Aileen Carol Wuornos: historia de una asesina de 7 hombres
Aileen Carol Wuornos (1956-2002) fue una asesina en serie estadounidense, acusada de matar a siete hombres en hechos aislados. La mujer argumentó en su defensa que cometió los crímenes en defensa propia. En su juicio aseguró que todas sus víctimas la habían violado o habían intentado hacerlo.
Investigadores aseguran que Wuornos no tuvo una vida fácil y desde muy joven se vio obligada a recurrir a la prostitución para sobrevivir. Fue abandonada por sus padres y sufrió todo tipo de abusos y violencia. Así se fue gestando una personalidad agresiva y arrastrando toda una serie de delitos que al final la convirtieron en un símbolo del horror.
Su historia se convirtió en una película en 2003. Ella y su abogado vendieron los derechos cinematográficos sobre su vida antes de que terminara el juicio y la condenaran. La cinta fue llamada Monster y fue protagonizada por Charlize Theron. Por su papel en la película, la actriz obtuvo el premio Óscar como mejor actriz.
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Aileen Carol Wuornos, cuyo primer nombre era Aileen Carol Pitman, nació el 29 de febrero de 1956, en Rochester, Míchigan, Estados Unidos. Sus padres eran Diane Wuornos Melini y Leo Arthur Pittman, dos adolescentes que se casaron a los 15 años. Su matrimonio duró menos de dos años y se separaron antes de que naciera Aileen.
La tragedia llegó a la vida de Aileen a muy corta edad. Pittman era un pederasta alcohólico, que además pasó un tiempo recluido en hospitales psiquiátricos en Kansas y Míchigan. Se ahorcó en 1969 cuando cumplía una condena en la cárcel.
Tras el divorcio, su madre fue incapaz de cuidar de ella y de su hermano Keith, quien era solo un año mayor. Así que en 1960 los dejó al cuidado de sus padres, Lauri y Britta Wuomos, quienes adoptaron a los niños legalmente.
Con tan solo 4 años, Aileen había sido abandonada por su madre. Ese sería el comienzo de una vida llena de abusos, violencia y maltratos. Su abuela era alcohólica y además era muy violenta. El abuelo, por su parte, comenzó a abusar física y sexualmente de ella desde que era pequeña.
Cuando tenía solo 12 años, Aileen y su hermano descubrieron que Lauri y Britta no eran sus padres biológicos, tal como lo habían creído, sino sus abuelos. Más tarde, la asesina confesaría que para esa edad, ya había tenido relaciones sexuales con diversas personas, entre ellas su propio hermano.
A la corta edad de 14 años quedó embarazada. El padre del bebé era desconocido. El 23 de marzo de 1971 la joven dio a luz en una casa de maternidad ubicada en Detroit y dio al niño en adopción. Fue echada de su casa y repudiada por la comunidad.
Aileen y su hermano finalmente dejaron la casa de sus abuelos. Y ese sería el inicio de una vida como vagabunda, que la llevaría posteriormente a la peor etapa de su vida. Primero comenzó a vivir dentro un coche abandonado y luego fue llevada a un refugio para madres solteras.
Ese mismo año, en 1971, su abuela murió. La razón fue una falla en el hígado como consecuencia del abuso de alcohol. Se supo que Diane, la madre de Aileen, acusó a Lauri (el abuelo) de haberla asesinado. Siendo todavía menores de edad, la custodia de los adolescentes pasó a manos de la Corte.
Cuando aún asistía a la escuela, la joven comenzó a trabajar como prostituta. Pronto empezó a usar el nombre de Sandra Kretsch en la calle; tener un alias es algo bastante común entre las prostitutas, quienes generalmente no revelan sus verdaderos datos a sus clientes.
Aileen comenzó a viajar por el país y en 1974 fue arrestada en Colorado por desorden público, por conducir ebria y disparar con una pistola desde un coche en movimiento. También se presentó un cargo adicional por no haberse presentado en el tribunal. Este sería el primero de los muchos arrestos que tendría en su vida.
Tras regresar a Michigan, en 1976, fue arrestada en Antrim County por golpear a un barman en la cabeza con una bola de billar. Unos cuantos días después, su hermano Keith falleció como consecuencia de un cáncer en la garganta, por lo que ella obtuvo 10 mil dólares de su seguro de vida. Luego de cobrar el dinero, pagó las múltiples multas que debía, se compró un auto y se costeó otros lujos hasta que finalmente se quedó sin recursos económicos.
A finales de 1976, viajó a Florida y allí conoció a un importante empresario. Se trataba de Lewis Fell, presidente del Club Naútico, quien tenía 76 años. Sin importar los 50 años de diferencia que se llevaban, la pareja se casó en 1976. La vida de Aileen podría haber cambiado en ese momento.
Pero aun así la joven se veía constantemente envuelta en enfrentamientos. No solo llegó a ser encarcelada por asalto sino que incluso llegó a golpear a su marido. A razón de esto, Fell solicitó una orden de alejamiento en su contra, además de la anulación del matrimonio. La unión duró solo seis semanas.
A partir de ese momento sus delitos se hicieron mucho más graves. En 1981 fue arrestada por robo a mano armada en una tienda en Edgewater, Florida. Salió en libertad en junio de 1983. Su siguiente arresto ocurrió en 1984, esta vez por falsificación de cheques.
En los años sucesivos la criminal fue detenida por diversos motivos: conducir sin licencia, robo de auto, resistirse al arresto, obstrucción de la justicia y amenaza a un hombre con un arma para robarlo.
A finales de 1986 Aileen conoció a Tyria Moore en un bar. Moore, quien tenía 28 años, dejó su empleo como mucama de un motel y dejó que su nueva amante la mantuviera. La relación entre ambas mujeres fue tormentosa desde el principio, pero se trataba de una relación codependiente.
