Biografías de personajes históricos

Mijaíl Bakunin: biografía, pensamiento, teorías, obras


Mijaíl Bakunin (1814–1876) fue un teórico político, escritor, filósofo y anarquista revolucionario de origen ruso. Es reconocido por ser el fundador del anarquismo colectivista y uno de sus principales difusores del siglo XIX. Es considerado además uno de los activistas e ideólogos más famosos de Europa, destacando su prestigio e influencia entre los radicales de dicho continente, además de Rusia.

Su oposición a la doctrina de Marx y al socialismo científico dividió las alas anarquistas y marxistas del movimiento socialista revolucionario, incluso muchos años después de su muerte. Se dice que su vida y personalidad inspiró a escritores destacados como Fiódor Dostoyevski, Iván Turguénev, Lucien Descaves y Maurice Donnay.

Índice del artículo

Biografía

Primeros años

Mijaíl Aleksándrovich Bakunin nació el 30 de mayo de 1814 en Pryamújino, una aldea del distrito de Torzhok, provincia de Tver, al norte de Rusia. Era de origen noble, el primogénito de un terrateniente de ideas liberales, que había sido diplomático en París durante la toma de la Bastilla.

Durante su adolescencia, a los catorce años, fue a San Petersburgo para recibir entrenamiento militar en la Universidad de Artillería. Allí pasó tres años entre amigos, bebida y deudas, hasta que lo expulsaron por comportamiento indisciplinado.

En 1834 fue comisionado como suboficial de la Guardia Imperial de Rusia y enviado a Minsk y Gardinas en Lituania, lo que es ahora Bielorrusia. Pero al año siguiente renunció a su comisión y se dirigió a Moscú a estudiar filosofía, en medio del romanticismo europeo.

Durante los años siguientes conoció a los socialistas Alexander Herzen y Nikolay Ogarev, con quienes entabló una relación de amistad. Estuvo seis años sumergido en el estudio de los filósofos alemanes Johann Fichte y Georg Hegel, así como de los enciclopedistas franceses, de los que sentía gran admiración.

En ese periodo se mudó a Berlín para completar su educación y convertirse en profesor universitario, pero estuvo poco tiempo. Luego de tres semestres, en el año 1842, se trasladó a Dresde, capital de Sajonia, donde se hizo amigo de Arnold Ruge, director de la revista radical en la que publicó su primer credo revolucionario.

Del activismo político a la prisión

A partir de 1844 Bakunin se traslada a París, Francia, y se integró al movimiento de filósofos y activistas revolucionarios que estaban en contra del sistema capitalista. Estuvo en contacto con Karl Marx, el anarquista Pierre-Joseph Proudhon y numerosos emigrantes polacos.

En 1847, Bakunin pronunció un polémico discurso en un banquete en París, en el que criticó al gobierno de Rusia y pidió una alianza entre los polacos y rusos contra el despotismo del zar. Esto le ocasionó la expulsión de Francia y su estadía por pocos meses en Bruselas.

Más tarde, a su regreso a París en el año 1848, Bakunin escribió su primer manifiesto importante, Un llamamiento a los eslavos, en el que denunció a la burguesía como una fuerza contrarrevolucionaria gastada. Además, pidió el derrocamiento del Imperio de los Habsburgo y la creación de una federación libre de pueblos eslavos.

En 1849, fue detenido por su participación en la Insurrección de Dresde de 1848 y deportado a su país natal. En Rusia fue encarcelado en San Petersburgo, en la fortaleza de San Pedro y San Pablo hasta 1854, luego en la fortaleza de Shlisselburg y desde 1857 desterrado a un campo de trabajos forzados en Siberia.

Regreso a la lucha revolucionaria

En 1861 Bakunin logró escapar, aprovechando un permiso, y se dirige a Japón, pasa por Estados Unidos y finalmente se establece en Inglaterra. Se une a una expedición fracasada para ayudar a Polonia en su insurrección contra Rusia.

Para 1864 la sociedad secreta que Bakunin había fundado a principios de década en Italia llamada la Fraternidad Internacional, había crecido entre miembros italianos, franceses, escandinavos y eslavos. En esa etapa desarrolla aún más su pensamiento y publica el Catecismo Revolucionario en 1866.

Un año más tarde se fundó la Liga de Paz y la Libertad entre burgueses demócratas de varias naciones y Bakunin fue elegido miembro del comité central. En 1868 ante la negativa de la Liga de adoptar resoluciones socialistas, un pequeño grupo se separó y, junto a la Fraternidad Internacional, fundaron una sociedad semi-secreta conocida como la Alianza Socialdemócrata.

El programa que reivindicaba la Alianza suponía la igualdad de sexos, la abolición de las clases sociales de la herencia, la organización de los obreros al margen de los partidos políticos y la supresión de los estados nacionales, para conformarse en federaciones agrícolas e industriales.

Propagación del anarquismo

A partir de 1869 Bakunin llevó adelante varios proyectos clandestinos con el revolucionario y nihilista ruso Serguéi Necháyev, de quien se distanciaría posteriormente. Además lideró un levantamiento fallido en la Comuna de Lyon.

En 1870 fundó el Comité para la Salvación de Francia y fue un firme defensor de la Comuna de París, que recibió una brutal represión del gobierno francés. Italia, España y la propia Francia recibieron la influencia de las ideas de Bakunin especialmente con el apoyo del italiano Giuseppe Fanelli.

En paralelo, Bakunin se unió a la Primera Internacional, una federación de partidos de clase trabajadora que buscaba transformar las sociedades capitalistas en comunidades socialistas.

No obstante, la incompatibilidad con Karl Marx, quien tenía gran influencia en la Primera Internacional, hizo que expulsaran al anarquista ruso y sus seguidores durante el Congreso de La Haya en 1872. La resolución se llevó a cabo a modo de tribunal puerta cerrada. Lo acusaron de haber fundado sociedades secretas, así como le rechazaron por su vinculación con Necháyev, quien fue arrestado pos asesinar a un compañero.

Desde entonces Bakunin y Marx mantuvieron la rivalidad, convirtiéndose el anarquismo bakuniano en la antítesis del comunismo marxista. En los años posteriores, el ruso se asoció con emigrantes de su país, así como polacos, serbios y rumanos, para planear organizaciones revolucionarias y redactar proclamas.

Últimos años

Suiza fue el país en el que Bakunin se retiró y pasó sus últimos años, junto a su esposa esposa Antonia Kwiatkowska y sus tres hijos. Primero se asentó en Lugano y luego en Berna.

Entre tanto su salud empeoraba, al igual que sus problemas financieros. El 1 de julio de 1876, a la edad de 62 años, falleció Mijaíl Bakunin en el hospital de Berna. Su tumba se puede encontrar en el cementerio Bremgarten de dicha ciudad.

Su discípulo, James Guillaume se encargaría de recopilar y editar todos sus libros, entre los años 1907 y 1913 desde París, Francia.

En 2016 los dadaístas del Cabaret Voltaire, adoptándolo como uno de ellos, colocaron en su tumba un dibujo del artista suizo Daniel Garbade hecho en bronce y una frase en alemán cuya traducción es la siguiente: “Quien no se atreve con lo imposible, nunca alcanzará lo posible”.

Pensamiento y teorías

Para este teórico político, los gobiernos habían nacido para proteger los derechos de los aristócratas y propietarios en detrimento de las clases bajas. No obstante, a diferencia de Marx, Bakunin no consideraba que el gobierno debía ser controlado por el llamado proletariado o clase trabajadora, sino destruirlo en su totalidad y no volver a conformarlo.

De hecho él rechazó toda forma de autoridad externa, incluyendo la idea de Dios. No importaba si era bajo acuerdo de todos los participantes o si emanaba del sufragio universal.

Los expertos consideran que las teorías y el pensamiento de Bakunin oscilaron en torno a los siguientes conceptos interrelacionados: libertad, socialismo, federalismo, antiestatismo, antiteísmo y diferencias con el marxismo.

Libertad

Era fiel creyente de la libertad de todos por igual, pero en un sentido real y desde un punto de vista social, no abstracto ni desde la individualidad. La libertad la considera “el desarrollo más completo de todas las facultades y poderes del ser humano, mediante la educación, la formación científica y la prosperidad material”.

Socialismo

El socialismo de Bakunin era conocido como “anarquismo colectivista”, que se basa en la abolición tanto de propiedad estatal como privada de los medios de producción. Estos pertenecerían al colectivo, por lo que serían controlados y administrados por los mismos productores, a través de sus propias asociaciones productivas.

La idea sería lograr la abolición también del dinero que sería reemplazado por notas laborales, o un salario,  determinado por la cantidad de tiempo dedicado a la producción. Esos salarios se utilizarían para comprar bienes en un mercado comunitario.

Antiestatismo

El anarquista ruso no veía una autoridad fija y constante, sino un intercambio continuo de autoridad y subordinación mutua, temporal y, sobre todo, voluntaria. Consideraba que solo tras el derrocamiento del Estado podría alcanzarse una sociedad más equitativa y justa.

Su propuesta es una organización antiestatista, conformada por comunas que se federaran entre sí para colaborar. A su vez estas se convirtieran en confederaciones aliadas y, así sucesivamente desde la base hasta la cumbre, desde la circunferencia hasta el centro.

