Cómo dejar la cocaína: 12 importantes consejos prácticos

En este artículo explicaremos cómo dejar la cocaína, una droga que ha probado ser tan peligrosa como la heroína o el crack. Los problemas físicos y psicológicos que genera en el organismo van desde alucinaciones y psicopatologías diversas hasta problemas sexuales y depresión, sin hablar de las dificultades sociales y económicas.
La cocaína es una droga psicoestimulante del sistema nervioso central y tiene un alto potencial adictivo. Específicamente, lo que hace es bloquear de forma radical los recaptadores de dopamina, por lo que aumenta la liberación de esta sustancia en el cerebro.
La dopamina es un neurotransmisor muy ligado al sistema de placer y recompensa del cerebro. Por tanto, la gran liberación de dopamina hace que la cocaína sea muy adictiva.
¿Cómo es una persona adicta?
Lo primero que se nos viene a la cabeza cuando pensamos en un adicto es la típica persona que vive en la calle con un aspecto físico muy deteriorado. Pero nos olvidamos de aquellos que son igualmente adictos y llevan una “vida normal”, viven en familia, tienen trabajo, pero pasan desapercibidos para el resto de la sociedad.
No hay que olvidar que para ser un adicto no es necesario consumir diariamente, basta con consumir de manera esporádica, o solo ser un consumidor de fines de semana.
El fin último de ambos tipos de adicción es el mismo, experimentar o buscar la sensación de placer y euforia que provoca el consumo de la cocaína y abandonar el estado de ansiedad y malestar que produce el no consumirla.
Consejos para abandonar la cocaína
1. Reconoce que tienes un problema
En primer lugar, antes de llevar a cabo cualquier cambio de conducta o tomar una decisión, debes ser firme contigo mismo y reconocer abiertamente que tienes un problema de adicción, y por tanto, estás preparado para recibir la ayuda de un profesional para superarlo.
Sin este primer paso, no serán posibles las siguientes etapas del cambio. Una vez reconocido el problema, primordial para comenzar un tratamiento de desintoxicación, podemos empezar a plantearnos una nueva vida sin adicciones.
2. Busca apoyo
Dejarla tú solo será tremendamente difícil. Busca a las personas más allegadas y pídeles ayuda. Cuando dejes de consumir, tarde o temprano necesitarás a alguien que te apoye, que te dé consejo, te anime y te comprenda.
Busca a esas personas, cuantas más tengas mejor para ti, pues serán fundamentales para que ganes la batalla a la cocaína. No intentes llevar toda esta carga tú solo.
3. Distráete
Seguramente, a menudo te vienen pensamientos de consumir; si esto es así, para un momento y sal a pasear, queda con algún amigo o familiar que no consuma, lee un libro y sumérgete en él, etc. Lo importante es que rompas con esos pensamientos, ya que si te recreas en ellos, las ganas de consumir aumentarán.
Al realizar alguna actividad, por ejemplo, si estás paseando, fíjate en todos aquellos detalles del entorno, e intenta evitar pasar por lugares que te recuerden tu adicción.
4. Replantéate el cambio que necesitas
Una vez has reconocido ser un adicto, debes saber que para superar tu adicción serán necesarios nuevos cambios en tu vida.
Para ello, sería útil que anotaras los pros y los contras de dejar de ser un consumidor, y poder conocer más a fondo la percepción que tienes del problema, de modo de aumentar a la vez la percepción de conductas alternativas.
Además, mientras consumas, te estarás desequilibrando emocional y psicológicamente, ya que cuando consumes te acostumbras a sensaciones muy intensas debido a la gran estimulación que recibe tu cerebro.
5. Tómate un tiempo y piensa en tu adicción
Hay veces en que es necesario detenerse a tiempo, pues el camino de la autodestrucción puede no parar nunca. En este momento no se trata de que hagas una revisión de lo que ha supuesto la cocaína para ti, sino que lo hagas sobre todos tus ámbitos vitales.
¿Puedes continuar con esta situación? ¿Puedes seguir soportándolo? Haz una lista de todos los ámbitos de tu vida, cómo funcionan y qué cambios ha habido últimamente.
Cuando lo hayas hecho, piensa en cuáles son los cambios que necesitas y qué es lo que te impide hacerlos ahora. Plantéate cómo realizarás esos cambios y manténlos como un objetivo final después de superar la adicción.
6. Imagínate una vida sin drogas
La cocaína te proporciona el estado de bienestar que deseas en el momento preciso, pero sabes bien qué es lo que viene después. Y es que este estado de bienestar solo dura mientras dura el efecto de la droga, después aparece todo lo contrario.
Dicho de otra forma, si tuviéramos una escala del 0 al 10, donde 0 es malestar absoluto y 10 gratificación máxima, en la vida de una persona normal, podrías estar entre 4 y 7 la mayor parte del tiempo.
En algunos momentos la gratificación podría subir a 6 o 7, dependiendo del estímulo que recibiera, y en algunos momentos podría bajar a 5 o 6, pero raramente se movería de estos términos.
