Congreso de Cúcuta: participantes, reformas y consecuencias
El Congreso de Cúcuta fue una asamblea celebrada entre el 6 de mayo de 1821 y el 3 de octubre del mismo año. En ella participaron los diputados elegidos según el procedimiento marcado por el anterior Congreso de Angostura, en el cual se creó la República de Colombia.
Después de varios años de guerra contra las autoridades coloniales, Simón Bolívar había llegado a la conclusión de que la independencia solo sería posible cuando hubieran derrotado por completo a los españoles. Igualmente, buscó la manera de crear una nación fuerte para poder tener reconocimiento internacional.
Además de la formación de ese nuevo país, el Congreso promulgó la Constitución que debía regirlo. Durante las reuniones también se aprobaron varias leyes que mejoraban las condiciones de los indígenas y de los esclavos del territorio.
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El proyecto de unificar Venezuela y Nueva Granada ya había sido expresado por Bolívar años antes de que se celebrara el Congreso de Cúcuta. En 1813, después de la toma de Caracas, ya se pronunció en esa dirección. Dos años más tarde, en la Carta de Jamaica, el Libertador afirmaba:
“Yo deseo más que otro alguno ver formar en América la más grande nación del mundo, menos por su extensión y riqueza que por su libertad y gloria»… «…la Nueva Granada se unirá con Venezuela, si llegan a formar una república central. Esta nación se llamará Colombia, como un tributo de gratitud al creador del Nuevo Hemisferio.”
En esos años, en plena guerra contra los españoles, Bolívar tuvo que dejar de lado su proyecto. Se dedicó a organizar el Estado y centrarse en el conflicto.
A principios de 1814, además, la situación dio un vuelco. Los españoles empezaron a contraatacar en Los Llanos venezolanos. Las tropas de Bolívar se vieron superadas y tuvieron que retirarse hacia el Oriente del país.
Esto conllevó un gran movimiento de población desde Caracas hacia Oriente, huyendo de los realistas. El 17 de agosto de 1814 Bolívar fue derrotado en Aragua de Barcelona y debió unirse a Mariño en Cumaná.
La Segunda República de Venezuela fue, así, derrotada. Bolívar pasó un tiempo en Nueva Granada y comenzó a planear sus siguientes pasos.
Durante esos meses, llegó a la conclusión de que tenía que derrotar totalmente a los españoles si quería conseguir la independencia definitiva. Además, comprendió que los caudillos regionales perjudicaban su causa y que era necesario unificar todas las tropas bajo un mando único. Una única república grande y fuerte era, para él, la mejor solución.
En 1819 se celebró el denominado Congreso de Angostura. En esa reunión se promulgó la Ley Fundamental, mediante la que se otorgó legalidad a la República de Colombia. Igualmente, se convocó un Congreso General a celebrar en Villa del Rosario de Cúcuta dos año más tarde, en 1821.
El decreto de convocatoria del Congreso de Cúcuta señalaba la manera de elegir a los diputados que debían asistir. Se decidió que cada provincia libre tenía que elegir 5 diputados, hasta llegar a los 95.
Las elecciones fueron celebrándose en varias fechas diferentes. Entre los elegidos se encontraban algunos políticos experimentados, pero la mayoría eran bastante jóvenes y sin experiencia previa.
En el aspecto bélico, el enfrentamiento decisivo tuvo lugar el 7 de agosto de 1819. Fue la llamada Batalla de Boyacá y terminó con la victoria de Bolívar y sus revolucionarios. Al enterarse el Virrey del resultado de esa batalla, huyó de Bogotá. El 10 de agosto, el Ejército Libertador entró sin oposición en la capital.
Según los cronistas, la organización del Congreso de Cúcuta no resultó sencilla. Aparte de que la guerra todavía continuaba en partes del país, algunos diputados tuvieron problemas para alcanzar la ciudad.
Además, se produjo el fallecimiento de Juan Germán Roscio, vicepresidente de la República y encargado de organizar el Congreso. Bolívar nombró para sustituirlo a Antonio Nariño, quien debió tomar la decisión de legalizar que la asamblea comenzar con los 57 diputados presentes. La inauguración fue el 6 de mayo de 1821, en la Villa del Rosario de Cúcuta.
Aún con el Congreso en marcha, tuvo lugar la Batalla de Carabobo. Ese enfrentamiento, desarrollado el 24 de junio, significó la independencia oficial de Venezuela. Representantes de ese país se unieron a los trabajos constitucionales que se desarrollaban en Cúcuta.
Según lo acordado en Angostura, debían haberse elegido a 95 diputados para el Congreso de Cúcuta. Sin embargo, la dificultad de las comunicaciones, la guerra en algunas zonas y otras circunstancias provocaron que solo acudieran 57.
La mayoría de ellos eran jóvenes que participaban en política por primera vez. Otros, en cambio, tenían ya experiencia en la administración pública. Entre los elegidos había profesionales del derecho, miembros del clero o militares.
Simón José Antonio de la Santísima Trinidad Bolívar Palacios Ponte y Blanco, conocido como Simón Bolívar, nació en Caracas el 24 de julio de 1783.
Su lucha por la independencia hizo que le fuera otorgado el título honorífico de El Libertador. Fue el fundador de la República de la Gran Colombia y de Bolivia, siendo Presidente de la primera.
Francisco de Paula Santander fue natural de Villa del Rosario de Cúcuta. Nació el 2 de abril de 1792 y tomó parte de la guerra de independencia colombiana. Bolívar lo ascendió a jefe del Estado Mayor de su ejército hasta la independencia de la Gran Colombia.
