Antonio Nariño: biografía, estilo, obras, frases
Antonio Nariño (1765-1823) fue un militar y político colombiano que tuvo una importante participación en contra del dominio español durante en el proceso de independencia de la antigua Nueva Granada. Se inició en la política en sus años juveniles y ocupó diversos cargos públicos.
Nariño tuvo una amplia y destacada participación en el ámbito literario y periodístico de su época. Fue un colaborador consecuente del Papel Periódico de Santa Fe, en cuyas páginas publicó su ensayo Los frutos del árbol noble. En su casa estableció una especie de club al que denominó “Arcano de la Filantropía”.
La carrera militar de Antonio Nariño se desplegó por varios episodios históricos de Colombia. Comandó la conocida Campaña de Nariño en el Sur, la Batalla de los Ejidos de Pasto, entre otros sucesos.
El desempeño político-militar de este prócer ha sido homenajeado en muchas ocasiones y su legado de libertad continua vigente en los pueblos americanos.
Índice del artículo
- 1 Biografía
- 1.1 Nacimiento y familia
- 1.2 Estudios
- 1.3 Incursión en la política y la milicia
- 1.4 Vida personal
- 1.5 Entre la política y la literatura
- 1.6 Su casino literario
- 1.7 Publicación de la Declaración de los derechos del hombre
- 1.8 Exilio y retorno
- 1.9 Un tiempo en prisión
- 1.10 La Bagatela de Nariño
- 1.11 Nariño y su Campaña en el sur
- 1.12 Una confusión
- 1.13 Preso en el extranjero
- 1.14 De vuelta a las letras
- 1.15 En la nueva patria
- 1.16 En defensa propia
- 1.17 Últimos años y fallecimiento
- 2 Estilo literario
- 3 Obras
- 4 Frases
- 5 Referencias
Biografía
Nacimiento y familia
Antonio Amador José de Nariño y Álvarez del Casal nació el 9 de abril de 1765 en Santa Fe de Bogotá, Colombia, antigua Nueva Granada. El militar provino de una familia descendiente de españoles, culta y de buena posición socioeconómica. Sus padres fueron Vicente de Nariño y Vásquez y Catalina Álvarez del Casal. Fue el tercero de ocho hermanos.
Estudios
Los primeros años de formación educativa de Antonio Nariño estuvieron a cargo de sus padres, ya que por distintos quebrantos de salud no pudo asistir a la escuela regularmente.
En los años de infancia del prócer nació su gusto por la lectura. Luego de la preparación en manos de sus padres continuó su aprendizaje en el Colegio Mayor y Seminario de San Bartolomé, en la ciudad que lo vio nacer.
Incursión en la política y la milicia
La vida político-militar de Antonio Nariño comenzó en 1781 cuando apenas tenía dieciséis años, lo cual era común en el siglo XVIII. En ese tiempo encabezó una tropa de militares que debió detener el movimiento armado conocido como La rebelión de los comuneros. Allí fue testigo del asesinato del prócer independentista José Antonio Galán.
Vida personal
Nariño conoció a una joven llamada Magdalena Ortega y Mesa al comienzo de su carrera militar y política, con ella inició un noviazgo. En 1784 la pareja contrajo matrimonio y fruto del amor nacieron seis hijos: Gregorio, Francisco, Antonio, Vicente, Mercedes e Isabel.
Entre la política y la literatura
Después de un paréntesis amoroso, el joven Nariño formó parte activamente del acontecer político y literario de su nación. En 1789 ejerció como funcionario del Consejo de Indias en el cargo de alcalde de segundo voto. Luego fue administrador del arzobispado (entre 1791 y 1793) y también fue prefecto y regidor de provincia.
En aquella época comenzó a colaborar con el naciente medio impreso Papel Periódico de Santa Fe, cuyos principales lectores fueron los virreyes. El semanario sirvió de herramienta para que Nariño expusiera su pensamiento político. Fue así como el 25 de febrero de 1791 publicó su primer ensayo titulado Los frutos del árbol noble.
