Cultura general

Ruth Shady: quién es, biografía, aportes y descubrimientos


¿Quién es Ruth Shady?

Ruth Shady (1946-presente) es profesora, arqueóloga y antropóloga peruana, cuyos descubrimientos hicieron que se revalorizara y datara el sitio arqueológico Caral. 

Ha ejercido diversos cargos en varias universidades y centros científicos de su país, y ha participado en investigaciones internacionales, particularmente en Estados Unidos.

Aunque otros científicos ya habían identificado el sitio arqueológico antes que el equipo de la arqueóloga, Shady dedicó varios años al desarrollo de investigaciones que sirvieron para redefinir el entendimiento de la humanidad en América del Sur.

Biografía de Ruth Shady

Primeros años 

Nació el 29 de diciembre de 1946 en Callao, Perú. Su padre era Gerardo Hirsh, quien cambió su nombre a Heinz Shedy para escapar de la guerra que azotaba a su país.

Hirsh llegó a Perú con 20 años, cuando Europa se encontraba en mitad de la Segunda Guerra Mundial. Su madre, Rosa Solís Pita, era peruana.

Su padre fue la principal fuente de influencia que la llevó a convertirse en arqueóloga. Las antiguas culturas que habitaron Perú en el pasado se convirtieron en una gran influencia para el padre de Ruth.

Cuando era niña, su padre le regalaba a ella y a sus hermanos libros arqueológicos donde se relataba la historia del antiguo Perú. Desde ese momento, su interés por la arqueología fue creciendo.

Años de estudio

Estudió en la unidad educativa Juana Alarco, donde se formó académicamente. En esta escuela, formó parte del llamado “Club del Museo”.

Tras finalizar su educación básica, realizó sus estudios secundarios en la Institución Educativa Emblemática Juana Alarco de Dammert en Lima. Luego, decidió inscribirse en la Universidad de San Marcos para estudiar antropología y arqueología en 1964.

Su madre estaba en contra de que se especializara como arqueóloga, pero el interés de la joven la hizo mantenerse firme con su decisión.

Siendo mujer, encontró muchas dificultades como estudiante. La arqueología siempre había sido vista, tradicionalmente, como una disciplina llevada a cabo por hombres.

Se ofreció como voluntaria para realizar excavaciones en la Huaca de San Marcos, mientras realizaba sus estudios universitarios.

Culminó sus estudios profesionales realizando unas pasantías en investigación dentro del Smithsonian Institution en 1978.

Entre 1982 y 1985 estuvo a cargo de un componente arqueológico del proyecto de construcción del Museo de Antropología. También realizó pasantías sobre el procesamiento de materiales culturales en Niza, Francia.

Primeros proyectos de investigación y actividades

A nivel profesional, ha dirigido una cantidad de proyectos de investigación dentro de Perú, además de realizar amplios aportes en organizaciones sociopolíticas.

Shady ha realizado investigaciones en el distrito de Lima, Végueta, en el complejo arqueológico Maranga, ubicado en Lima, en el sitio arqueológico Pacopampa, al norte de Perú, en Chota, en la región de Cajamarca y en Bagua.

En muchas de sus investigaciones estuvo acompañada por el arqueólogo Hermilio Rosas LaNoire. Fue directora de la Escuela Académica Profesional de Arqueología de la Universidad de San Marcos. 

También fue becaria en el área de investigación en el centro de estudios de Dumbarton Oaks, en Washington, Estados Unidos, durante 1992 y 1993. Realizó varios viajes alrededor del mundo para expandir su experiencia sobre patrimonio cultural en Suiza, Japón, China, India, Alemania y Canadá.

Aparte de la investigación, se dedicó a la docencia universitaria y a la dirección del Museo de Arqueología y Antropología de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, aproximadamente durante diez años.

Proyecto Especial Arqueológico Caral-Supe

Ruth Shady fue la fundadora del Proyecto Especial Arqueológico Caral-Supe, que inició en 2003 con la investigación Caral-Supe. Sin embargo, ya había estado desarrollándolo antes de la intervención del Estado, en 1996.

El proyecto tiene la finalidad de investigar y conservar el sitio arqueológico de Caral. En este sitio se hallan las primeras muestras de la civilización Caral, desarrollada entre 3.000 y 1.500 a.C., siendo una de las primeras poblaciones complejas en el área norte central de Perú, e incluso de América.

A lo largo de los años el proyecto se ha expandido e investigado, conservado y administrado alrededor de diez sitios arqueológicos del valle de Supe, entre ellas: Chupacigarro, Áspero, Miraya, Allpacoto, así como Pueblo Nuevo, Piedra Parada, El Molino, etc.

Bajo su dirección, Shady desarrolló una arqueología pública capaz de impulsar el progreso socioeconómico de las poblaciones a partir del patrimonio arqueológico para el aprovechamiento turístico.

La intención del proyecto –además de fomentar el patrimonio regional– es impulsar el desarrollo de infraestructuras productivas, la producción sostenible y buenas condiciones de educación.

Esas iniciativas de la institución están enmarcadas dentro del “Plan Maestro del Valle de Supe y su área de influencia” expuestas desde 2006.

Trabajos y actividades más recientes

Ruth Shady ha sido la directora de la institución Zona Arqueológica Caral desde 2003 hasta la actualidad.

La institución fue creada el 14 de febrero de 2003, y ratificado el 18 de marzo de 2006 con su propia autonomía.

Como una iniciativa del Proyecto Especial Arqueológico Caral-Supe, la Zona Arqueológica Caral es la responsable de las actividades de investigación y conservación de Caral como una de las civilizaciones más antiguas de América.