Un tiempo después, la pasión entre ambas se desvaneció, pero continuaron siendo amigas inseparables. Las andanzas de la pareja de delincuentes se multiplicaron y Aileen llegó a utilizar diversos nombres falsos.
En 1987 fueron arrestadas en Daytona Beach por haber agredido a un hombre con una botella de cerveza. En diciembre de ese mismo año, fue denunciada por policías de tráfico por conducir con licencia caducada en la carretera interestatal.
Aileen Wuornos llevaba en su interior un odio y una agresividad que muy pronto se convertirían en un arma letal. La criminal combinó su inclinación al delito, con su amor por Tyria y su odio hacia los hombres para desquitarse con el mundo.
En una oportunidad Aileen llegó a confesar sus planes de desquitarse con los hombres al dueño de un bar de motociclistas y pandilleros que la delincuente solía visitar. El hombre no le dio mayor importancia, ya que estaba acostumbrado a sus borracheras.
Para aquella época comenzaron a llamarla “La mujer araña”, esto por su gusto por vestirse con ropa de cuero negro. Wuornos trabajaba de forma esporádica en bares y paradas de camiones. Y solía viajar con una pistola en su bolso.
El 13 de diciembre de 1989 apareció la primera víctima. Se trataba de un electricista de 51 años llamado Richard Mallory. Era aficionado al alcohol y a las mujeres. Pero Mallory también contaba con un historial delictivo.
Era un ex-convicto y un violador en serie. Más tarde, Aileen aseguró haberlo matado en defensa propia. El cuerpo de Mallory tenía tres disparos en el pecho y fue encontrado en los bosques cercanos a Daytona Bech. En aquel momento, las pistas no condujeron a ningún sospechoso y el caso se archivó.
Seis meses después, el 1 de junio de 1990 se encontró un segundo cuerpo. Un hombre desnudo había sido encontrado muerto cerca de Tampa. La víctima tenía seis disparos efectuados con una pistola calibre 22, tal como en el caso de Richard Mallory.
La policía identificó al hombre como David Spears, de 43 años. En ese momento se encontró otro cuerpo en las mismas circunstancias. Esta vez la víctima, identificado como Charles Carskaddo, tenía nueve disparos hechos con la misma pistola.
Un mes después Wuornos tomó la vida de otra persona. La cuarta víctima fue Peter Siems, de 65 años. Algunos testigos contaron a la policía que vieron a dos mujeres a bordo del auto de Siems.
Para noviembre de ese año, la cifra de hombres muertos de forma similar ascendieron a siete.
La policía fue presionada para solventar el caso, por lo que se publicaron retratos hablados de las dos asesinas. Tres semanas después, varias llamadas alertaron a la policía sobre las sospechosas, que fueron identificadas como Tyria Moore y Lee Blahovec (que era uno de alias de Aileen Wuornos).
Para obtener dinero, Aileen vendía pertenencias de sus víctimas. Así, a principios de diciembre de 1990, vendió una cámara y un detector de radar propiedad de Richard Mallory. Y posteriormente vendió una caja de herramientas de otra de sus víctimas.
En enero 1991, finalmente fue arrestada. Tyria Moore llegó a un acuerdo con la policía, en el que aceptaba testificar contra Aileen a cambio de inmunidad. Moore no fue acusada de ningún delito y se convirtió en una pieza clave en el juicio que posteriormente enfrentaría su examante.
El 16 de enero de 1991 Aileen se declaró culpable de los asesinatos. Pero alegó que todos fueron en defensa propia debido a que esos hombres habían intentado violarla. En el juicio también explicó su modus operandi.
Indicó que pasaba por autoestopistas. Después convencía a la víctima de tener relaciones sexuales y hacía que condujeran a un sitio alejado. Una vez allí la mataba, le quitaba todas las pertenencias y huía en el coche de la víctima. En ocasiones fingía tener problemas con su propio coche y al obtener la ayuda de alguien hacía lo mismo. Les ofrecía sexo y después los mataba.
El 27 de febrero de 1992 Aileen Wuornos fue encontrada culpable de homicidio en primer grado y el jurado recomendó la pena de muerte. El 30 de enero la asesina fue sentenciada a morir ejecutada mediante una inyección letal. Aunque fue procesada solo una vez por el asesinato de Richard Mallor fue declarada culpable de seis asesinatos más. En total la asesina fue condenada a seis penas de muerte.
En el año 2001 anunció que no solicitaría otra apelación contra su sentencia de muerte. Posteriormente presentó una petición para ejercer su derecho de despedir a su abogado y así detener las apelaciones en proceso. Aseguró que mató a esos hombres y les robó a sangre fría. Y que además sería capaz de volver a hacerlo.
Aileen fue evaluada por tres psiquiatras y todos la juzgaron mentalmente apta para ser ejecutada. La prisionera entendía que iba a morir y los crímenes por los que sería ejecutada. Y esta era la prueba de que no estaba enferma mentalmente.
Finalmente fue ejecutada el 9 de octubre de 2002 a las 9:47 de la mañana. La inyección letal que se le suministró incluía pentotal sódico, bromuro y cloruro de potasio. El procedimiento se llevó a cabo en la prisión estatal de Florida.
Wuornos se convirtió en la segunda mujer ejecutada en el estado de Florida desde que se restableció la pena de muerte en 1976. Se conoce que la primera fue una mujer llamada Judy Buenano. La ejecución ocurrió en 1998 y la razón de la sentencia fue el envenenamiento de su marido.
En el siguiente video se puede observar la última entrevista que se hizo a Wuornos: