manifestación celebrada.
Referencias
- Revista Este País. El movimiento magisterial. Recuperado de archivo.estepais.com
- Carmona Dávila, Doralicia. La policía disuelve un mitin del Movimiento Revolucionario del Magisterio MRM en el zócalo de la capital. Obtenido de memoriapoliticademexico.org
- Pérez Alfaro, María Magdalena. 60 años de lucha del Movimiento Revolucionario del Magisterio. Obtenido de revistamemoria.mx
- María de la Luz Arriaga. El magisterio en lucha. Obtenido de cuadernospoliticos.unam.mx
- La Botz, Dan. The Long Struggle of Mexican Teachers. Obtenido de jacobinmag.com