Historia

Constitucionalismo social: qué es, origen, características


¿Qué es el constitucionalismo social?

El constitucionalismo social es el resultado de las desigualdades económicas y la falta de derechos de gran parte de la población durante los siglos XIX y XX. A pesar de que el constitucionalismo liberal había promulgado la igualdad de los seres humanos, esta no se reflejaba en la sociedad de la época.

La Revolución industrial y el cambio del paradigma económico había supuesto una mayor creación de riqueza. Sin embargo, esta solo alcanzó a una parte de la población, mientras que se creaban bolsas de pobreza entre los trabajadores. Estos no contaban con casi ningún derecho laboral y quedaban a merced de los empresarios.

Con algunos antecedentes, como la Constitución surgida en Francia luego de la revolución de 1848 o, incluso, los avances sociales del II Reich en Alemania, no fue hasta la aparición de movimientos obreros organizados cuando la situación empezó a cambiar.

La destrucción generada por la I Guerra Mundial y el miedo al comunismo provocaron que los países comenzaran a dotar a sus constituciones de mecanismos de justicia social.

Así, se intentaba que nadie se quedara sin aspectos básicos como la sanidad, la educación o un trabajo digno.

Origen del constitucionalismo social

El constitucionalismo social se define como la ideología que defiende que el Estado intervenga políticamente en la economía y en la sociedad para que se lleven a cabo políticas sociales.

Estas pueden ir desde garantizar el acceso a la sanidad, hasta pagar un subsidio de desempleo, pasando por la educación gratuita y universal.

Antecedentes

La Revolución industrial surgida en la Inglaterra del siglo XVIII cambió la economía en casi toda Europa y en parte de América. La introducción de maquinaria aumentó enormemente la producción y la industria sustituyó a la agricultura como base de la economía.

En esos momentos empezaba también a extenderse el llamado constitucionalismo liberal. Este tenía como base principal la libertad del individuo frente a la acción del Estado.

Igualmente, establecía la igualdad de cada persona ante la ley. En términos políticos, supuso una mayor democratización, pero también ocasionó efectos negativos.

Los mayores perjudicados fueron los obreros y trabajadores. El constitucionalismo liberal no permitía, en principio, ninguna regulación de la economía. No existía normativa para los salarios, ni derecho a huelga, ni a beneficios sociales.

Se creó, de esta manera, una gran bolsa de pobreza, con muchos ciudadanos malviviendo aunque estuvieran trabajando.

Con la aparición de la ideología socialista y, después, comunista, los obreros comenzaron a organizarse. Su intención era mejorar sus condiciones laborales y vitales. También fue importantísimo el movimiento sindicalista, que tuvo una gran influencia en los países industrializados.

Este movimiento estaba enfocado en la reivindicación y mejora de las condiciones en las que trabajaban todos los obreros y empleados.

Este fue el germen del constitucionalismo social. Aunque existieron algunos antecedentes, los historiadores afirman que su primer ejemplo fue la Constitución surgida de la Revolución mexicana que comenzó en 1910.

Revolución francesa de 1848

Uno de los antecedentes lejanos fue la Constitución aprobada después de la revolución francesa de 1848. Una de las razones del estallido de esa revolución fue la aparición de demandas sociales, impulsadas por los primeros movimientos obreros.

Las reivindicaciones de la revolución tenían un claro componente social: nacionalización de la banca y las minas, derecho al trabajo o asegurar las condiciones mínimas de existencia. Muchas de esas medidas quedaron recogidas por la Constitución promulgada ese mismo año.

Siglo XX

Fue en el siglo XX cuando el constitucionalismo social se implantó en numerosos países. La Gran Depresión de 1929 y la Primera Guerra Mundial empobrecieron a millones de personas. Los distintos países se vieron obligados a actuar para proteger a los ciudadanos.

Otro acontecimiento que, de acuerdo a muchos historiadores, favoreció la expansión de este tipo de constitucionalismo fue la Revolución soviética y el comunismo.

Existía un miedo generalizado a que los trabajadores se unieran a esta ideología y se repitieran movimientos revolucionarios. La mejor manera de evitarlos era intentar mejorar sus condiciones de vida.