En cambio, al consumir cocaína se alcanza fácilmente un valor de 9 o 10, pero en cuanto se acaba el efecto de la droga baja rápidamente a 1 o 0. De hecho, cuando consumes cocaína solo te mueves en esos términos: máxima gratificación al consumir y apatía el resto del día.
7. Conciénciate
Una vez que te hayas planteado definitivamente este nuevo cambio en tu vida, debes plenamente concienciarte de que no será un camino fácil, pero con la ayuda de profesionales, familia y amigos se puede superar.
Con concienciarse queremos decir que debes hacer el ejercicio necesario para darte cuenta de que la mejor solución para ti es dejar de consumir cocaína. Es habitual no pensar en ello cuando se es adicto.
Encuentra cuáles son los factores que te han llevado al consumo: por qué consumes, con qué frecuencia, en qué lugares, con qué personas, y qué ha sucedido en ti desde que empezaste.
Apunta todo esto en una hoja y toma conciencia de lo que realmente te proporciona la cocaína. Piensa también en los cambios que debes hacer en tu manera de enfocar la vida para que puedas dejar de sentir la necesidad de consumir cocaína.
8. Abandona el consumo
La cocaína se puede dejar de un día para otro. Así que si quieres, la última dosis que has consumido hoy puede convertirse en la última de toda tu vida.
No obstante, suele ser difícil, sobre todo si estás acostumbrado a consumir altas cantidades de cocaína. Así, pues, un ejercicio que te recomiendo es que organices el abandono de la cocaína. ¿Cómo se puede hacer?
Una técnica eficaz es que te plantees los días que estarás sin consumir, por ejemplo, 8 días. A partir de este momento debes estar 8 días sin consumir cocaína. Pasados estos 8 días, puedes consumir una dosis y aumentar a 9 los días que pasarás sin consumir.
Si vas haciendo este ejercicio llegará un momento en que quedarán tantos días para la próxima dosis que no tendrá sentido volver a drogarte.
9. Consulta a un médico
Cuando dejes de consumir cocaína es muy probable que experimentes el síndrome de abstinencia, que son todos esos síntomas físicos y psíquicos que se producen en tu organismo debido a la ausencia de la droga.
Algunos de los síntomas pueden ser agitación y conducta inquieta, desánimo, fatiga, malestar generalizado, aumento del apetito, sueños demasiado intensos y desagradables o disminución de la actividad.
La aparición de estos síntomas suele provocar de forma inmediata la recaída, ya que si consumes la droga todo el malestar desaparece.
Así, pues, si te encuentras en esta situación, consulta a un médico para que te dé el tratamiento farmacológico correspondiente para superar el síndrome de abstinencia. Normalmente los medicamentos administrados suelen ser antidepresivos o ansiolíticos.
10. Evita las recaídas
Aun cuando ya hayas dejado la cocaína, debes tener en cuenta que sigues siendo un adicto potencial, ya que si la consumes es muy probable que vuelvas a recaer. No te dejes llevar por pensamientos de que ya has abandonado la adicción y consumir una vez no te afectará en nada.
Esto no es así, habrás superado la adicción siempre que no consumas, pero si vuelves a consumir aunque sea una vez, la cosa se puede complicar.
Aunque no es fácil, debes evitar las pequeñas recaídas, y para ello será necesario que sigas con el tratamiento hasta que los profesionales así lo indiquen.
Pero como todos sabemos, las pequeñas recaídas están ahí y hay que verlas no como un fracaso, sino como nuevas oportunidades. Es un proceso difícil pero no imposible.
11. Comienza una nueva vida
Un error común suele ser pensar que en el momento que se supera la cocaína todos los aspectos de tu vida mejoran automáticamente; sin embargo, esto no es así.
Cuando superas la cocaína tu vida sigue igual, la gran ventaja que consigues es que adquieres la capacidad necesaria para poder ir mejorando todos esos aspectos de tu vida que no te gusten.
Es en este momento en el que debes estabilizar tu vida a través de una actividad adecuada y establecer relaciones personales que te proporcionen tranquilidad y bienestar. Si lo consigues, podrás olvidarte de la cocaína para siempre.
Como consejo adicional te recomendaría que incorporaras la actividad física en tu rutina. Si lo haces se fortificará tu nuevo estilo de vida donde la cocaína no tiene cabida y será mucho menos probable que puedas volver a drogarte.
12. Sé estricto y comprensivo
Si es un familiar o amigo tuyo quien tiene este tipo de adicción, debes tener estos dos adjetivos presentes en todo momento. Debes ser estricto con el consumo, siempre que la persona adicta no tenga ninguna intención de abandonar la droga.
No se puede tener ningún tipo de tolerancia con la cocaína ni puede ser justificable su consumo en ningún momento, así que debes tomar la medidas necesarias que estén a tu alcance, por muy duras que sean.
No obstante, siempre que en la persona adicta haya voluntad de dejar la droga, la comprensión debe guiar tu actuación hacía ella.
Dejar la cocaína es un proceso muy duro en el que se sufre mucho, por lo que cuando una persona se esfuerza para eliminar la cocaína de su vida hay que ser comprensivo con ella.
“Recuerda que la gran mentira sobre las drogas es que tú tienes el control”.