26 frases de corridos de artistas famosos

El corrido es un género musical propio de México que nació en el siglo XVIII. Los temas tratados en este género son variados: incluyen desde elementos de crítica social hasta canciones de amor.

Hemos realizado una recopilación de frases de corridos; encontrarás artistas como Ariel Camacho y los plebes del rancho, Pedro Infante, Chabela Vargas, El Coyote y su banda Tierra Santa, Calibre 50, Banda Machos, Los tigres del norte, Valentín Elizalde, entre otros.

-La banda norteña, los carros del año, las mejores plebes las traigo a mi lado, pura Buchanitan’s del sellito rojo, me gusta cumplir con todos mi antojos. Las playas, los discos y malecones, palenques y estampas han puesto millones, me sobran amigos por toditos lados, son gente muy buena de muy alto rango. –”El enamorado”, Los titanes de Durango.

-Se olvida que yo fui el hombre que una vez le dio la mano cuando en la lancha en que andaba se volcó y se andaba ahogando. –”Juan Ramos”, El Coyote y su banda Tierra Santa.

-Solo un balazo se oyó, la bala silbó en el viento, Reyes quiso disparar, pero falló en el intento. Muerto cayó el general, fue más veloz el sargento. –”El General y el Sargento”, Chalino Sánchez.

-Si quieren tumbar al jefe esperen su funeral, los puestos que algunos tienen no son fáciles de ocupar. Piensa bien en lo que tienes, no te dejes engañar, y no te pase algún día lo que a José y su carnal. –”Quisieron tumbar al jefe”, El Chapo de Sinaloa.

-Con un morral de bombillos voló al coronel Medina, pero para conseguirlo tuvo que ofrendar su vida. Con él se llevó el secreto de la codiciada mina. –”El espinazo del diablo”, Los tigres del norte.

-Emilio dice a Camelia: “Hoy te das por despedida, con la parte que te toca tú puedes rezar tu vida, yo me voy para San Francisco con la dueña de mi vida”. –”Contrabando y traición”, Los tigres del norte.

-Se oyen corridos, se oye la banda y un acordeón se escucha sonar, se escuchan gritos de alegría, gritan arriba “mi Culiacán”, vayan alistando ya las trocas, a las plebitas hay que llamar. –”La plebada de Culiacán”, Fusión norteña.

-Puente que va a tierra blanca, tú que lo viste pasar, recuérdales que a Lamberto nunca se podrá olvidar, yo por mi parte aseguro que hace falta en Culiacán. –”Lamberto Quintero”, Cadetes de Linares.

-Soy el jefe de jefes, señores, me respetan a todos niveles, y mi nombre y mi fotografía nunca van a mirar en papeles, porque a mí el periodista me quiere, y si no mi amistad se la pierde. –”Jefe de jefes”, Los tigres del norte.

-Perro que ladra no muerde, eso téngalo presente. Si de veras me traen ganas, de uno por uno y de frente, no dejen que sus palabras se las lleve la corriente. –”Para morir nací”, Valentín Elizalde.

-Me dieron gato por liebre, como lo dice mi apá, yo creo que no me entendieron aquella clave especial, yo esperaba los paquetes que produce Bogotá. –”Gato por liebre”, El chapo de Sinaloa.

-Ya se murió el Gato Félix, ya lo llevan a enterrar, será uno más en la lista de valientes periodistas que así han querido callar. –”El Gato Félix”, Los tigres del norte.

-Siguen ladrando los perros, señal de que voy avanzando, así lo dice el refrán para aquellos que andan hablando de la gente que trabaja y que no anda vacilando. Al que no le vino el saco pídalo a su medida, conmigo no andan jugando, pa’ que se arriesgan la vida. –”A mis enemigos”, Valentín Elizalde.

-Muchos se dicen amigos, entre cervezas y copas. Me rodeé de muchos socios, dinero y cosas lujosas, sin saber que en el paquete venía la gente envidiosa. –”El corrido de la roca”, Ariel Camacho y los plebes del rancho.

-Por algo es una leyenda, imposible de atrapar, dicen que escapó por tierra, otros que se fue por mar. Él les sigue dando guerra, no lo busquen por la paz, se quedaron a tres pasos, a tres pasos de Guzmán, lo buscaban en los cabos y él ya estaba en Culiacán. –”Se quedaron a tres pasos”, Calibre 50.

-Cumplida su hazaña se fue a Rosarito, y no quiso echarse hasta ver Ensenada. Este fue el corrido del caballo blanco, que salió un domingo de Guadalajara. –”El caballo blanco”, Lola Beltrán.

-Les dijo Ramiro Sierra: “aquí no se engaña nadie, yo solo vine a cobrarles la muerte de mi compadre, y a recoger el ganado que le robaron, cobardes. –”Ramiro Sierra”, Los tigres del norte.

– Se escuchó un fuerte estallido, y una sirena lloraba, era el de una ambulancia que con el carro chocaba, y después de la explosión, de Lupe nada quedaba. –”El corrido de Lupe García”, Banda Machos.

-“Viejo, no te imaginas con quién estas tratando”, dijo el hombre emperrado y con una pistola. Apuntó a Feliciano: “si te encuentro mañana, mañana sí te mato”. –”Corrido de Feliciano”, Calibre 50.

-Dieron muerte, no le dieron tiempo a nada, ya sabían que era valiente, le pusieron la emboscada para poder darle muerte. A Javier el valor le sobraba porque era del mero norte. –”El federal de caminos”, El Coyote y su banda Tierra Santa.

-No tarde pa’ dar con ellos, y esa deuda fui a cobrar, dije de una vez al cuello, por bravo ese perro lo voy amarrar. –”El karma”, Ariel Camacho y los plebes del rancho.

-Era alto y bien dado, muy ancho de espaldas, su rostro mal encachado, su negra mirada un aire le daba al buitre de la montaña. Gabino Barrera dejaba mujeres con hijos por donde quiera. –”Gabino Barrera”, Chabela Vargas.

-Vuelen, vuelen, gavilanes, a pelear por la razón, no es vergüenza ser bandido si se roba al que es ladrón. Vuelen, vuelen, gavilanes, y no dejen de pelear, que la suerte de los pobres en sus manos va a quedar. –”Gavilanes”, Pedro Infante.

-No soy un rebelde, conservo el respeto que le tengo a los señores. Los grandes de arriba están muy conscientes de todas mis decisiones. De veras me estiman, pues soy de su gente, aunque soy independiente. –”El corrido del Dorian”, Ariel Camacho y los plebes del rancho.

-Cien mil dólares fue el trato por permanecer callados, tenían que burlar los migras, y a los perros inyectaron, les pasaron una dosis y perdieron el olfato. –”El amo”, El Coyote y su banda Tierra Santa.

-El que no arriesga no gana, no crean que fue tan pelada. Dormías, yo me desvelaba; divertías y yo trabajaba, con la camisa empapada de sudor lágrimas derramaba. –”Comencé de cero”, Calibre 50.