Generación del 98: contexto histórico, características, autores, obras
¿Qué es la Generación del 98?
Con el título de Generación del 98 se ha englobado a un grupo de narradores, poetas, dramaturgos y ensayistas españoles, nacidos entre 1864 y 1875, y que comenzaron a publicar alrededor de 1900.
Esta generación se vio profundamente afectada por la guerra hispano-estadounidense, que conllevó la pérdida de Cuba, Puerto Rico y Filipinas, y por la lucha entre una España tradicional y una moderna que pugnaba por salir.
En palabras de Azorín: “Sentíamos el destino infortunado de España, derrotada y maltrecha, más allá de los mares, y nos prometíamos exaltarla a nueva vida. De la consideración de la muerte sacábamos fuerzas para la venidera vida. Todo se enlazaba lógicamente en nosotros: el arte, la muerte, la vida y el amor a la tierra patria”.
Se consideran representantes de esta generación a Azorín, Pío Baroja, Miguel de Unamuno, Manuel y Antonio Machado, Ramón del Valle-Inclán, Ramiro de Maeztu, Jacinto Benavente y Vicente Blasco Ibáñez, entre otras figuras destacadas.
Algunos críticos incluyen, por coincidir generacionalmente, a las escritoras Carmen de Burgos, Concha Espina y Consuelo Álvarez Pool.
Origen y contexto histórico
Entre 1876 y 1900 España vivió un período en el que convivieron la vieja España imperial, otra que buscaba la estabilidad política y por último, una que intentó un ingreso al europeísmo y la modernidad democrática.
Además, la guerra hispano-estadounidense supuso la pérdida en 1898 de gran parte de las colonias de ultramar (Cuba, Puerto Rico, Filipinas, Guam).
La generación que creció en este contexto comenzó a preguntarse por la naturaleza de su país, por lo que era y por lo que debería ser.
Esta generación de escritores y académicos se reunió en torno al llamado “Grupo de los tres”, integrado por Pío Baroja, Azorín y Ramiro de Maeztu, al que se irán aproximando otros autores en tertulias realizadas en cafés y cervecerías de Madrid.
Características de la generación del 98
Relación con las corrientes literarias
Los escritores de la generación del 98 no pertenecen a una sola corriente literaria, mantienen una gran proximidad con el modernismo, pero también practican el realismo y hasta el naturalismo.
Innovaciones formales
Los escritores de la generación del 98 intentan renovar los géneros literarios, como en el caso de Unamuno y la “nivola”, el “esperpento” en el teatro de Valle-Inclán o Azorín y la novela impresionista.
Los autores de esta generación se interesan por el lenguaje de la calle y por las palabras tradicionales.
Castilla y el Quijote
Hay un renovado interés por la historia de España, por los pueblos y escenarios de Castilla, y en especial por la figura del Quijote como símbolo de lo esencial español.
Las dos Españas
La impresión de vivir entre dos Españas, una sumida en la miseria, inquieta, y otra oficial, vacua y adormecida, presente en muchos autores de esta generación puede expresarse con estos versos de Antonio Machado:
Ya hay un español que quiere
vivir y a vivir empieza,
entre una España que muere
y otra España que bosteza.
Influencias filosóficas
Esta generación se aproxima e introduce en España a los principales filósofos del irracionalismo europeo: Friedrich Nietzsche, Arthur Schopenhauer, Sören Kierkegaard y Henri Bergson. Pero también hay un renovado interés por el espiritualismo cristiano.
El subjetivismo y la actitud crítica
En los escritores de esta generación, incluso entre los ensayistas, hay una fuerte perspectiva subjetiva, y un marcado estilo personal. También predomina una visión crítica y hasta pesimista de la realidad española.
Publicaciones periódicas
Sus textos verán la luz en distintas revistas y publicaciones de la época: Don Quijote (1892-1902), Germinal (1897-1899), Vida Nueva (1898-1900), Alma Española (1903-1905), etc.; y sobre todo en novelas, ensayos, poemas y piezas teatrales.
Temas frecuentes
Lo existencial
Para los autores de la generación del 98 los temas existenciales cobran especial relevancia: la existencia de Dios, la soledad del ser humano y el sentido de la vida son temas recurrentes, teñidos a menudo de pesimismo y melancolía. Destacan en torno a estos temas las voces de Miguel de Unamuno y Antonio Machado.
Lo social y político
Todos los autores de esta generación se preocupan por la situación de España, debatiéndose entre la monarquía y la república, entre la pobreza y el conservadurismo, y entre la tradición y la modernidad.
España
España está siempre presente en la ficción, la poesía y en los ensayos de esta generación, tanto su historia como su paisaje, con especial énfasis en el paisaje castellano y la figura del Quijote como símbolo de la modernidad.
Representantes y obras
Miguel de Unamuno (Bilbao, 1864-Salamanca, 1936)
Escritor, filósofo, académico y político, fue rector de la Universidad de Salamanca y diputado en la Segunda República. Entre sus obras destacan las novelas Niebla (1914) y La tía Tula (1927), y en sus ensayos Del sentimiento trágico de la vida (1912) y La agonía del cristianismo (1925). También escribió poesía y teatro.
Ramón del Valle-Inclán (Villanueva de Arosa, 1866-Santiago de Compostela, 1936)
Dramaturgo, poeta y novelista, es considerado uno de los autores más importantes de la literatura española. Ejerció también la crítica literaria y el periodismo.
Es autor de una extensa obra teatral y novelística que conformó en series, como las Comedias bárbaras (1906-1922), el Retablo de la avaricia, la lujuria y la muerte (1927), y Martes de carnaval. Esperpentos (1930).
De su extensa obra narrativa podemos mencionar Tirano Banderas. Novela de tierra caliente (1926), y las series El ruedo ibérico (1927-1958).
Carmen de Burgos Seguí (Almería, 1867-Madrid, 1932)
Escritora, periodista, traductora y activista por los derechos de la mujer, conocida por usar varios seudónimos, entre los que más se recuerda “Colombine”. Es considerada la primera periodista profesional española, y también la primera corresponsal de guerra.
Realizó una extensa e intensa labor periodística y ensayística, orientada en gran parte a promover el feminismo. Destacan sus ensayos La mujer en España (1906) y La misión social de la mujer (1911), así como su novela Puñal de claveles (1931).
Pío Baroja (San Sebastián, 1872-Madrid, 1956)
Novelista y dramaturgo, Pío Baroja estudió medicina, pero pronto abandonó el ejercicio como médico para dedicarse a la literatura. Autor de una extensa obra novelística, entre ellas destacan El árbol de la ciencia (1911), El laberinto de las sirenas (1923) y Las noches del Buen Retiro (1934).
Azorín (Monóvar, 1873-Madrid, 1967)
José Martínez Ruiz, mejor conocido por su seudónimo Azorín, como otros integrantes de su generación incursionó en varios géneros: la novela, el ensayo, la crónica periodística, el teatro y la crítica literaria.
Publicó dieciséis novelas, entre las que destacan: Don Juan (1922), Doña Inés (1925), Superrealismo (1929) y Pueblo (1930).
Antonio Machado (Sevilla, 1875-Colliure, Francia,1939)
Con versos de corte modernista, luego simbolista y finalmente profundamente originales, Machado es considerado uno de los grandes representantes de la poesía castellana.
Su obra está recogida en libros como Soledades. Galerías. Otros poemas (1907), Campos de Castilla (1912) y Poesías completas (1917). En este último se encuentran sus famosos “Proverbios y cantares”.