Entre 2006 y 2007 fue decana del Colegio Profesional de Arqueólogos de Perú y coordinadora de la Maestría en Arqueología Andina de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos desde 1999, 2007 hasta 2010.

Hasta 2012 fue presidenta del Consejo Internacional de Monumentos y Sitios (ICOMOS).

Principales publicaciones

A lo largo de su carrera como arqueóloga se encargó de redactar una enorme cantidad de publicaciones, tanto en su tierra natal como en el extranjero, además de infinidad de artículos en revistas.

Entre sus principales publicaciones está La Ciudad Sagrada de Caral-Supe en los albores de la civilización en el Perú de 1997, un recuento de los indígenas de América del Sur, la situación de Perú-Supe, de las antigüedades y las excavaciones realizadas.

En 2003 publicó Los orígenes de la civilización andina. Un año después, en 2004, publicó Caral, la Ciudad del Fuego Sagrado, en la cual hace un recuento de la magnitud de los monumentos, la rareza de las culturas y la curiosidad que despertó en ella tras sus investigaciones.

Luego, en 2006, publicó la obra en inglés Caral-Supe and the North-Central Area of Peru: The History of Maize in the Land Where Civilization Came into Being. Más tarde, en 2011, publicó La Civilización Caral, la producción de conocimientos y su trascendencia en el proceso cultural del Perú.

Sus últimas publicaciones fueron publicadas en 2013: La Civilizacion Caral: El Sistema Sociopolítico y la Interacción Intercultural y El sistema social de Caral y su trascendencia: El manejo transversal del territorio.

Aportes y descubrimientos

La primera civilización de Perú

A la existencia de la primera civilización de Perú le atribuyeron el nombre de “Civilización Caral”.

Entre 1994 y 1996 se le atribuye el descubrimiento a Ruth y su equipo gracias a sus trabajos arqueológicos, a través del Proyecto Especial Arqueológico Caral-Supe.

La civilización Caral-Supe es considerada la civilización más antigua prehispánica, superando incluso a la civilización olmeca.

De hecho, la Caral se considera aún más antigua que la Chavín, que durante mucho tiempo se consideró “la cultura madre de Perú”.

Cuenta con aproximadamente 5.000 años de antigüedad. Actualmente, el sitio arqueológico tiene alrededor de 620 hectáreas, ubicado en el distrito Supe, Perú, y fue catalogado como Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO en 2009.

Inicio de los procesos arqueológicas en Caral-Supe

A partir de 1996 el equipo de Shady comenzó las primeras excavaciones en la zona de Caral-Supe, tras una prospección arqueológica.

Shady comentó que primeramente se debía desarrollar actividades de investigación en la zona arqueológica, combinadas con un programa de investigación multidisciplinario y completo que incluía excavación, prospección, análisis de materiales y procesamiento de información.

Tras las prospecciones arqueológicas en el lugar se identificaron dieciocho asentamientos con arquitectura monumental que carecía de cerámica, siendo un indicador claro de que pertenecía a un período bastante antiguo.

De ahí, Shady se interesó por incrementar sus investigaciones en la zona de Caral.

Shady utilizó la datación por radiocarbono para determinar la edad de los materiales antiguos. Este tipo de técnica utiliza un reactivo químico para establecer la datación.

Según las dataciones radiocarbónicas que realizó Shady, Caral pertenece a la época Arcaico Tardía, caracterizada por civilizaciones con usos previos a la cerámica, además de haberse desarrollado de manera precoz en comparación con otras civilizaciones de América.

Proceso de prospección

Se realizó una serie de procesos preliminares a fin de hallar los resultados completos deseados, y con la necesidad de cumplir con un método científico.

En este sentido, el primer proceso llamado por Shady “prospección”, se dividió a su vez en varias etapas: la primera consistió en la recopilación de información bibliográfica como, por ejemplo, investigaciones previas arqueológicas, catastros rurales y urbanos.

Se adjuntó una colección de fotos e imágenes aéreas y satelitales. La segunda etapa consistió en un extenso trabajo de campo con la utilización de equipos completos topográficos, evidencia arqueológica, estados actuales y afectaciones.

El equipo de Ruth Shady tomó registros de la arquitectura existente del lugar, así como petroglifos. Ubicaron además canteras, arcilla y ríos que, según Shady, fueron igualmente aprovechados por las civilizaciones antiguas.

Proceso de excavación e información

Tras el proceso de prospección, le siguió la excavación arqueológica con el fin de recuperar evidencias que no se puedan observar de primera mano en la superficie.

Para la recuperación de las evidencias del área de Caral, Shady insistió en la necesidad del registro meticuloso durante todo el procedimiento, como, por ejemplo, de la arquitectura arqueológica.

En este caso se logró una interpretación de los materiales y las características estructurales de las edificaciones.

Finalmente, hizo hincapié en el conocimiento pleno de dicha arquitectura para comprender la manera en la que deben conservarse.

Tras recopilar todos los datos de campo, se establecieron conclusiones en informes especializados, libros y artículos científicos.

Además, se emplearon programas de computadora especializados en gráficos, procesamientos topográficos, arquitectónicos, de volúmenes y superficies.

Referencias

  1. Ruth Shady (n.d.). Tomado de wikipedia.org
  2. ¿Quiénes somos? (n.d.). Tomado de zonacaral.gob.pe
  3. Investigaciones Arqueológicas (n.d.). Tomado de zonacaral.gob.pe