La Constitución mexicana de 1917, promulgada tras la victoria de los revolucionarios, está considerada como el primer ejemplo de constitucionalismo social. Sin embargo, la provincia de Mendoza, Argentina, ya había redactado una Carta Magna similar el año anterior.

En Europa los primeros ejemplos se dieron en Alemania. Tras la derrota en la Primera Guerra Mundial se constituyó la República de Weimar. Su Constitución de 1919 estableció derechos a los trabajadores.

En España destacó en este aspecto la Constitución de 1931, promulgada tras el establecimiento de la II República.

Derechos de los trabajadores

En todos estos textos se hacía especial hincapié en los derechos sociales, especialmente en el caso de los trabajadores.

Aunque existieron diferencias dependiendo del país, algunas de las leyes más comunes fueron las que limitaban la jornada de trabajo a 8 horas, la creación de seguros de enfermedad, maternidad y vejez, el derecho a huelga o la aparición de leyes que protegían los contratos laborales de los trabajadores.

Todas estas reformas no significaron que se entrara en un sistema socialista. Los derechos individuales continuaron siendo defendidos por el Estado, aunque quedaron subordinados al bien común.

Características del constitucionalismo social

Economía

El constitucionalismo social abogaba por la intervención del Estado en la economía. No se trataba, como en los sistemas socialistas, de planificarla, sino de corregir los excesos.

El primer paso fue legislar sobre los derechos sociales. A esto le siguió la regulación del funcionamiento de las empresas privadas, impidiendo la explotación de los trabajadores.

Igualmente, se creó una política de distribución de riqueza, usando los impuestos para conseguirlo. La base era que los más favorecidos pagaran más con el fin de que la sociedad se beneficiara en su conjunto.

Por último, también se reconoció el derecho a los trabajadores a organizarse, defender sus derechos y negociar directamente con los empresarios. La herramienta principal para hacerlo eran los sindicatos, que podían convocar huelgas legales.

Welfare State (Estado Benefactor)

La principal característica del constitucionalismo social es la pretensión de crear un Estado del Bienestar. Este concepto se define como la necesidad de que el Estado lleve a cabo políticas sociales para garantizar diversos derechos ciudadanos.

Entre los más importantes se encuentran el del acceso a la sanidad, la educación o a una paga por jubilación.

El Estado del Bienestar se debe encargar de proteger a los individuos menos favorecidos. Circunstancias como el desempleo, la enfermedad o una discapacidad estarían, de esta manera, cubiertas por el Estado y el ciudadano no quedaría desamparado.

Esto supone también obligaciones para los individuos. Entre ellas, la más importante es la de participar con sus impuestos en el mantenimiento de estas prestaciones sociales.

Creación de la OIT

Uno de los hitos en la historia del constitucionalismo social fue la creación de la Organización Internacional del Trabajo (OIT). Este organismo supranacional apareció en 1919 y está formado por gobiernos, sindicatos y empresarios.

Su función original era ayudar a los trabajadores del mundo a reclamar sus derechos, impulsando la inclusión de estos en las constituciones.

En los últimos años, finalizada la Guerra Fría y, con ello, el miedo al comunismo, la OIT ha señalado un retroceso en el Estado del Bienestar. Para mantenerlo, la organización pretende priorizar el cumplimiento de las Normas y Principios y Derechos Fundamentales en el Trabajo.

Estas normas están compuestas por ocho convenios fundamentales: libertad sindical, negociación colectiva, abolición del trabajo forzoso, abolición del trabajo infantil, eliminación de la discriminación en materia de empleo y ocupación.

Referencias

  1. Apuntes Jurídicos. ¿Qué es el Constitucionalismo Social? Obtenido de jorgemachicado.blogspot.com
  2. AulaDerecho. Constitucionalismo Social. Obtenido de auladerecho.blogspot.com
  3. O’Cinneidem, C. European Social Constitutionalism. Recuperado de papers.ssrn.com
  4. Bellamy, R. Constitutionalism. Obtenido de britannica.com
  5. Christine E. J. Schwöbel. Situating the debate on global constitutionalism. Obtenido de academic.oup.com