Títulos de crédito: concepto, clasificación, características, ejemplos
¿Qué son los títulos de crédito?
Los títulos de crédito son documentos que sirven para probar la obligación que contienen, normalmente reflejada en formato papel. Sin el documento del título de crédito el derecho no se puede reclamar, así que ese es el origen de su fuerza. Los títulos de crédito son los que proporcionan al que los posee la legitimación activa.
Existen títulos de crédito nominativos y al portador. Como ejemplos de títulos de crédito están los cheques, los pagarés y las letras de cambio, que también tienen el carácter de papeles de comercio. Este carácter viene conferido porque, además de las características propias de los títulos de crédito, añaden la de ser formales, completos y abstractos.
Cada título de crédito dispone en sí mismo de la autonomía que le proporciona el crédito que lo origina, y este se va transmitiendo a cada uno de los titulares sucesivos progresivamente de forma propia e independiente. Asimismo, son documentos literales y su reclamación se limita a lo establecido exactamente en el título.
Características de los títulos de crédito
Prácticamente todos los títulos de crédito tienen varias características clave. A continuación describiremos algunas de estas:
- Los títulos se realizan mediante un instrumento transferible.
- Tienen intereses o se emiten con un descuento sobre su valor nominal.
- En una fecha concreta o en cuotas, deben ser reembolsados por el emisor, aunque algunos títulos de crédito se emiten sin una fecha de reembolso fija.
- Pueden cotizar en la bolsa de valores o emitirse para un grupo de inversores preseleccionados en una base a una adjudicación privada.
- Generalmente se negocian en el mercado extrabursátil; es decir, directamente entre dos partes en lugar de a través de una bolsa de valores (incluso si cotizan en una bolsa de valores).
- Pueden ser no garantizados y clasificados pari passu (con igualdad de condiciones) con la otra deuda no garantizada del emisor, o asegurados en activos específicos.
- Pueden ser de recurso completo, lo que significa que los titulares de los créditos tienen un derecho sobre los activos generales del emisor. También pueden ser de recurso limitado, lo que significa que las demandas de los titulares de los créditos se limitan a los activos especificados por el emisor.
Tipos de títulos de crédito
Los títulos de crédito se pueden clasificar en:
Nominativo y al portador
Esto depende de si se determina específicamente el titular del crédito con nombre y apellido (nominativo) o si se establece que el titular del crédito es el portador del mismo; es decir, el que lo tiene en su poder en el momento de hacerlo efectivo.
Individuales y seriales
Depende de si existe un solo título por la totalidad del título crediticio o si existen varios títulos en serie, consecutivos, por una parte de la obligación objeto del título de crédito. Un solo título son individuales y varios títulos consecutivos son seriales.
Abstractos y causales
Tiene que ver con si en el título se establece la razón origen de la obligación o no. Si no se indica la causa, son abstractos; si se indica, son causales.
Nominados e innominados
Está vinculado con si están regulados en la legislación aplicable. Los nominados lo están y son obligaciones, pagarés, letras de cambio, cheques, bonos de prenda, certificado de vivienda y certificado de participación.
Normalmente los innominados no tienen regulación específica y no se utilizan mucho en el derecho mexicano.
Crediticios, de participación y representativos
Esto depende el objeto del título: los crediticios otorgan la facultad de cobrar un dinero, los representativos otorgan la facultad de disponer de un derecho de prenda o propiedad y los de participación añaden al dinero derechos de participación dentro de una vida en sociedad. El objeto del título determina su clasificación.
Principales y accesorios
Son principales o accesorios dependiendo de si existen independientemente o no. Los títulos de crédito principales son aquellos que existen sin depender de nadie.
Sin embargo, los títulos de crédito accesorios están unidos a otro que es el principal y sin ese no pueden existir.
Ejemplo de título de crédito
El Sr. Martínez está buscando opciones de inversión para sus ahorros que le ofrezcan pagos regulares y superen el interés que obtendría al dejar su dinero en una cuenta de ahorro común. Los títulos de crédito son una opción que puede utilizar para hacer crecer su dinero; tiene varias opciones para hacerlo.
Los títulos de crédito facilitan a una institución obtener dinero prestado de inversores como el Sr. Martínez y pagar el préstamo con intereses. Cuando las instituciones o corporaciones, gobiernos o bancos necesitan recaudar dinero para realizar negocios, tienen dos medios principales para hacerlo.
En primer lugar, pueden vender capital de la compañía en forma de acciones normales, pero eso requiere renunciar a la propiedad de la compañía. Otra opción es crear títulos de crédito.
Bonos
(Los bonos son un tipo de bonos de crédito).
El Sr. Martínez conoce algo sobre los bonos, principalmente porque recibió algunos bonos de ahorro de sus abuelos cuando era más joven. Los bonos son títulos de crédito que tienen distintas formas y se distinguen principalmente por el tipo de institución que los emite.
Los bonos funcionan de la siguiente manera. Las instituciones venden bonos a los inversionistas y les prometen realizar pagos periódicos de intereses hasta que el valor del bono se reembolse en su totalidad en una fecha concreta futura.
Los bonos emitidos por el gobierno federal se conocen generalmente como bonos del gobierno, mientras que los emitidos por los gobiernos estatales y locales se llaman bonos municipales. Las corporaciones emiten bonos corporativos con el fin de recaudar dinero para financiar sus operaciones.
A menudo, los bonos del gobierno actúan como un punto de referencia para las tasas de interés de los títulos de crédito en general. Los bonos del gobierno vienen respaldados por el Estado, lo que hace que el riesgo de incumplimiento sea muy bajo, ya que el gobierno siempre puede aumentar los impuestos o recortar gastos para realizar los pagos.
Por eso, un bono corporativo puede tener interés más alto, ya que hay más riesgo involucrado. Al adquirir un bono corporativo, el Sr. Martínez está realizando una inversión que es más arriesgada que una cuenta de ahorros o incluso que un bono estatal. Lógicamente, tiene un mayor rendimiento.