Cultura Tumaco-La Tolita: qué es, características, cerámica, ubicación
¿Qué es la cultura Tumaco-La Tolita?
La culturaTumaco-La Tolita fue una sociedad indígena de la época precolombina, la cual se desarrolló desde el área isleña de La Tolita en Ecuador hasta Tumaco, en Colombia. Existieron desde el año 600 a. C. hasta el año 200 de nuestra era; se desarrolló y alcanzó su máxima expresión cultural antes de la llegada de los incas a este territorio.
Se caracterizaron por ser una sociedad que se basaba en el culto ceremonioso y con un ojo artístico que otras civilizaciones de América no alcanzaron a tener. El arte de la civilización Tumaco-La Tolita es considerado uno de los más desarrollados de toda la etapa precolombina de América.
Los descubrimientos arqueológicos que se han hecho en la región abarcan una gran cantidad de estilos, entre los que destacan las figuras de oro y máscaras con características antropomórficas.
Según descubrimientos realizados, es posible determinar que esta cultura tenía una organización social que giraba en torno al arte y a las ceremonias religiosas.
Características generales
Economía
La economía de esta civilización giraba en torno a la agricultura, como era común para las tribus americanas de la época. A partir de los productos cosechados se desarrolló su sistema de intercambio de bienes; particularmente se cosechaba maíz y casabe.
El maíz era una de los alimentos más comunes en el territorio americano y, además, el alimento más fácil de cultivar.
Sin embargo, los habitantes de esta civilización también acostumbraban a practicar la caza para obtener alimentos. Por otro lado, dada su gran cercanía con el mar, la pesca era una de las formas más factibles de obtener alimento de manera casi ilimitada.
Sociedad
La sociedad de esta región solía dividirse según el rango social que ocupara cada uno de sus habitantes. Cabe destacar que esta forma de organizarse es la que utilizaban las sociedades de esta región en general, pero cada poblado específico presentaba características particulares.
Este tipo de división traía consigo una estratificación según el tipo de profesión que ejerciera cada habitante de la cultura. Del lado bajo del estrato social se encontraban los granjeros, los artesanos y quienes trabajaban el oro; dichos oficios eran vistos como profesiones básicas.
En la alta sociedad se encontraban los jefes tribales, los caciques y los diversos gobernadores regionales. Cada centro urbano de la zona que ocupaba esta civilización tenía un líder diferente, y actuaban de manera independiente los unos de los otros.
Artesanía y orfebrería
La artesanía era una de las expresiones culturales más populares en la cultura Tumaco-La Tolita. De hecho, la artesanía en todas sus formas es lo que separaba a esta civilización del resto de las tribus de la misma región. Sus técnicas eran bastante avanzadas para la época y las obras que creaban tenían una significación social profunda.
La orfebrería también era una práctica bastante popular para la sociedad de esta cultura. Trabajaban con el oro principalmente, lo que dio cabida al hallazgo de una gran cantidad de figuras de alto valor en los sitios arqueológicos de estas regiones de Colombia y Ecuador.
A través de la orfebrería y de la artesanía, la cultura Tumaco-La Tolita expresaba su diversidad cultural y recreaba símbolos sociales y religiosos que identificaban a su sociedad.
También creaban figuras con significación erótica, las cuales hacían referencia a los diversos rituales de fertilidad que esta civilización acostumbraba a llevar a cabo con frecuencia.
Cerámica
Las creaciones de cerámica de esta cultura presentaban elementos relacionados con su sociedad. En muchos casos se representaban figuras que jugaban un papel religioso, pero también era común la elaboración de estatuas fisionómicamente similares a los habitantes de la civilización.
La cerámica de esta civilización era de muy buena elaboración, lo que la ayudó a aguantar positivamente el paso del tiempo. Se utilizaba para la elaboración de muchos objetos, incluyendo artefactos que los habitantes de la región utilizaban en su vida cotidiana.
Además, las herramientas de cerámica se utilizaban en la elaboración de estructuras, para piezas de rituales y ceremonias religiosas.
Máscaras
La importancia de las máscaras reside en su manera detallada y original de trabajar el oro y la plata, reflejando a su vez la alta jerarquía social al igual que la intensidad de su vida religiosa y ceremonial.
Generalmente, las marcarás estaban hechas de oro y tumbaga. Sus dimensiones se aproximan a 17.5 cm de longitud y 13.6 cm de ancho.
Hay varias esculturas talladas, las más comunes tenían la forma de una cabeza humana, con detalles redondos y la parte superior cortada de manera horizontal. Algunas veces tenían los ojos y la boca abierta.
Eran figuras simples, pero laboradas minuciosamente y con detalles muy variados dependiendo de las piezas.
Debido al robo de los cazadores y tráfico de artefactos arqueológicos que se ha gestado en los últimos siglos, del total de las 40 tolas (pampas de oro) de las que se conocía su existencia en la isla de La Tolita, solo quedan 16.
Los Tumaco fueron hábiles ceramistas y están considerados como una de las mejores culturas alfareras del continente Americano.
En las cerámicas de Tumaco podemos ver representados varios aspectos de índole cotidiano y religioso, como el tema de la maternidad, las mujeres, el erotismo, las enfermedades y la vejez.
Ubicación
El nombre de esta cultura puede variar, dependiendo del tipo de fuente de la cual se obtenga la información. Algunos registros arqueológicos se refieren a esta cultura como La Tolita, mientras que otros hablan de la cultura Tumaco. Ambos conceptos son correctos; la región ocupada por esta civilización es más compleja de lo que el término original sugiere.
La cultura Tumaco-La Tolita no era homogénea en su totalidad. Esta civilización en realidad es un grupo de diversas sociedades pequeñas que tenían características muy similares entre sí. Estas ocupaban la región de La Tolita, Monte Alto, Selva Alegre, Tumaco y Mataje. El crecimiento poblacional de estos grupos dio origen a la cultura.
Es decir, el espacio territorial que llegó a abarcar esta cultura es más grande de lo que su nombre aparenta. En su totalidad, la cultura se extiende desde Esmeraldas (un río ubicado en Ecuador) hasta Calima, en Colombia.
Sin embargo, por fines prácticos se hace referencia en su nombre a los grupos poblacionales y culturales más importantes, ubicados en Tumaco y La Tolita.
Religión
Como era de costumbre para la mayoría de las tribus sudamericanas de la época, la cultura Tumaco-La Tolita presentaba una religión exclusivamente politeísta. También creían en el animismo y las almas formaban una parte crucial de su cultura religiosa.
Los chamanes jugaban un rol importante dentro de la religión de esta civilización. Se llevaban a cabo una serie de cultos, los cuales estaban inspirados casi en su totalidad por animales y criaturas de la naturaleza. Era común utilizar al jaguar, al águila o al caimán como especies para rendirles culto, pues se creía que representaban a deidades en la Tierra.
Los chamanes actuaban también como sacerdotes dentro de la cultura religiosa de esta civilización. Esta actividad sacerdotal era bastante amplia y se edificaban estructuras de gran tamaño para que sirviesen como centros de culto, los cuales eran presididos por los chamanes de la sociedad.
En los rituales era común utilizar sustancias alucinógenas, como hongos, que se encontraban en la misma región ocupada por esta civilización.