Su casino literario
Antonio Nariño sintió desde su niñez un gusto especial por las letras y la literatura. Así que a principios de 1794 pudo concretar el establecimiento de una especie de club-casino literario en su residencia en la plaza de San Francisco. La finalidad principal de dicho grupo fue la de compartir conocimientos, tanto literarios como políticos.
En el “Arcano de la Filantropía” (como Nariño nombró al casino literario) se reunieron importantes intelectuales de la época. Asistieron con frecuencia Francisco Antonio Zea, José María Lozano, Juan Esteban, José Antonio Ricaurte, Francisco Tovar y Joaquín Camacho. La escasez de medios impresos promovió reuniones constantes.
Publicación de la Declaración de los derechos del hombre
Nariño fue considerado uno de los principales forjadores de las ideas independentistas de Nueva Granada. Eso se debió a que a comienzos de 1794 tradujo e imprimió secretamente en su imprenta Patriótica el documento francés “Declaración de los derechos humanos”.
Luego de aquello Antonio Nariño fue descubierto y fue encarcelado en su ciudad natal el 29 de agosto de 1794. Un año después fue condenado al exilio por considerar la reproducción de aquel texto como delito de alta traición, por su parte el tribunal de la Santa Inquisición lo prohibió en todas las colonias de España.
Exilio y retorno
El militar fue castigado con el exilio en el continente africano y durante una parada que hizo en la ciudad española de Cádiz escapó de sus verdugos. Así que regresó a Bogotá de incógnito en 1797, sus familiares le pidieron que se entregase a las autoridades para procurar una baja de pena.
A finales del siglo XVIII Nariño se entregó a las fuerzas de seguridad del virrey Pedro Mendinueta. Estando tras las rejas Antonio convino con sus captores el proporcionarles información sobre la conspiración que él tramaba junto a otros compañeros en contra del virreinato español, esto a cambio de salir rápidamente de prisión.
Un tiempo en prisión
A pesar de que el militar colaboró con las autoridades, fue encarcelado por un tiempo más. En 1803 la autoridad virreinal le dictó régimen domiciliario y se fue con su familia a una propiedad en Santa Fe de Bogotá. Seis años después lo acusaron nuevamente de conspiración y lo enviaron a Cartagena.
Nariño permaneció un año encarcelado en Cartagena hasta que finalmente fue puesto en libertad en 1810. A finales de ese mismo año Antonio volvió a Santa Fe con el objetivo de integrarse al Congreso de las Provincias de Nueva Granada.
El Congreso de las Provincias comenzó sus actividades el 22 de diciembre de 1810, y Nariño ejerció como secretario principal.
La Bagatela de Nariño
El 14 de julio de 1811 Nariño fundó el periódico La Bagatela, el cual se opuso a las ideas federalistas de Jorge Tadeo Lozano. Antonio manifestó su pensamiento centralista en este semanario de corte político y tono satírico. Al mismo tiempo expresó su deseo de independencia de España, lo que le trajo serios problemas a la larga.
Los escritos de Antonio Nariño contra la figura de Lozano como presidente del Estado Independiente de Cundinamarca produjeron una revuelta social que lo despojó al político del cargo. Posteriormente el mismo Nariño se encargó de dirigir dicha región de la antigua Nueva Granada entre 1811 y 1813.
Nariño y su Campaña en el sur
La conocida Campaña de Nariño en el Sur se produjo en 1813, eran los tiempos de la guerra civil. El objetivo del prócer fue detener a las fuerzas españolas que pretendieron invadir a la nación comandadas desde Quito. Así que Antonio dejó a su tío Manuel Álvarez del Casal a cargó de la presidencia de Cundinamarca y emprendió la lucha.
Nariño y sus hombres se enfrentaron a los realistas dirigidos por Juan de Sámano, quien era catalogado como último virrey de Nueva Granada. Aquel sangriento encuentro llevó por nombre la “Batalla de los Ejidos de Pasto”. De forma precavida el prócer colombiano dejó a quinientos hombres de refuerzo ante cualquier eventualidad.
