Medicina

Waffles azules (enfermedad): síntomas, causas, ¿es real?


La enfermedad de los waffles azules o blue waffle es un término que comenzó a circular por Internet haciendo referencia a una supuesta enfermedad de transmisión sexual incurable, que afecta solo a las mujeres y que aparentemente produce una coloración azul o verde-azulado de la vagina.

Sin duda alguna este término generó pánico aunque infundado, dado que ni el CIE-9 ni el CIE-10 —compendios donde se incluye la descripción de todas las enfermedades conocidas hasta la fecha— incluyen este término ni ninguna descripción que se le parezca.

De manera que más que una enfermedad, es posible que se trate de un contenido viral que se propagó por Internet como pólvora, pero que en realidad no puso en peligro la vida de nadie. El término “enfermedad de los waffles azules” (blue waffles disease) llegó a ocupar el primer lugar en las búsquedas de Google. 

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¿Son los waffles azules una enfermedad real? 

La comunidad médica internacional, en especial los especialistas en ginecología, no han reportado ni un solo caso clínicamente bien sustanciado que respalde la existencia de esta enfermedad.

Por otra parte, no existe descripción de entidad alguna que se le parezca ni en los compendios de enfermedades como el CIE (Clasificación  Internacional de Enfermedades) ni en los textos de semiología. Tampoco existe publicación alguna en revistas científicas serias que haga pensar en que se trate de una enfermedad real.

Considerando lo antes expuesto, la respuesta a si se trata de una enfermedad real es un categórico no.

Síntomas asociados

Los síntomas más comunes de infecciones vaginales (que no necesariamente son enfermedades de transmisión sexual) son el flujo vaginal patológico, el dolor durante las relaciones sexuales y, en algunos casos, el mal olor.

Por otro lado, existen las infecciones de transmisión sexual como el VPH, sifílis y gonorrea, que en la mayoría de los casos son asintomáticas y no se detectan a menos que se hagan pruebas especiales.

Con relación al flujo vaginal, la descripción clásica incluye tres tipos principales de flujo:

– Flujo blanco, grumoso, como leche cortada y sin olor.

– Flujo marrón oscuro a pardo, con olor a pescado descompuesto.

– Flujo amarillo-verdoso, generalmente pruriginoso.

¿A qué podrían deberse los síntomas de la enfermedad de waffles azules? 

En este punto se cae en el terreno de la especulación, dado que al no haberse documentado ningún caso de manera seria y apegado a las normas de investigación clínica no se sabe muy bien qué se está describiendo. Entonces, determinar una causa es casi un ejercicio de adivinación empírico para una entidad nosológica ficticia.

Lo cierto es que no hay descripciones hasta la fecha de que la vagina tome una coloración azul por ningún tipo de infección.

Traumatismos

Sin embargo, no es descabellado pensar que debido a traumatismos, relaciones sexuales muy enérgicas, violación o algún otro tipo de agresión en el área genital alguna mujer pueda presentar hematomas en el área de la vagina y el periné.

Aun así, si este fuera el caso, cuesta creer que un médico experimentado haya confundido un hematoma con una nueva enfermedad infecciosa.

Tintura

Existe la posibilidad de que una verruga genital haya sido teñida con violeta de genciana, lo cual explicaría ese tipo de coloración; sin embargo, una vez más caemos en el territorio de la especulación.

Flujo

¿Y el flujo? Entre 40 y 50 % de las mujeres presentan flujo vaginal anormal, de manera que no es de extrañar que la supuesta enfermedad se asocie a descarga vaginal patológica, aunque lo más probable es que esto se deba a infecciones bien conocidas como la candidasis vaginal, la tricomoniasis o incluso la vaginosis bacteriana.

Causas 

Según las características del flujo, se puede hacer una aproximación diagnóstica al agente etiológico:

Flujo blanco, grumoso, como leche cortada y sin olor

Este flujo suele ser consecuencia de la candidiasis vaginal. La candida es un hongo que vive en la vagina sin producir molestias, pero que en ciertas condiciones crece más de lo normal generando una infección micótica. En estos casos el síntoma cardinal es la presencia de flujo anormal.

Flujo marrón oscuro a pardo, con olor a pescado descompuesto

Este tipo de flujo suele deberse a una infección por un protozoario conocido como tricomonas vaginales, el cual produce una infección llamada tricomoniasis.

El flujo suele ser muy molesto y el olor penetrante, asociándose en algunos casos a la dispareunia (dolor durante las relaciones sexuales).

En ocasiones el cáncer de cuello uterino también puede genera flujo oscuro, con trazas de sangre y mal olor, aunque en esos casos no es más penetrante y no recuerda el olor del pescado descompuesto.

Flujo amarillo-verdoso, generalmente pruriginoso

Este tipo de flujo suele deberse a infecciones bacterianas del tipo polimicrobiano (múltiples agentes causales).

Conocida otrora como vaginosis inespecífica y en la actualidad como vaginosis bacteriana, esta infección es bastante común. Aunque las características del flujo pueden llegar a ser alarmantes, no representa ningún peligro para la vida de la persona afectada.

Flujo azul

En el caso de la coloración azul de la mucosa vaginal, no existe una entidad nosológica bien establecida donde se describa un flujo con tales características.

Sin embargo no se puede descartar que algún tratamiento tópico como la violeta de genciana o la coloración de la mucosa vaginal con azul de metileno para algún estudio dé como resultado un flujo azulado por el pigmento residual.

En cuanto a los hematomas, resulta casi imposible, incluso para un ojo no entrenado, confundir un hematoma con otra condición médica, en especial porque suele haber una relación causa-efecto con un evento traumático previo, lo cual hace que el diagnóstico sea muy sencillo de realizar.

Tratamientos

Dado que no se trata de una enfermedad cuya existencia se haya confirmado, no hay tratamiento que recomendar para la misma. Sin embargo lo que sí se puede recomendar es la consulta regular con el ginecólogo, de manera que este indique los tratamientos que sean necesario según los hallazgos clínicos.

Uso de anticonceptivos de barrera

Por otra parte, se recomienda la prevención de infecciones vaginales así como de enfermedades de transmisión sexual mediante el uso de métodos de barrera (preservativos masculinos o femeninos), en especial si se mantienen relaciones sexuales esporádicas con desconocidos.

Consulta ginecológica

Es importante destacar que el cáncer de cuello uterino, una enfermedad real y potencialmente letal, sigue siendo la segunda causa de mortalidad femenina en muchas regiones del mundo. Esta sí debería causar una alarma real.

Por ello se recomienda la consulta con el ginecólogo una o dos veces al año y la pesquisa mediante citología de cuello uterino a toda mujer en edad fértil o con vida sexual activa.

Haciendo esto se podrán identificar no solo los casos de cáncer de cuello uterino, sino también las mujeres en riesgo, lo cual ayudará a disminuir las muertes por esta enfermedad, muy real y peligrosa, por la cual si se justifica estar preocupados.

Referencias

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