Características que diferencian al ser humano de otras especies
Las principales características que diferencian al ser humano de otras especies son el habla, las relaciones sociales, la estructura bípeda, la longevidad y el raciocinio.
El ser humano sufrió numerosas transformaciones durante el proceso evolutivo desarrollado desde la Prehistoria. Algunas afectaron su apariencia y morfología, y otras incidieron en su capacidad para interrelacionarse y formar sociedades avanzadas.
Esto le proporcionó al ser humano un acceso preferente a los recursos naturales necesarios para la vida, y supuso su control sobre el resto de especies.
Características que distinguen al ser humano de otras especies
1- El habla
Ninguna otra especie dispone de un lenguaje estructurado con el que comunicarse. Hay debates entre distintas corrientes, ya que algunas consideran que las lenguas no son sino una parte del lenguaje, que abarca también la comunicación entre animales.
Es cierto que otras especies disponen de estructuras primarias de comunicación (ladridos, balidos, determinados movimientos, etc.), pero solo el ser humano ha sido capaz de desarrollar más de 600 idiomas.
Los idiomas son sistemas de comunicación estructurados que están en permanente evolución y que se han implantado en un determinado territorio.
La capacidad humana de aprender nuevos idiomas resalta sobre la incapacidad animal de imitar y comprender formas de comunicación propias de otras especies.
2- Las relaciones sociales
La sociología define las relaciones sociales como el conjunto de interacciones regladas que se dan entre dos o más individuos.
La convivencia y las relaciones interpersonales conforman el seno de una sociedad constituida, que desarrolla normas para su adecuado funcionamiento.
Por el contrario, las relaciones entre las especies animales vienen dadas por la fuerza: el más fuerte se impone. Este tipo de relaciones se da también entre integrantes de una misma especie, incluso en las que se parecen al hombre, como los homínidos.
Los débiles físicamente son sometidos por los más fuertes, mientras que las normas humanas dictan que los más débiles (enfermos y ancianos) deben ser cuidados y protegidos por los más fuertes.
3- La estructura o morfología bípeda
Esta es una característica estructural. La evolución de la especie derivó en que la humana sea la única bípeda.
El ser humano dispone de dos piernas sobre las que sostenerse y con las que caminar, y dos manos con las cuales desarrolla diversas actividades.
Ningún otro animal dispone de dos extremidades inferiores y dos extremidades superiores tan diferenciadas.
4- La longevidad
Aunque depende de diversos factores, en líneas generales puede afirmarse que la esperanza de vida del ser humano es de las mayores, en comparación con otras especies.
En los países occidentales se sitúa en torno a los 80 años. Solo algunas especies, como el elefante, la ballena o el águila, viven tanto o más que el hombre.
Además, la infancia del ser humano es de las de mayor duración. Ni en las especies más longevas ocurre esto, dado que la madurez e independencia se producen mucho antes.
5- El raciocinio
El raciocinio, que la ciencia asocia con la inteligencia, es otra característica definitoria del ser humano.
La principal diferencia con respecto a otras especies es que los razonamientos y sus estructuras de pensamiento están mucho más desarrolladas en el ser humano.
Aunque algunos animales son capaces de trazar planes y asimilar o aprender determinadas cosas, siempre actúan por instinto y no como resultado de un razonamiento lógico de las causas, consecuencias, ventajas y desventajas de los escenarios.
Referencias
- Introduction to Human Evolution on Smithsonian National Museum of Natural History en humanorigins.si.edu
- What makes us human?, de Institute of Creation Research en icr.org