Una confusión
Nariño y una parte de sus soldados se escondieron para descansar durante la batalla, luego de haber luchado todo un día. Esa acción creó confusión en el resto de aliados que se mantuvo en combate, quienes se dieron por vencidos al no encontrarlos y se retiraron. Luego de ello Antonio Nariño salió a buscarlos y se dio cuenta de que estaba solo.
El 14 de mayo de 1814 Nariño se entregó a las fuerzas militares del español Melchor Aymerich. Aunque fue encarcelado recibió buenos tratos, algo que se debió a su rango militar y a su cargo como presidente de Cundinamarca. Los esfuerzos de Nariño por el armisticio (cese de la guerra) no fueron bien recibidos por los españoles que estaban en Quito.
Preso en el extranjero
Antonio Nariño permaneció un año preso en la población de Pasto. Luego de su breve estadía allí fue trasladado a Quito el 15 de julio de 1815 por órdenes de Toribio Montes, el entonces presidente de dicha región. Sus amigos intentaron liberarlo, pero sus esfuerzos fueron en vano.
Después de un tiempo en Quito, Antonio Nariño fue llevado a Lima para finalmente destinarlo a una cárcel en Cádiz, España. Allí permaneció recluido en una penitenciaría pública desde 1816 hasta el 23 de marzo de 1820, fecha en la que fue dejado en libertad.
De vuelta a las letras
Nariño estuvo un tiempo en Europa después de haber recuperado su libertad. El prócer pasó una temporada en la Isla de León, Cádiz, desde donde manifestó las acciones impropias del español Pablo Morillo entre 1815 y 1820. En ese tiempo redactó varios escritos bajo el pseudónimo de “Enrique Somoyar”.
Algunos de los textos que Antonio Nariño escribió en aquel entonces fueron: Cartas de un americano a un amigo suyo y Representación al rey de varios individuos americanos de Costa Firme y Suramérica residentes en Cádiz. El prócer no cesó en su proceso creativo y aprovechó cada instante para manifestar su pensamiento por medio de las letras.
En la nueva patria
El prócer regresó a su patria en febrero de 1821. En ese entonces eran los tiempos de la Gran Colombia, fundada en 1819 por el Congreso de la ciudad de Angostura. Simón Bolívar recibió a Antonio Nariño con los brazos abiertos y rápidamente lo nombró vicepresidente de la recién constituida nación.
Nariño participó en el Congreso Constituyente de Cúcuta en mayo de 1821 y en julio de ese mismo año renunció a sus funciones para poder llegar a la ciudad que lo vio nacer. En su ausencia el Congreso lo designó senador (para sesionar en Santa Fe), pero algunos políticos se opusieron y lo acusaron de varios delitos.
En defensa propia
Antonio Nariño cumplió su cometido de llegar a Santa Fe, y luego el Congreso entró en funcionamiento el 8 de abril de 1823. Aunque fue nombrado senador, no asistió a los debates porque estuvo preparando su defensa. Posteriormente el prócer hizo acto de presencia el 14 de mayo de ese año para liberarse de las acusaciones que le habían hecho.
Los delitos que se le imputaron a Antonio Nariño fueron el de deuda y mala administración del arzobispado de Santa Fe en 1794, y también rendición ante el enemigo en Pasto y ausencia sin motivo de su patria después de haber sido liberado en Cádiz. La defensa de Nariño fue sólida y el 20 de mayo fue absuelto de todos los cargos.
Últimos años y fallecimiento
La vida de Nariño estuvo marcada por importantes acciones político-militares, pero también por duros años de cárcel. A pesar de las circunstancias adversas, pudo regresar a su nación y limpiar su nombre de falsas acusaciones. No obstante, Antonio cayó enfermo después de sesionar por unos meses en el Congreso en 1823.
El político tomó la decisión de retirarse del Congreso y se fue a vivir a Villa Leyva (Boyacá) para mejorar su salud. Si bien tuvo mejorías, la tuberculosis prontamente comenzó a causar estragos. Antonio Nariño falleció el 13 de diciembre de 1823 a los cincuenta y ocho años de edad. Sus restos reposan en la Catedral Primada de Colombia.