Antiteísmo

Según Bakunin la religión se sustenta en el autoritarismo, el adoctrinamiento y el conformismo, por lo que la consideró perniciosa, al tiempo que aboga por el ateísmo. Planteaba en sus escritos que la idea de Dios suponía la abdicación de la razón, la justicia y la libertad del hombre.

Además revierte el famoso aforismo de Voltaire que decía que “si Dios no existiera, sería necesario inventarlo”, indicando por el contrario que “si Dios realmente existiera, sería necesario abolirlo”.

Diferencias con el marxismo

La creación de una sociedad libre y sin clases sociales es el objetivo final que comparten los anarquistas sociales y los marxistas, pero en el camino para alcanzarlo presentaron diferencias.

En el caso de los ideales de Bakunin debía establecerse una sociedad sin clases y sin Estados a través de la acción directa de las masas, de la colectividad revolucionaria, que se conformaría en mandos no formalizados, no visibles, sin partidos y sin siglas.

La propuesta del marxismo de un gobierno liderado por el proletariado era para los anarquistas una dictadura con nuevos protagonistas, pero dirigiría al mismo destino: convertirse en la “nueva clase” burocrática, perpetuarse en el poder y esclavizar al resto.

Obras

Libros y panfletos

-Dios y el Estado.

-Catecismo Revolucionario.

-La Comuna, la Iglesia y el Estado.

-Marxismo, libertad y estado.

-Socialismo sin estado: anarquismo.

-La inmoralidad del estado.

-Llamamiento a los eslavos.

-El Catecismo revolucionario.

-Estatismo y anarquía.

-El principio del Estado.

-Crítica y Acción.

-El Estado y la comuna.

-Federalismo, socialismo y antiteologismo.

Colecciones

-La Revolución social en Francia.Dos tomos.

-Obras completas. Cinco tomos.

-Escritos de filosofía política. Dos tomos. (Recopilación de G.P. Maksímov): Tomo I. Crítica de la sociedad. Tomo II. El anarquismo y sus tácticas. (Con biografía escrita por Max Nettlau) .

Frases

– “El Estado es un inmenso cementerio al que van a enterrarse todas las manifestaciones de la vida individual”.

– “Buscar mi felicidad en la felicidad de los otros, mi dignidad en la dignidad de los que me rodean, ser libre en la libertad de los otros, tal es todo mi credo, la aspiración de toda mi vida. He considerado que el más sagrado de todos mis deberes era rebelarme contra toda opresión, fuera cual fuere el autor o la víctima”.

– “Libertad sin socialismo es privilegio e injusticia; Socialismo sin libertad es esclavitud y brutalidad”.

– ”Todas las religiones, con sus dioses, semidioses, profetas, mesías y santos son el producto del capricho y la credulidad del hombre, quien no ha alcanzado todavía el desarrollo total y la personalidad completa de sus poderes intelectuales”.

– ”Hasta en las democracias más puras, como los Estados Unidos y Suiza, una minoría privilegiada detenta el poder contra la mayoría esclavizada”.

– “Libertad política sin igualdad económica es una pretensión, un fraude, una mentira; y los trabajadores no quieren mentiras“.

– ”Todo pueblo, provincia y municipio tienen derecho ilimitado a su completa independencia, con tal que su constitución interna no amenace la independencia y la libertad del territorio vecino”.

– ”Mira a toda la historia y convéncete de que, en todos los tiempos y países en que ha habido desarrollo y abundancia de vida, pensamiento y actividad creadora y libre, ha habido también disputa, lucha intelectual y social, lucha de partidos políticos… ”

– ”Ninguna legislación tuvo otro fin que consolidar un sistema de despojo del pueblo trabajador por medio de la clase dominante”.

– ”Los Estados poderosos sólo pueden sostenerse por el crimen. Los Estados pequeños sólo son virtuosos porque son débiles”.

Referencias

  1. Ryan, L. y Carr, E. (2019, 27 de junio). Mikhail Bakunin. Recuperado de britannica.com
  2. Mijaíl Bakunin. (2019, 28 de noviembre). Wikipedia, La enciclopedia libre.  Recuperado de es.wikipedia.org
  3. Wikipedia contributors. (2019, 09 de diciembre). Mikhail Bakunin. En Wikipedia, The Free Encyclopedia. Recuperado de en.wikipedia.org
  4. Mijaíl Bakunin. (2019, 08 de julio).Wikiquote, Compendio de frases célebres. Recuperado de wikiquote.org
  5. Mikhail Aleksandrovich Bakunin. (2018, 04 de octubre). New World Encyclopedia. Recuperado de org
  6. Mikhail Aleksandrovich Bakunin. (2018, October 4). New World Encyclopedia. Recuperado de com