Santander ocupó la vicepresidencia del país por el departamento de Cundinamarca (Nueva Granada), ejerciendo las funciones de presidente cuando Bolívar se encontraba en el frente bélico. Después del Congreso de Cúcuta, fue confirmado como Vicepresidente de la recién creada Gran Colombia.
Antonio Nariño nació el 9 de abril de 1765 en Santa Fe de Bogotá. Participó de forma destacada en la lucha contra las autoridades del Virreinato de Nueva Granada por la independencia.
Después de varios años preso, Nariño volvió a América poco antes de la celebración del Congreso de Cúcuta. Allí sustituyó al fallecido Vicepresidente Juan Germán Roscio como organizador de las reuniones.
El Congreso de Cúcuta aprobó la reunificación de Nueva Granada y Venezuela. Algo después, Ecuador se unió a esta nueva república.
Los participantes en el Congreso también trabajaron en la redacción de una constitución para la Gran Colombia. Esta Carta Magna se promulgó el 30 de agosto de 1821 y contaba de 10 capítulos y 190 artículos.
Aparte de la Constitución, el Congreso aprobó varias reformas que consideraban urgentes. Fueron, de manera general, medidas liberales que buscaban mejorar los derechos de indígenas, esclavos y de los ciudadanos en general. Igualmente, se buscó limitar el poder de la Iglesia.
La Ley de Manumisión fue el primero decreto surgido del Congreso de Cúcuta. Se trató de una ley de libertad de vientres que establecía que los recién nacidos de madres esclavas quedarían libres al alcanzar una edad específica.
En el aspecto económico, el Congreso confirmó la eliminación de los resguardos. De igual forma, reformó el sistema fiscal impuesto por las autoridades coloniales, eliminó la alcabala y abolió el tributo a los indígenas.
El Congreso declaró a los indígenas como ciudadanos iguales en derecho. Esto supuso que, si bien se eliminó el tributo especial que tenía que pagar durante la colonia, pasaron a estar obligados a abonar el resto de las tasas de las que antes estaban exentos.
Los diputados reunidos en Cúcuta trataron de reducir el poder político y económico de la Iglesia católica. Para ello, liquidaron los monasterios que tuvieran menos de 8 residentes y confiscaron sus posesiones.
Sin embargo, dado el apoyo con el que la Iglesia contaba a nivel popular, los bienes confiscados se destinaron a la educación secundaria en el país, controlada por el clero.
Otra medida relacionada con la Iglesia fue la abolición de la Inquisición. Igualmente, se abolió la censura previa que se aplicaba a las publicaciones religiosas.
Con el Congreso de Cúcuta nació oficialmente la Gran Colombia. Esta, en ese momento, comprendía los territorios de Nueva Granada y Venezuela. Esta unificación se consideró fundamental para derrotar a los focos de resistencia españoles en la zona.
La república de Gran Colombia existió desde 1821 hasta 1831. Ya en el Congreso de Angostura, celebrado en 1819, se promulgó un ley que anunciaba su nacimiento, pero no fue hasta el Congreso de Cúcuta cuando se fundó legalmente.
En ese mismo Congreso se redactó y aprobó la Constitución del nuevo país. En esta se regulaba su funcionamiento y se describía cómo iba a ser regida, sus instituciones y se señalaba que su sistema administrativo sería el centralismo unitario.
Los promotores de la Gran Colombia, comenzando por Simón Bolívar, confiaban que los países europeos reconocieran rápidamente el país. Sin embargo, sus expectativas no se cumplieron. Así, por ejemplo, Austria, Francia y Rusia anunciaron que solo reconocerían la independencia si se establecía una monarquía.
Algo más aceptación encontraron en el continente americano. El futuro presidente estadounidense John Quincy Adams afirmó que la Gran Colombia tenía potencial para convertirse en una de las naciones más poderosas del mundo.
Simón Bolívar fue proclamado presidente de la Gran Colombia. Como vicepresidente se eligió a Francisco de Paula Santander.
Una de las cuestiones más polémicas que se dirimieron en el Congreso de Cúcuta fue la forma administrativa del nuevo estado. Durante la guerra ya habían aparecido tensiones entre los federalistas y los centralistas y la unificación entre Nueva Granada y Venezuela complicó aún más el asunto.
En líneas generales, los representantes llegados desde Venezuela se posicionaron a favor de las tesis centralistas, ya que las experiencias previas en su país les hacía desconfiar de la opción federal. Los diputados más jóvenes de Nueva Granada, de ideología liberal, también preferían un estado centralista.
Por otra parte, en el Congreso se tuvo muy en cuenta que España todavía trataba de recuperar el control de sus colonias. Los diputados consideraron que centralizar el poder era la mejor opción para combatir a los realistas.
La Gran Colombia llegó a ampliarse cuando Ecuador y Panamá se unieron a ella. Sin embargo, las tensiones federalistas, la dictadura establecida por Simón Bolívar, primero, y las de Sucre y Rafael Urdaneta, después, así como la guerra con Perú, provocaron la disolución del país.
Ecuador, Venezuela y Panamá decidieron romper la unión en 1830. En consecuencia, los dos primeros pasaron a ser estados independientes. Panamá, por su parte, sufrió una serie de regímenes militares que no desarrollaron a organizar las instituciones propias de un Estado.
El 20 de octubre de 1831 se creó legalmente el estado de Nueva Granada. Su primer presidente fue Francisco de Paula Santander.
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