Estilo literario
El estilo literario de Antonio Nariño se caracterizó por el uso de un lenguaje culto acorde con la época, además muy claro y preciso. En algunas ocasiones empleó un tono sarcástico e irónico para oponerse a ciertos temas. Este insigne colombiano escribió mayormente sobre política, en especial, sobre el virreinato español.
Obras
– Papel Periódico de Santa Fe. Colaborador y escritor.
– Los frutos del árbol noble. Ensayo (1791).
– Declaración de los derechos del hombre y el ciudadano (1793). Traducción y publicación.
– La Bagatela (1811). Periódico.
– Cartas de un americano a un amigo suyo (1820).
– Representación al rey de varios individuos americanos de Costa Firme y Suramérica residentes en Cádiz (1820).
– Toros de Fucha (1823). Periódico.
Breve descripción de algunas de sus publicaciones y obras
Traducción de la Declaración de los derechos del hombre y el ciudadano (1793)
Este texto traducido por Antonio Nariño se basó en el documento original creado en Francia el 26 de agosto de 1789. El contenido crítico y protestante de la Declaración de los Derechos… ante las injusticias y desigualdades que vivió una buena parte de los franceses, motivó al prócer colombiano a pasarlo al español y publicarlo en la antigua Nueva Granada.
El 15 de diciembre de 1793 Nariño logró publicar de manera secreta el documento, aun a sabiendas de que en territorios dominados por los españoles había sido censurado. La actividad clandestina de Antonio fue descubierta y por tal motivo fue encarcelado en agosto de 1794.
Contenido
El trabajo de traducción que realizó Antonio Nariño de este documento quedó para la historia. Por medio de él los ciudadanos de un territorio dependiente de los españoles entendieron que había un camino para alcanzar la libertad. Esa fue una de las razones por las que la Santa Inquisición lo prohibió.
El texto se refirió a la libertad del hombre desde su nacimiento, al derecho a la propiedad y a la seguridad. Explicó además los alcances de las leyes y la obediencia que todo ciudadano debía tenerle. Defendió además el derecho a la libre expresión de ideas y culto.
En los diecisiete artículos del escrito se exhortó a los gobiernos a proteger la integridad ciudadana.
Fragmentos de algunos artículos
– Artículo 1: “Los hombres nacen y permanecen libres, e iguales en derechos. Las distinciones sociales no pueden formarse sino sobre la utilidad común”.
– Artículo 3: “El principio de toda Soberanía reside esencialmente en la nación. Ningún cuerpo, ningún individuo puede exercer autoridad que no emane expresamente de ella”.
– Artículo 4: “La libertad consiste en poder hacer todo lo que no dañe a otro; así el exercicio de los derechos naturales de cada hombre no tiene más límites que los que aseguran a los otros miembros de la sociedad el goce de estos mismos derechos. Estos límites no se pueden determinar sino por la Ley”.
– Artículo 6: “La Ley es la expresión de la voluntad general. Todos los ciudadanos tienen derecho de concurrir personalmente…a su formación. Ella debe ser la misma para todos, sea que proteja, o que castigue. Todos los ciudadanos…son igualmente admisibles a todas las dignidades, puestos y empleos, sin otra distinción que la de sus talentos…”.
– Artículo 11: “La libre comunicación de los pensamientos y de las opiniones, es uno de los derechos más preciosos del hombre: todo ciudadano en su conseqüencia puede hablar, escribir, imprimir libremente; respondiendo sí de los abusos de esta libertad en los casos determinados por la Ley”.
La Bagatela (1811)
Fue un periódico de circulación semanal creado por Antonio Nariño el 14 de julio de 1811 en Santa Fe de Bogotá. La línea editorial de dicho medio impreso fue política. El militar aprovechó de exponer sus ideas en oposición al sistema federalista, y en especial en contra del político Jorge Tadeo Lozano, para entonces presidente de Cundinamarca.
Toros de Fucha (1823)
Fue otro de los periódicos creados por Antonio Nariño en Santa Fe de Bogotá. Su circulación se dio por primera vez el 5 de marzo de 1823 y su objetivo fundamental era defenderse de las acusaciones que le realizaron después de regresar de Cádiz.
Nariño aprovechó las páginas del medio impreso para realizar agudas críticas a algunos políticos, en especial a Francisco de Paula Santander. En este periódico hizo referencia a la frase “Patria boba” para explicar los hechos acaecidos en su nación entre 1810 y 1816, en cuanto al centralismo y el federalismo.
Fragmento del discurso de Antonio Nariño ante el Congreso. 14 de mayo de 1823
“Señores de la Cámara del Senado:
“Hoy me presento, Señores, como reo ante el Senado del que he sido nombrado miembro y acusado por el Congreso que yo mismo he instalado y que ha hecho este nombramiento; si los delitos de que se me acusa hubieran sido cometidos después de la instalación del Congreso, nada tendría de particular esta acusación…
“… Pero lejos de sentir este paso atrevido, yo les doy las gracias por haberme proporcionado la ocasión de poder hablar en público sobre unos puntos que daban pábulo a mis enemigos para sus murmuraciones secretas…hoy se pondrá en claro y deberé esto a mis enemigos… el poder hablar sin rubor de mis propias acciones.
“… Todo lo que he sacrificado por amor a la patria, se me acusa hoy, se me insulta, con estos mismos sacrificios, se me hace un crimen de haber dado lugar a la publicación de los Derechos del Hombre, a que se confiscaran mis bienes…Dudar Señores, que mis sacrificios han sido por amor a la Patria, es dudar del testimonio de vuestros propios ojos…”.
Frases
– “Que se diría de unos hombres que viendo asaltar su casa por los ladrones, se pusiera a disputar con sutilezas los derechos que cada uno tenía para vivir en esta sala o en la otra”.
– “Venero solo los gobiernos libres y extiendo mi atención, mi cortesía y urbanidad aún a mis mayores enemigos”.
– “Del que manda, el proceder a nadie nunca satisface, pues por rabia o por placer se le critica lo que hace y lo que deja de hacer”.
– “Vender mi patria a otra nación, sacarla de la dominación de España para entregarla al duro yugo de los ingleses, con otra religión, otro idioma y otras costumbres; eso era en mi concepto la acción más vil que podía cometer. Antes hubiera preferido la muerte que convenir con ello”.
– “De nada sirven los triunfos si la paz no los corona”.
– “No puede ser verdadero cristiano, el que no es un buen patriota”.
– “Sé que usted viene a matarme, y como es tan joven no quiero que le ocurra ningún daño. Por eso le entrego estas llaves para que después de que ejecute su propósito, tenga tiempo de huir por la ventana”.
– “Me habían dicho que debía matar a un tirano, no a un gran hombre”.“Dios mío, Dios justo a quien el hombre no puede engañar, yo te presento mi corazón; y estoy seguro de que a tus ojos no he delinquido. Diez y seis años de prisiones, que ahora se han renovado en diez y seis años de oprobio y miseria, no han sido bastantes para castigar el delito, el enorme delito de traducir e imprimir los derechos del hombre”.
– “Los tiranos aborrecen la luz y al que tiene los ojos sanos”.
Referencias
- Tamaro, E. (2019). Antonio Nariño. (N/a): Biografías y Vidas. Recuperado de: biografiasyvidas.com.
- Antonio Nariño. (2019). España: Wikipedia. Recuperado de: es.wikipedia.org.
- Alzate, F. (2008). Antonio Nariño y Los derechos del hombre y el ciudadano. Colombia: Psicología Social y Derechos Humanos. Recuperado de: psicosocialdh.blogspot.com.
- Giraldo, A. (2010). Don Antonio Nariño. Colombia: Abelardo Giraldo. Recuperado de: pinionabelardo.blogspot.com.
- Antonio Nariño. (S. f.). Cuba: EcuRed. Recuperado de: ecured.cu.